A la izquierda el mapa del clima de este miércoles, a la derecha el de este viernes

A la izquierda el mapa del clima de este miércoles, a la derecha el de este viernes E.E.

Salud Meteorología

Así afecta a la salud el nuevo delirio metereológico de la primavera

Aunque pueda afectar al sistema inmunitario, "no lo hace espectacularmente", explica un médico de familia.

17 mayo, 2019 02:13

Noticias relacionadas

El refranero español tiene expresiones para todos los gustos y no podían faltar los refranes dedicados al clima. Uno de los más populares -y que seguramente estés escuchando mucho estos días- es "hasta el 40 de mayo no te quites el sayo". La expresión tan típica en nuestro país recomienda que no abandonemos la chaqueta hasta el 9 de junio, ya que un día parece verano y al siguiente invierno. Y como estamos en pleno mayo, estamos viviendo en el proverbio: desde este viernes, vuelve el frío de golpe tras la racha de calor, con caídas "extraordinarias" de hasta -17 ºC.

Parece que el tiempo se ha vuelto loco y los españoles con el: un día en pantalón corto y al siguiente con abrigo. Estos cambios constantes que estamos viviendo en tan pocos días pueden tener un efecto negativo en nuestra salud "porque el cuerpo no llega a adaptarse a las altas o a las bajas temperaturas", explica a EL ESPAÑOL Jesús María Iturralde, médico de familia del Centro de Salud La Habana-Cuba de Vitoria. Cuando nuestro cuerpo comienza a adaptarse a las altas temperaturas para convivir con ellas, de repente vuelve el frío, por lo que nuestro sistema inmunitario puede verse afectado, especialmente en los grupos de población más vulnerables: niños y ancianos.

Y es que este conjunto de estructuras que cuidan nuestra salud "se regula mucho a nivel hormonal", señala el especialista, que también es secretario del grupo de trabajo de actividades preventivas y salud pública de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen). Pero matiza que, aunque pueda afectar al sistema inmunitario, "no lo hace espectacularmente". "Pero en algunos casos se nota en cuanto a infecciones", añade. 

Para el médico, "sobre todo el problema de los cambios tan rápidos es el balance hídrico". Y es que si estamos en verano -como tal- somos conscientes de que tenemos que beber más agua, pero con estos cambios de temperaturas se nos puede olvidar y podría dar lugar a, por ejemplo, deshidrataciones o golpes de calor. 

Respecto al estado de ánimo, "las hormonas se vuelven locas con tanto cambio de temperaturas". "Nuestro cuerpo estacionalmente tiene sus altibajos a nivel hormonal: estamos más o menos activos". "Por ello, esos cambios de temperaturas que nuestro organismo vive de un día para otro, obviamente afecta a cómo nos sentimos".

Si hablamos de alergias, el especialista explica que "de un día para otro no cambia demasiado la cosa". Por lo que, a pesar del frío, las personas que las sufren seguirán en la misma situación, salvo en los lugares que llueva, como sucede en el norte peninsular. 

En concreto, para evitar enfermar, el médico vasco aconseja estos días consultar el tiempo en las plataformas digitales antes de salir a la calle para ir adecuadamente vestidos, y así evitar pasar calor o frío. 

Por su parte, Vicente Baos, médico de atención primaria en el Centro de Salud de Collado Villalba Pueblo (Madrid), matiza que "es muy común que haya estas diferencias térmicas en esta época del año". "Simplemente hay que abrigarse un poco más o un poco menos y ya está". "Nuestro cuerpo tiene un equilibrio bastante importante para tolerar este tipo de cosas", aclara el especialista, que también es el autor del blog de divulgación El Supositorio.

El experto, que insiste en que estos cambios térmicos no suponen un gran problema, simplifica: "El que se haya quitado la chaqueta y vaya en pantalón corto que se vuelvan a poner el largo y saque la chaqueta". "Tampoco viene una glaciación", bromea.

Por otro lado, aunque no esté asociado directamente a estos cambios de temperatura propios de la primavera, los cambios bruscos de termómetro vinculados con el cambio climático, pueden aumentar el número de infartos de corazón y afectar a la salud cardíaca global aún encontrándose en zonas a cubierto, según un estudio de la Universidad de Michigan publicado en la revista Science.

[Más información: Alerta con los cambios bruscos de temperatura: aumentan el riesgo de infarto].