El procurador del Grupo Popular en las Cortes de Castilla y León, Ramiro Ruiz Medrano, durante la entrevista con EL ESPAÑOL de Castilla y León

El procurador del Grupo Popular en las Cortes de Castilla y León, Ramiro Ruiz Medrano, durante la entrevista con EL ESPAÑOL de Castilla y León

Región

Ramiro Ruiz Medrano: "Hay que desterrar el insulto y recuperar el espíritu de la Transición"

Entrevista con el procurador del PP en las Cortes: "Haber sido alcalde siempre lo llevaré con orgullo" | "Los políticos no deben utilizar términos malsonantes o que hieran sensibilidades, lo que ocurre en los parlamentos se traslada a la sociedad y los responsables somos nosotros".

Más información: Ramiro Ruiz Medrano se despide de las Cortes: "Ya no encajo con las nuevas formas de hacer política"

Publicada

Noticias relacionadas

En las Cortes de Castilla y León, bajo el eco de aplausos contenidos y miradas cargadas de nostalgia, Ramiro Ruiz Medrano pronunció este miércoles una despedida que sonó a epílogo de una vida dedicada al servicio público. A sus 67 años, el veterano político vallisoletano, con la voz entrecortada por la emoción, repasó medio siglo de compromiso con la democracia española, desde sus inicios como concejal 1979 hasta su actual rol como procurador. "Todo tiene un principio y un final", declaró, al anunciar su retirada de la vida política.

Nacido el 3 de junio de 1958 en el pequeño municipio vallisoletano de Renedo de Esgueva, que moldeó su carácter afable y tenaz, Ruiz Medrano irrumpió en la arena política con apenas 20 años, en las primeras elecciones municipales democráticas de 1979. Licenciado en Filosofía y Letras, su trayectoria despegó como concejal y alcalde de su localidad natal, entre 1983 y 1999, donde defendió con pasión los intereses del medio rural.

Pronto dio el salto al primer nivel de la política nacional: diputado en el Congreso entre 1989 y 1993, senador entre 1993 y 1996 y presidente de la Diputación de Valladolid entre 1993 y 2011, cargos que le permitieron tejer alianzas y promover el desarrollo de Castilla y León desde las entrañas del PP, del que llegó a ser presidente provincial entre 2008 y 2017.

En las últimas décadas, Ruiz Medrano ha encarnado el puente entre lo local y lo regional, sirviendo como delegado del Gobierno en Castilla y León entre 2012 y 2015, un período marcado por la gestión de crisis económicas y sociales que pusieron a prueba su talante dialogante. Su paso por las Cortes autonómicas, desde 2015, donde ha sido una voz serena en debates acalorados, culmina ahora con un adiós cargado de gratitud hacia sus compañeros.

Una decisión meditada

El histórico político vallisoletano atiende a EL ESPAÑOL de Castilla y León pocas horas después de anunciar su retirada en las Cortes y asegura que tomó la decisión de dar un paso al lado "hace tiempo". "La compartí con el presidente autonómico, con el presidente provincial, con un amigo muy cercano y con mi familia y todos lo entendieron perfectamente", señala.

Ruiz Medrano se emociona al recordar a todos aquellos "que ya no están aquí" y recuerda el infarto de miocardio que sufrió en febrero de 2018, dando "gracias a Dios" por haber podido salir adelante. "Doy gracias de estar aquí y recuerdo a toda la gente que ha fallecido por diversos motivos y por eso he querido tener un recuerdo para ellos en estos momentos", asegura, señalando que "hay que descansar y dar paso a otras personas".

El "espíritu" de la Transición

El procurador vincula su decisión a la situación de la política actual, con la que asegura no encajar, y apela a los "acuerdos y consensos" que caracterizaron la Transición.

"Tal y como está la política en este momento, eso no encaja en cómo soy yo personalmente, soy hijo de la Transición y creo que la Transición si se caracterizó por algo fue por buscar acuerdos, consensos, por las buenas formas, dentro de la discrepancia política, y hoy lo que estamos viendo es que eso está totalmente orillado, hay otras cosas que priman", lamenta, defendiendo que "hay que desterrar el insulto y recuperar el espíritu de la Transición".

