Receta fácil la de estos chipirones a la plancha con crema de ajos y su tinta, pero con un resultado espectacular: un sabor exquisito, una presencia superapetecible y tremendamente provocativa en una receta ligera, muy rica en proteínas y con muy pocos carbohidratos.

Ingredientes

  • Chipirones frescos (12-15 cm de tamaño), 600 g
  • 20 dientes de ajo
  • 100 ml de nata líquida
  • 8 g de tinta de calamar o de sepia
  • Perejil
  • Zumo de limón
  • Aceite de oliva suave
  • Aceite de oliva Virgen Extra
  • Sal
  • Sal en escamas

Cómo hacer unos sabrosos chipirones a la plancha con una original crema de ajos y su tinta

01: Limpiamos los chipirones

Limpiar los chipirones es una tarea un tanto pesada cuando se limpian gran cantidad de ellos, pero que pueda llegar a ser un tanto ardua no quita para que sea muy sencilla. No te preocupes, a nada que tengas un poco de confianza con el pescadero, lo hará por ti si se lo pides.

Pero si decides ponerte al lío, verás que no es difícil, cogemos el chipirón e introducimos el dedo índice hasta el fondo del cuerpo del chipirón, justo por donde se intuye que se sitúa su concha en forma de pluma transparente, y tiramos del interior hacia afuera, procurando vaciar su interior por completo.

Una vez sacados los interiores del chipirón, repasamos el interior del cuerpo del chipirón para retirar todas las membranas que pudieran haberse quedado dentro. En ningún caso retiraremos la piel del chipirón, ya que le da mucho sabor y carácter, especialmente cuando el chipirón es cocinado a la plancha.

Por otro lado, de todos sus interiores debemos rescatar una especie de lengua con forma de cococha. Esta cococha se localiza justo por encima de las patas y de la boca y se distingue como una lengüeta blanca que sobresale ligeramente. Tirando suavemente de ella hacia abajo, sacaremos toda esta cococha de una sola pieza y perfectamente limpia. Rellenaremos cada cuerpo de chipirón con la cococha que acabamos de rescatar de sus interiores.

Por ultimo, debemos conseguir rescatar las patas del chipirón. Para ello, apretamos las patas del chipirón por su parte superior para que de este modo la esfera que compone su boca sobresalga por abajo. Tiramos de ella con la otra mano para retirarla por completo. Cortamos entonces las patas con la mano o con la ayuda de unas tijeras.

Reservamos las patas de los chipirones así como los cuerpos rellenos de las cocochas. Desechamos el resto.

02: Confitamos los ajos para comenzar a preparar la crema de ajos y su tinta

Para preparar nuestra crema negra de ajos y tinta de calamar vamos a partir de una buena cantidad de dientes de ajo. No os asustéis pensando en que un cantidad tal de ajo hará que la crema quede muy fuerte e intensa, todo lo contrario: esta crema de ajos y tinta es muy suave y sutil y para nada invasiva.

Para lograr que esta crema de ajos quede tan delicada, lo primero que debemos hacer es confitar los ajos. Para ello, debemos pelar todos los dientes de ajo y colocarlos en un cazo estrecho y alto. Cubrimos los ajos con aceite de oliva suave y dejamos que se confiten (que se cocinen sin llegar a freírse, a fuego muy pausado) muy suavemente. Confitamos los ajos durante 15 minutos.

03: Terminamos nuestra crema de ajos añadiendo la tinta de calamar

Una vez confitados los ajos, los escurrimos y los colocamos en otro cazo. Añadimos a los ajos confitados la nata líquida y la tinta de calamar.

Cocinamos nuestra crema de ajos de nuevo a fuego muy pausado, para que los ajos terminen de cocinarse y la crema no se nos agarre.

Trituramos la crema de ajos y tinta y la pasamos por el chino para que quede bien fina y sin grumos y no tenga trozos de ajo.

04: Preparamos el aliño de nuestros chipirones a la plancha con crema de ajos y su tinta

Vertemos parte del aceite de confitar los ajos, ya frío, a un vaso batidor. Añadimos unas cuantas hojas de perejil fresco picadas toscamente y un buen chorro de zumo de limón. Trituramos con la batidora hasta que el perejil quede bien picado y el aceite tenga un aspecto uniforme.

Este sencillo aceite servirá de aliño para nuestros chipirones a la plancha con crema de ajos y de su tinta.

05: Cocinamos los chipirones a la plancha y los servimos con la crema de ajos y su tinta y el aceite aromatizado

La cocción de los chipirones debe ser muy corta y a un fuego intenso, para que no se nos recuezan ni se encojan y endurezcan.

Ponemos la plancha o sartén a fuego medio-alto hasta que esta esté bien caliente, añadimos un hilo de aceite de oliva Virgen Extra y posamos los cuerpos de los chipirones sobre ella, sin que se apelotonen unos con otros (si es necesario los cocinaremos en varias tantas). Dejaremos que los chipirones se cocinen medio minuto o un minuto (si fueran de gran tamaño) como máximo por cada lado.

Retiramos del fuego y salamos una vez cocinados, para evitar que suelten agua mientras se cocinan a la plancha. Hacemos lo mismo con las patas de los chipirones, aunque en este caso unos pocos segundos serán suficientes para que estén perfectamente hechas.

06: Servir los chipirones a la plancha con crema de ajos y su tinta

Para servir nuestros chipirones a la plancha con crema de ajos y su tinta colocamos una fuente amplia y alargada y dibujamos una línea gruesa en su centro con la crema de ajos y tinta, ayudándonos de un pincel de silicona. Disponemos sobre ella los cuerpos de los chipirones recién plancheados y bien calientes, de modo que sobresalgan por ambos lados de la línea que hemos dibujado con la crema negra de ajos.

En el extremo del chipirón en el que naturalmente irían las patas, colocamos un punto de la crema de ajos y tinta sobre el plato y posamos sobre él las patas del chipirón. Hacemos lo propio con todos y cada uno de los chipirones.

Removemos el aceite aromatizado de ajo, limón y perejil y lo echamos sobre los chipirones a la plancha.

Terminamos de servir los chipirones a la plancha con crema de ajos y de su tinta añadiendo un poco de sal en escamas sobre cada chipirón y sobre sus patas.

Resultado

Receta esta de chipirones a la plancha con crema de ajos y su tinta muy sencilla y rápida de elaborar pero que, con un par de golpes de originalidad y un emplatado con un poco de interés, te hará quedar como un perfecto anfitrión. ¡Unos buenos chipirones a la plancha elaborados con un poco de mimo son una absoluta delicia!

El aceite de confitar los ajos que os sobre no se os ocurra tirarlo, es un aceite maravilloso para aliños, para cocinar pescado o simplemente para freír unas simples patatas fritas.

Además del aliño del aceite aromatizado con ajo, limón y perejil podéis desglasar la plancha o la sartén donde cocinéis los chipirones con unas gotas de vino blanco y/o del propio zumo de limón y rociar ese jugo también sobre los chipirones a la plancha una vez emplatados. Eso sí, hacedlo con mesura ya que este desglasado está lleno de intensidad.