Casemiro y Kompany, en el partido de ida.

Casemiro y Kompany, en el partido de ida. Paul Gilham Getty

Fútbol

Cómo jugar sin Casemiro

El debate ante la ausencia del brasileño revela su papel central en este Madrid. Kovacic, Kroos, Pepe y Ramos podrían ocupar su lugar como pivote defensivo: ninguna opción tranquiliza del todo a la afición.

4 mayo, 2016 01:42

Noticias relacionadas

Karim Benzema está también fuera de la convocatoria para el partido más importante de la temporada, pero las conversaciones giran en torno a Casemiro, aquel chico que llegó por sólo 6 millones de euros en 2013 (sin hacer ruido). ¿Puede dudar alguien a estas alturas del año que el Real Madrid es más competitivo cuando juega Casemiro? Hasta Simeone lo ratificó hace unas semanas: “Le ha dado más estabilidad al Madrid”.

El de Sao Paulo fue, tras Pepe, el mejor madridista en el partido de hace una semana. Es el guardaespaldas de todos, el factor equilibrador de una de las plantillas más caras del mundo. Tiene 24 años y quizá no sea un mediocentro para la leyenda, al estilo de Xabi Alonso o Busquets, pero sí ha demostrado ser un futbolista extraordinariamente generoso que compensa los desajustes defensivos de un equipo repleto de mediapuntas.

"Ejemplo para todos nosotros"

Muy potente físicamente y con un acusadísimo sentido de la colocación, no tiene la salida de balón ni el pase de las estrellas mencionadas anteriormente; en términos defensivos, sin embargo, su labor es crucial: este año en Champions es líder del equipo en cuatro conceptos: entradas, anticipaciones, faltas cometidas y faltas recibidas. Modric proclamó hace diez días que para él “es el ejemplo para todos nosotros de cómo con trabajo y dedicación puedes hacer cosas grandes. Aporta mucho en este equipo”.

Zidane es devoto del 4-3-3 (“la ‘BBC’ siempre jugará”, avisó en su primera rueda de prensa) y había encontrado en el trío Modric-Kroos-Casemiro su medular ideal. Lo estrenó contra la Roma a comienzos de marzo (2-0). Diez días antes, el Atleti había vuelto a desnudar al equipo en casa (0-1) con el trío Modric-Kroos-Isco, la opción predilecta del francés cuando sustituyó a Benítez. Desde la vuelta contra la Roma la tripleta ha jugado todos los partidos estelares. Los números avalan su rendimiento: el Madrid no ha encajado goles en cinco de los siete choques disputados y recibe menos remates que en los dos primeros tercios de la temporada. La progresiva irrelevancia e Isco es proporcional a la consolidación de Casemiro.

Las alternativas de Zidane para reemplazar a Casemiro frente al City son las siguientes:

Los 'jugones': Isco o James, con Kroos de '5'

La presencia en la alineación inicial de cualquiera de los dos 'cracks' damnificados esta temporada situaría a Toni Kroos (un mediapunta reconvertido) en la posición de ‘cinco’. El madridismo, en general, recela de esta opción tras haber asistido a varias derrotas duras contra equipos grandes esta temporada con un trío creativo. El alemán es líder en pases realizados del equipo, aunque su influencia en el juego de ataque es sensiblemente inferior al de Luka Modric (el jugador que más pases da en campo contrario). En el capítulo defensivo también es más efectivo el croata, pese a la mejoría de un alemán que a veces parece algo desubicado, en tierra de nadie, añorante de su condición original.

Zidane fue preguntado por el alemán en la rueda de prensa previa al encuentro. “Kroos, como todos, tiene que defender”, respondió el técnico blanco: “Cuando no tienes el balón lo que tienes que hacer es defender, como lo hacemos últimamente, como conjunto. Para no defender hay que tener el balón”. El hermetismo habitual del francés complica las elucubraciones, pero la titularidad de Isco o James sería una buena noticia para Agüero, De Bruyne y compañía. (Y para el público en televisión, que contemplaría un partido más abierto).

Los centrales: Pepe o Ramos

El plan B es colocar un pivote ultradefensivo en media cancha y alinear de inicio a Varane en la defensa. El ‘trivote’ con Pepe fue un invento de Mourinho en los enfrentamientos ante el Barça en la temporada 2010-2011. Levantó ampollas, aunque no le fue del todo mal antes de la famosa expulsión: en tres partidos sumó un empate, una victoria y una derrota contra el mejor equipo del mundo. El central portugués fue el mejor merengue en Manchester y tiene más experiencia en la medular que Ramos: sería una opción llamativa, pero no demasiado sorprendente.

Utilizar al capitán merengue generaría dudas por el estado físico del sevillano (que viene mejorando, sin embargo, en el último mes) y por los dos últimos precedentes: con Ancelotti, en la campaña 2013-14, el Madrid perdió en el Camp Nou y su técnico acabó agradeciéndole el favor, pero reconociendo que “había sido un error”. El año pasado, también en semifinales de Champions, el italiano volvió a utilizarle en ese puesto y los blancos firmaron un pésimo encuentro. Este año no le ha tocado todavía adelantar su posición.

Kovacic

Físicamente poderoso y capaz de jugar en varias posiciones, el croata hubiese sido probablemente la primera opción si Benítez siguiese en Madrid: Zidane ha refrendado la inclinación del madrileño por Casemiro y Lucas, pero el corata que llegó de Milán ha perdido protagonismo desde Navidades. Es el mediocampista con menos tiempo jugado en Liga y, por ejemplo, el sábado pasado en Anoeta (pese a ser un partido de rotaciones) disputó sólo cinco minutos. Su titularidad sería una enorme sorpresa.

ataque-RM-Manchester1

ataque-RM-Manchester1

Casemiro ya participó (aunque sólo fuese media hora) en la Décima: concretamente, en un partido en Dortmund. “Cuando salí al campo todo ocurrió perfecto, tal y como quería. Fueron 25 minutos, pero estoy seguro de que con mi trabajo ayudé mucho al equipo en ese momento. Así que me sentí muy importante con la Décima, algo que siempre quería”, dijo posteriormente en una entrevista. Después se mudó a Oporto.

Nunca imaginó que dos años después su ausencia por un golpe en la cadera alarmaría de semejante manera al madridismo. Zidane dijo el martes que “Casemiro es Casemiro, pero el jugador que juegue hará el mismo trabajo”. Su afición no lo tiene tan claro. Al menos en una cosa, Benítez tuvo seguro razón. Fue el primero en apostar por el brasileño, pero se arrugó el día clave: contra el Barcelona en el Bernabéu (0-4). Si hubiese sido fiel a sí mismo, probablemente hubiese resistido más tiempo en el cargo. Sólo Lucas (otra predilección de Benítez) ha crecido tanto en el Madrid en una temporada insólita que ha evitado toda sospecha de que el brasileño al que apodaban 'Casemarro' vuelva a emigrar en verano.