Imagen de archivo de la playa de la Malvarrosa en Valencia.

Imagen de archivo de la playa de la Malvarrosa en Valencia. Kai Forsterling EFE

Meteorología

El espejismo del 'julio frío': por qué las temperaturas de este mes confirman que continúa el calentamiento en España

Este mes comenzó y terminó con temperaturas por debajo de lo normal. Aun así, en su conjunto ha sido cálido, incluso si se compara con años anteriores.

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Pablo García Santos
Publicada

Pese a que el mes de junio batió todos los récords de temperatura en España, el de julio comenzó con una masa de aire frío que provocó un descenso pronunciado de los termómetros.

Este inicio hacía pensar que quizás podría ser un mes fresco, reflejo del "tiempo loco" al que nos vamos a tener que acostumbrar, como ya están avisando los expertos.

Sin embargo, las previsiones meteorológicas apuntaban a que el mes de julio iba a continuar con temperaturas por encima de la media histórica en la totalidad del territorio nacional.

Todo apunta a que será así y que julio acabará siendo cálido, con una temperatura media que se situaría unos 0,8 ºC por encima de lo normal.

Cálido junto con junio

Con esta cifra, el bimestre junio-julio se convertiría en uno de los dos más cálidos desde 1961, empatando con el de 2022.

Según los datos provisionales de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), ambos periodos alcanzarían una temperatura media de 23,8 ºC.

Se supera así a otros años cálidos como 2015 (23,3 ºC), 2017 (23,2 ºC) y los 23 ºC de 2003 y 2005.

De los 10 bimestres junio-julio más calurosos desde que hay registro, solo uno ha ocurrido en el siglo XX.

En cuanto a los datos en lo que va de 2025, entre enero y julio la temperatura media en España se situaría en 14,5 ºC, empatando con la del pasado año.

Aunque en plena canícula (la época más cálida del año, que comienza el 15 de julio) se hayan registrado temperaturas más suaves de lo habitual, siguen predominando los periodos con valores altos.

La continuación de esta tendencia ya se observaba incluso antes de la canícula: en la Comunidad Valenciana, la primera decena de julio fue hasta 2,8º más cálida que el promedio de referencia.

Es cierto que mientras en el sur de Europa se sufría una de las peores olas de calor que se recuerda, en España se registraban 8 ºC menos de lo normal.

Aun así, el calor ha protagonizado buena parte del mes, especialmente en la segunda mitad.

En este último periodo, ha habido varias comunidades con aviso naranja (riesgo importante) por temperaturas máximas que alcanzaban los 42 ºC.

Una cúpula de calor

Con todo, hay quienes tienen la sensación de que ha sido un mes "fresco".

Pero, como apunta a EL ESPAÑOL la meteoróloga de Eltiempo.es Mar Gómez, la realidad es que "ha sido especialmente cálido".

Y al igual que sucedió en junio, son varios los motivos por los que se han dado temperaturas muy altas.

La primera causa se sitúa a principios de mes, cuando una persistente cúpula de calor (heat dome, en inglés) se instaló sobre la Península.

Este fenómeno, que evita que se disperse el aire caliente, provocó que los termómetros marcaran más de 40 ºC en "numerosas regiones del sur y centro de España".

Además, la temperatura superficial que se ha registrado en el Mediterráneo ha sido inusualmente alta, con anomalías que llegaron hasta 6 ºC por encima de lo normal.

Este calentamiento del mar ha potenciado de manera significativa el calor en las zonas costeras, llegando a causar "noches excepcionalmente cálidas que apenas permitían alivio térmico".

Ausencia de lluvia

A mediados de mes, una dana entró por el norte peninsular, dejando algunas regiones en alerta naranja por lluvias. Sin embargo, se ha caracterizado por "la casi total ausencia de precipitaciones".

A ello se le suma una intensa presencia de dorsales anticiclónicas que trajo aire cálido procedente del norte de África, "recalentando aún más la atmósfera y disparando las temperaturas diurnas y nocturnas".

"Detrás de todo esto está el impacto del cambio climático, que aumenta la frecuencia e intensidad de fenómenos extremos como las olas de calor", apunta Gómez.

Este año, no obstante, no ha habido ninguna ola de calor que se haya iniciado en el mes de julio. Algo que no ocurría desde 2017.

Episodios puntuales de 'frío'

Sí que se han registrado "temperaturas más frescas de lo esperado", incluso durante la canícula, lo cual "no suele ser habitual".

Estos episodios se han debido a factores meteorológicos, como la entrada inesperada de masas de aire más frescas procedentes del Atlántico.

Esta masa de aire es la que también ha provocado que en la última semana del mes se hayan registrado temperaturas hasta 8 ºC por debajo de lo normal en algunas zonas.

Este episodio puntual, sin embargo, "no implica necesariamente que el mes deje de ser cálido en su conjunto".

A la espera de conocer los datos de todas las estaciones meteorológicas, los de algunas ya demuestran que este julio no ha sido el más fresco de las últimas décadas.

En la de Madrid - Retiro, por ejemplo, ha habido hasta 13 meses de julio más fríos que el actual.

"Aunque algunos días aislados sean más frescos de lo habitual, si la mayor parte del mes ha sido calurosa, la temperatura media final va a seguir reflejando condiciones cálidas", concluye Gómez.