Siempre intento buscarle utilidad a todo, la verdad es que me cuesta muchísimo tirar cosas que creo que pueden servir para algo. También es cierto que luego me toca organizar una mudanza y todo lo que está en espera de ser reutilizado acaba en el contenedor correspondiente por aquello de aligerar el equipaje.

Y es que hoy en día con internet, que es facilísimo encontrar mil ideas a partir de las que inspirarse para convertir algo aparentemente inútil en algo útil, bonito y con la satisfacción de que es algo hecho por nosotros mismos, reutilizar cosas es un hobby que engancha y mucho. Por ejemplo, hoy os propongo 6 maneras de reutilizar tarros de cristal, los de las conservas, que con frecuencia entran en nuestras alacenas y casi con la misma frecuencia acaban en el cubo de la basura. Los mismos que ya hemos visto que se pueden usar para llevarnos la ensalada al trabajo, para hacernos una lámpara o para servirnos una refrescante limonada.

6 maneras originales de reutilizar tarros de cristal

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Una tabla de madera que puede proceder, por ejemplo, de un palet viejo de los que tiran casi a diario en cualquier almacén, unas bridas metálicas que son baratísimas y unos cuantos tarros de cristal vacíos es lo que necesitamos para construir este organizador para objetos pequeños del baño como algodones, brochas de maquillaje, bastoncillos, etc. En The DIY Playbook explican con todo detalle cómo fabricarlo y hasta podéis encontrar un vídeo con todo el proceso.

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Un poco de pintura y podremos convertir cualquier tarro de cristal en un original florero o en un personalísimo centro combinando varias formas y colores. Los de la izquierda están pintados por fuera con pintura en spray y son de Mason Jar Crafts Love, los del centro están pintados con pintura de látex pero por dentro, y es tan fácil como echar un poco de pintura dentro, hacer girar el tarro y ponerlo boca abajo tal como podéis ver en One Good Thing. Los de la derecha se consiguen usando plantillas para las letras y las líneas de la base y pintando el resto con pintura acrílica y pincel de espuma, los he visto en Joann.

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O se pueden reutilizar tarros de cristal para convertirlos en estos portavelas de inspiración árabe pintando los frascos con laca para bombillas y haciendo las decoraciones con pintura hinchable de la que se usa para manualidades. Yo los he visto en Pinterest.

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Lo sé, el sitio oficial de guardar las cosas de costura es una lata azul vacía que llegó a casa llena de galletas de mantequilla danesas, pero a muchos les falta espacio y les sobra caja para guardar las 4 hebras de hilo y los dos botones del costurero para emergencias y mirad qué apañado es este cuyo paso a paso podéis ver en Momtastic.

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Aunque también puede ser que la caja azul de las galletas se te quede pequeña para guardar lanas e hilos. Si es así, estos tarros de cristal convertidos en dispensadores de hilo/lana son una idea genial para que no enreden ni se ensucien y fabricarlos es tan simple como hacer un pequeño agujero en la tapa mismo con un sacacorchos o un clavo. Me los he encontrado aquí.

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Y algo tan simple como original para reutilizar tarros de cristal que sean cilíndricos, usarlos como portafotos, que aunque solo con verlo es fácil hacerse una idea de cómo es el invento, en Photojojo tenéis fotografías explicando los pasos que las fotografías encajen a la perfección.

Estoy segura de que a partir de ahora os lo vais a pensar dos veces antes de tirar los tarros de cristal a la basura, ¿verdad?