La pasada semana se celebró la primera gala del Sálvame MediaFest. Lo que en principio iba a ser un gran festival terminó siendo, por cuestión de licencias, una gala en el plató de Supervivientes, con todos los colaboradores de Sálvame cantando con artistas de todas las épocas y estilos musicales. El programa tuvo una buena repercusión en redes sociales, pero su alcance podría haber sido mayor si Mediaset dejase de ver a YouTube como un enemigo y sí como un aliado.

Desde hace ya más de dos lustros, Mediaset se ha mostrado muy celosa de compartir su contenido de manera pública. Para visualizar un vídeo de un programa determinado hay que acudir a su página web (que no brilla en accesibilidad precisamente), única y exclusivamente. No se pueden ver en YouTube, y tampoco permite que los medios de comunicación embebamos sus imágenes, como sí dejan los demás grupos.

Y en este sentido, el Sálvame MediaFest no es una excepción. La única manera de ver online las actuaciones a través de la web, o buscando hábilmente por Twitter, pues muchos usuarios compartieron momentos de esta gala, siendo esos espectadores los que lograron cierta viralidad, no la cadena en sus cuentas oficiales.

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Una estrategia irrazonable que sigue alejada del marketing y la comunicación más viral, anclados en la creencia de que si obligas al usuario a pasar por tu página web, tus visitas se incrementaran. En Mediaset siguen sin entender que los portales de televisión, las secciones de televisión de los diarios y los usuarios de las redes sociales no son competencia de su página web, sino que la complementan. Reproducen su contenido, sirven de altavoz, promocionan sus estrenos.

Este hecho se hace extensible a los demás programas de la cadena, como Got Talent España, que curiosamente sí permite ver sus contenidos fuera de nuestro país. ¿Habría funcionado mejor el programa Idol Kids, en su segunda edición de haber logrado cierta viralidad, si hubiésemos podido enamorarnos de las interpretaciones de los pequeños a través de YouTube? Talent show, por cierto, cuya final todavía sigue guardada en un cajón, y se desconoce si a estas alturas algún día verá la luz.

La breve relación de Mediaset y YouTube

Fue en octubre de 2015 cuando Mediaset España y YouTube enviaban un comunicado a los medios de comunicación en el que anunciaban el final de una guerra que había durado ocho años. “El acuerdo abre nuevas perspectivas en las relaciones entre ambas compañías y, al mismo tiempo, pone fin a ocho años de contencioso”, aseguraba Mediaset España en dicho comunicado.

“Así, se crea un marco de colaboración para el estudio en la presencia de contenidos digitales de Mediaset España a través de un partnership con YouTube y Google Play. Se abre, además, una estrategia conjunta para la protección de los contenidos, con el máximo respeto a los derechos de autor del editor”.

Ese anuncio no se materializó en condiciones hasta abril de 2018, cuando se abría un canal de YouTube oficial del grupo de comunicación. Poco a poco comenzaron a subir parte de su contenido, casi con un valor histórico, como todas las cabeceras de El programa de Ana Rosa, el arranque de Sálvame, la primera junta de vecinos en La que se avecina o la despedida de Aquí hay tomate.

Más tarde diversificó su contenido, y creó canales específicos para el tema de corazón, o para sus realitis, como de Mediaset Gossip, que se quedó para anunciar pequeñas promos de medio minuto. No sube contenido desde hace diez meses.

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Ese 2018, con la llegada de X Factor, la cadena comenzó a subir muchos más contenidos. El vídeo del dúo Glitch Gyals con su ‘Cómeme el donut’ fue el vídeo más visto del año en nuestro país, con 22 millones de reproducciones. Y la canción ‘Muslona’, del mismo grupo y programa, el tercero. Parecía que el abrirse a este portal de vídeo daba por fin sus frutos.

Sin embargo, en 2020, Mediaset dio un giro y borró todos sus vídeos, volviendo a su política proteccionista, que priva de viralidad a los programas. Algo que se puede entender con formatos que levanten cierta polémica, como Sálvame, pero que no se entiende con los talent shows. La cuenta de Got Talent España, con 8,6 millones de espectadores, solo permite ver dos promos de los años 2016 y 2017.

Imagen con los antiguos contenidos de Mediaset en YouTube

No aprenden de las demás cadenas

Volviendo al tema de Sálvame MediaFest, las demás cadenas han demostrado cómo el compartir sus vídeos, en este caso, de actuaciones divertidas, permite la viralización y favorece la conversación en redes. Un buen ejemplo lo tenemos con Tu cara me suena.

El concurso de imitaciones de Antena 3 tiene vídeos que acumulan millones y millones de reproducciones, siendo el caso más destacado el día que Anabel Alonso pasó por el clonador para cantar ‘Mueve tu cosita’ de El Chombo. En este momento, el vídeo acumula 39 millones de visualizaciones, en tres años, eso sí. Yolanda Ramos como Pipi Calzaslargas, casi 4. Y así muchos más ejemplos.

De haber bajado la guardia y compartido sus contenidos, el Sálvame MediaFest se enfrentaría esta noche a una segunda gala con mucha mayor expectación. La gente podría haber visto cómo se defendieron los colaboradores en sus duetos con Las Ketchup, Rebeca o Raúl, y podrían tener más ganas de ver si ahora lo hacen mejor… O no. El programa fue líder de su franja, con un 14,7% y 1.447.000 espectadores. Un dato que, a la vista está, puede mejorar y mucho.

Mediaset necesita con urgencia un cambio de rumbo, y puede pasar por abrirse a YouTube. La cadena no pasa por su mejor momento de audiencias. Antes de conocer las audiencias de este 29 de junio, la cadena tiene una media mensual de 13,1 puntos, y está a 5 décimas de Antena 3, que a todas luces revalidará su liderazgo por octavo mes consecutivo.