Uno de los alimentos que mejor definen el verano es posiblemente la sandía, es llegar la época estival y empiezan a aparecer sandías por todas partes, pues ahora es su mejor momento. Y también es el mejor momento del año para disfrutar de esta sopa fría de sandía.

Ingredientes para hacer sopa de sandía

  • Sandía sin pepitas y sin piel, 500 g
  • Tomates, 500 g
  • Albahaca fresca, 6 hojas y alguna más para decorar
  • Yogur natural, 250 g
  • Aceite de oliva virgen extra, 3 cucharadas
  • Vinagre, 1 cucharada
  • Sal, al gusto
  • Queso feta, 30 g para decorar (opcional)
  • Aceitunas negras, 4 para decorar (opcional)

01: Preparar los ingredientes

Foto: Cristina López

Troceamos la sandía y los tomates. Estos últimos podemos pelarlos antes de trocearlos para obtener un resultado más fino, pero si vamos con prisa, tenemos también la opción de colar la sopa fría de sandía una vez triturada para retirar cualquier resto de piel o semilla.

02: Triturar y emulsionar la sopa fría de sandía

Foto: Cristina López

Para triturar nuestra sopa de sandía podemos usar desde una sencilla batidora de brazo, hasta un robot de cocina multifunción tipo Thermomix o Monsieur Cuisine. Aparte de estos últimos, para este tipo de recetas los mejores resultados se obtienen con batidoras de vaso americano.

Ponemos en el vaso la sandía, los tomates, las hojas de albahaca, el yogur, el aceite, el vinagre y la sal. Trituramos hasta tener una mezcla homogénea y emulsionada. Probamos y rectificamos de sal y vinagre si fuese necesario. 

Colamos para que la textura quede muy fina y guardamos en la nevera hasta el momento de servir.

03: Servir

Servimos la sopa fría de sandía en cuencos individuales y decoramos con un poco de albahaca picada, una pizca de queso feta rallado y unos aros de aceitunas negras o los servimos aparte a modo de tropezones para que cada cual elija si prefiere tomarlo con o sin tropezones.

Consejos para consumir sandías en verano

La sandía es una fruta que contiene gran cantidad de agua y muy pocas calorías, así que no te cortes a la hora de introducirla en todo tipo de platos, tanto dulces como salados. Te ayudará a mantenerte bien hidratado en los días de calor extremo y su sabor dulce te ayudará a no caer en la tentación de consumir otro tipo de refrescos menos saludables.

Foto: Cristina López

En recetas dulces, puedes usarla en batidos, en helados y granizados, incluso puedes hacer trozos del tamaño aproximado de un polo helado, ponerles un palito y congelarlos. En unas horas tendrás los polos de helado más sanos que puedes comer.

En recetas saladas, puedes preparar ensaladas y sopas frías o gazpachos, y para ello puedes aprovechar aquellas sandías que resultan estar un poco más verdes de lo que esperabas y aún no tienen mucho sabor. Un poco de aceite, sal y vinagre, potenciará mucho su sabor y dará como resultado una ensalada saciante, refrescante y con muy pocas calorías.

Cómo elegir las mejores sandías

Si no estás muy ducho en el arte de elegir melones y sandías, no te preocupes, en realidad es más fácil de lo que parece y una vez que te cuentan cuáles son los trucos para elegir melones y sandías en su punto ya sueles acertar casi siempre y cuando no, te acercas bastante. 

Así que ya sabes, dale a las sandías todas las oportunidades que se merecen y disfruta de ellas de todas las formas posibles. Recuerda también que somos un poco cotillas y que queremos ver las recetas que prepares con sandía, así que ya sabes, apunta,  dispara con la cámara y sube a la foto a las redes sociales etiquetándonos en Facebook o en Instagram.