Con todo, asegura tener "plena confianza" en que ese espíritu "se va a recuperar" y hace un llamamiento a los políticos. "Los primeros que tenemos que intentar que eso sea así somos los propios políticos, somos los primeros que tenemos que dar con nuestro ejemplo que somos capaces de recuperar ese espíritu, dentro de la discrepancia ideológica. No hace falta insultar ni utilizar términos malsonantes o que pueden herir sensibilidades, porque lo que ocurre en los parlamentos se traslada a la sociedad y los responsables somos nosotros", señala.

Ruiz Medrano apunta que "el gran mérito" que tuvieron los padres de la Transición y de la Constitución fue "intentar, dentro de la negociación, que fue muy dura, no herirse públicamente". "Creo que se debería estudiar la labor de la Transición con mayor profundidad en las escuelas", señala.

Y confía en que los ánimos en la vida política nacional "se tranquilicen" si el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, llega al Gobierno de España. "Ese es mi deseo, pero todos tenemos que participar en ese futuro. Yo estoy seguro que la gente del PSOE, de Vox o de Podemos quiere que eso ocurra, pero tenemos no solamente que decirlo sino también practicarlo, hay que practicar ese espíritu de la Transición", asegura.

El orgullo de ser alcalde

El procurador vallisoletano recuerda con "orgullo" su etapa como alcalde de su Renedo de Esgueva natal, entre 1983 y 1999. "Ser alcalde siempre lo llevaré con orgullo, que la gente de mi pueblo confiara en un chaval de 24 años tiene mucho mérito. Eso me sirvió para tener un contacto mayor y más directo y para poder poner en práctica muchas cosas que ya se decían en los movimientos juveniles", afirma.

Y asegura que "muchas veces la gente no valora la figura del alcalde" y que por eso ha querido ponerlo de relieve en la intervención en las Cortes autonómicas en la que ha anunciado su retirada de la política. "Los alcaldes buscan la concordia, yo no he visto a ningún alcalde que busque el enfrentamiento entre vecinos, y son hasta confesores de los problemas de las familias para intentar arreglarlos", añade.

Ruiz Medrano asegura, además, que el alcalde "es una figura muy agradecida". "Yo me llevo de esa etapa un magnífico recuerdo de todos los alcaldes de la provincia de Valladolid. No escribo un libro porque todo lo que escribiría serían cosas positivas y entonces no venderíamos ni un solo ejemplar, porque lo que vende es lo malo. Además la idea sería dedicar los beneficios a alguna organización benéfica y no conseguiríamos nada", ironiza.

Y afirma que no le gusta "hablar mal por hablar mal". "También me enfado y me cabreo pero suelo intentar ver las cosas desde una perspectiva tranquila y moderada", apunta, haciendo hincapié en que, además del papel "fundamental" de los alcaldes, los concejales también llevan a cabo "una labor importantísima".

"Me han tratado muy bien"

Ruiz Medrano se marcha de la política con un buen sabor de boca y un recuerdo positivo de los compañeros que ha tenido en las diferentes responsabilidades que ha ostentado en sus más de 40 años de actividad. "En todos los sitios me han tratado muy bien siempre y estoy muy satisfecho de la oposición, tengo muchos amigos en el PSOE y en Izquierda Unida, y por supuesto en el PP, que siempre me ha arropado", señala.

Y recuerda el papel "imprescindible" de los afiliados y la importancia de la cercanía hacia ellos cuando se ostentan cargos de responsabilidad. "Una de las satisfacciones más grandes que tengo de mi etapa de presidente es cuando los afiliados me recuerdan por las actividades que hacíamos, como el café del afiliado. Yo me reunía con ellos una vez a la semana, incluso siendo delegado del Gobierno, dejaba siempre un ratito para ir a la sede y estar con los afiliados tomando un café y hablando de la actualidad", recuerda con nostalgia.

El histórico político vallisoletano se retira de la política después de más de 40 años pero muestra su intención de seguir vinculado a proyectos sociales. "Quiero hacer algo, durante una etapa aquí en las Cortes estuve participando en Cruz Roja y algo de eso quiero hacer. Algo tengo que hacer para estar ocupado", zanja. La emotiva despedida de un hombre que ha dedicado más de 40 años de su vida a la defensa de la provincia de Valladolid, de Castilla y León y de España.