El Ayuntamiento de Alicante y las principales patronales turísticas, hosteleras y de ocio de la ciudad, han enviado una carta al secretario autonómico de Turismo, Francesc Colomer, en la que piden un incremento de la partida que Turismo Comunidad Valenciana ha designado para marketing y promoción hasta 2023.

La misiva se produce después de que EL ESPAÑOL revelara que el Consell iba a destinar solo 175.000 euros al año a la ciudad de Alicante, una de marcas turísticas de la región. Esto es menos dinero que a Castellón (200.000 euros), un municipio con muchos menos turistas, pernoctaciones y establecimientos. El montante global de la partida, en el que se incluyen asociaciones y patronales, es de 26,7 millones.

El Gobierno valenciano explicó entonces a este diario que ese dinero estaba consensuado y que cada localidad aportaba sus proyectos. Sin embargo, en el documento remitido a Colomer los firmantes explican que les sorprende que no haya "criterios claros y objetivos sobre el reparto de ayudas", ya que "consideramos que otros municipios con menor peso turístico han salido más beneficiados en la distribución".

Por ello, tanto el Patronato Municipal de Turismo como los empresarios instan a la Generalitat a "reconsiderar los criterios seguidos en el reparto", teniendo en cuenta "la importancia y expansión turística de la ciudad de Alicante para la Comunidad Valenciana en los periodos 2022 y 2023". Y terminan pidiendo realizar "la modificación oportuna que conlleve un reparto justo y con criterios objetivos para la ciudad".

Además de por la vicealcaldesa y presidenta del Patronato de Turismo, Mari Carmen Sánchez, la carta viene firmada por los representantes de la Asociación Provincial de Hoteles de Alicante (APHA); la federación de hostelería (FEHPA); la Asociación de Restaurantes de Alicante (ARA); el ocio nocturno y los pubs (ALROA); y los apartamentos turísticos (ABATUR).

Recuperación lenta

Lo cierto es que los fondos que se dispongan para el turismo para los próximos dos años serán clave para la recuperación del sector, que ha visto cómo la accidentada desescalada internacional (especialmente por Reino Unido) ha frustrado sus previsiones de recuperación en V.

De hecho, y a pesar de que la respuesta del mercado nacional está siendo muy positiva (supone prácticamente el 90% de la clientela actual), el incremento de contagios y el pico de la nueva ola está frenando las reservas que había para agosto. Actualmente los empresarios viven pendientes del mercado de última hora, algo que hace que se a"muy difícil" planificar la temporada con antelación.