Álvaro Carreras, del Real Madrid, recibe una tarjeta amarilla en La Liga

Álvaro Carreras, del Real Madrid, recibe una tarjeta amarilla en La Liga EFE

Fútbol

El dato arbitral que indigna al Real Madrid: tienen que hacerle 20,2 faltas para sacar amarilla al rival; 4 veces más que al Barça

El sentir madridista sobre el perjuicio que sufren de los árbitros en La Liga se ve reforzado por estadísticas como esta.

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Al Real Madrid tienen que hacerle el cuádruple de faltas en La Liga en comparación a su eterno rival, el FC Barcelona, para que a sus rivales le saquen tarjeta amarilla.

Es una de las conclusiones que se sacan de los arbitrajes en las seis primeras jornadas del campeonato liguero español, en las que el Real Madrid se ha sentido igual o más perjudicado que en temporadas anteriores.

El club blanco trasladó una queja a la FIFA para dar a conocer los errores arbitrales pasadas las cuatro primeras jornadas de competición, mientras las tropelías continúan. El último caso: las dos rojas perdonadas al Atlético de Madrid contra el Rayo antes del derbi madrileño.

El sentimiento madridista se ve constatado en estadísticas como esta: el equipo de Xabi Alonso tiene que recibir 20,2 faltas para que sus rivales vean una cartulina amarilla, mientras que para los de Hansi Flick basta con sufrir 4,86 para que amonesten a sus oponentes, es decir, cuatro veces menos.

"Los datos son los datos", dijo Xabi Alonso en rueda de prensa a comienzos de semana cuando le dieron un dato parecido. Afinando el tiro —contando las amarillas por infracciones y excluyendo por protestas, pérdidas de tiempo o simulación— la cifra es aún más demoledora.

Los árbitros españoles permiten más juego brusco a los equipos cuando juegan contra el Real Madrid que cuando lo hacen contra el Barça. 

También existe un diferencia favorable de consideración en el número de faltas que ha de cometer el Barça para ver una amarilla respecto al Madrid —14,25 y 9,16, respectivamente—. 

El Barça tiene el mejor saldo

El Barcelona tiene el mejor saldo faltas/amarillas de La Liga, combinando las infracciones que cometen y sufren en sus partidos: +9,39.

Realidad completamente opuesta, la culé, a la de su principal competidor por el título y actual líder, el Real Madrid, que tras seis jornadas tiene el peor saldo entre los 20 equipos del campeonato: -11,09.

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Los de Xabi Alonso tienen también otro de los registros más dramáticos en relación a las faltas por amarilla. En el partido de la jornada 5 contra el Espanyol, disputado en el Santiago Bernabéu, el Madrid sufrió 20 faltas y su rival no vio ninguna cartulina.

Los rivales del Madrid en seis jornadas han visto cuatro amarillas por un total de 81 faltas —además de una roja, a Bretones (Osasuna), en el descuento del partido—. En el caso del Barça, se han necesitado 68 faltas para un total de 14 cartulinas para sus rivales —más la expulsión directa. Muriqi (Mallorca) en la jornada 1—.

De estas 14 amonestaciones para los rivales del Barça, el reparto por tiempo es el siguiente: tres en la primera media hora, nueve del 31' al 60' y tres en los 30 minutos finales de los partidos. En cuanto a las de los oponentes merengues: una hasta el 30', otra en la media hora intermedia y dos en la final.

Estos datos excluyen otro tipos de amarillas, como las protestas —también de entrenadores—, pérdidas de tiempo y simulaciones. Aunque en estas también gana el Barça, en cuanto a las recibidas por sus rivales, sobre el Madrid: 5 a 2.

Lewandowski celebra su gol durante el Oviedo - Barcelona

Lewandowski celebra su gol durante el Oviedo - Barcelona EFE

En definitiva, el Barça es líder a la baja en las faltas que le tienen que hacer para ver amarilla, como lo es al alza en las que tiene que hacer él para que le enseñen cartulina. 

El Madrid, por su parte, queda a la cola con el peor saldo en este aspecto de toda La Liga y con un profundo desazón. No hacen falta siquiera grandes polémicas para que exista una diferenciación arbitral. Con decisiones más 'invisibles' también se pueden decantar campeonatos.