Montaje con una imagen de Josep y una imagen del oro.

Montaje con una imagen de Josep y una imagen del oro. YouTube

Sociedad

Josep, dueño de un negocio de compro oro: "He comprado hasta 32 kg de oro pero la rentabilidad es de apenas el 2%"

El empresario cuenta con su propia tienda de compraventa de oro en Mallorca y señaló cómo, pese a su éxito, no es un negocio tan rentable como se cree.

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Las claves

Josep, dueño de una tienda de compro oro, ha comprado hasta 32 kg de oro en un mes, aunque la rentabilidad media de este negocio es de apenas el 2%.

Desde la apertura de su tienda, Josep ha adquirido 1,6 toneladas de oro a más de 60.000 clientes, comprando entre 6 y 7 kg mensualmente.

El negocio consiste en comprar metales preciosos a particulares, evaluarlos y venderlos a refinerías, joyerías o fundiciones, con un margen de ganancia muy ajustado.

Josep debe adelantar un 4% en impuestos cada mes, lo que implica pagos de hasta 20.000 euros a la Agencia Tributaria por operaciones de compra de oro.

Hace escasas semanas la onza de oro alcanzaba máximos históricos hasta revalorizarse por encima de los 4.000 dólares. De hecho, algunos portales esperan que la onza de oro supere los 4.300 dólares en un futuro cercano.

Por ello, ante esta situación, muchos acabaron mirando a las míticas tiendas de compro oro que se encuentran en los barrios de las grandes ciudades y cómo debían estar viviendo un gran momento.

Sin embargo, tal y como señaló el dueño de una tienda de compro oro, Josep, precisamente este negocio no tiene una gran rentabilidad y por ello es clave la cantidad de oro comprado.

El valor del oro

En un principio, Josep se dedicaba a un negocio de cobro de deudas. No obstante, durante la crisis de 2008, su empresa cerró y tuvo que buscarse nuevas oportunidades en el mercado laboral.

Este emprendedor no tardó en ver que las tiendas de compro oro se habían apoderado de las calles, por lo que se le ocurrió la idea de montar la suya propia. "Empecé a investigarlo, pero no tenía capital para empezar", relataba Josep en el canal de Adrian G. Martín.

Por eso decidió acercarse a una franquicia, poniendo sobre la mesa su experiencia como empresario y su talento para los negocios, con el objetivo de dirigir su propia tienda. La franquicia le facilitó la apertura de su tienda.

Así, el día de la apertura ya había ocho personas esperando para vender su oro. Su negocio creció rápidamente: con el tiempo sumó más clientes y se ganó la confianza de quienes vendían sus metales.

En los tres años siguientes, llegó a comprar 600 kilogramos de oro, y hoy en día desde su apertura ya ha adquirido 1,6 toneladas de más de 60.000 clientes.

Cabe mencionar que, para aclarar, las tiendas de compro oro se dedican a comprar metales preciosos a particulares, como joyas, monedas o lingotes, para luego venderlos a joyerías, fundiciones o exportadores.

El proceso comienza evaluando el peso y la pureza del oro mediante pruebas químicas o equipos especializados. Con estos datos, realizan una oferta basada en el precio internacional del oro, aplicando un margen que les permita obtener beneficio.

Cuando aceptas la oferta, el pago se realiza en efectivo, por transferencia o mediante cheque, cumpliendo siempre con los límites legales y los requisitos obligatorios para prevenir el blanqueo de capitales.

"Lo que se hace es rellenar una ficha que es la ficha policial, en ella se especifica el peso, qué es lo que ha traído, el importe que se abona, el número de IBAN de la cuenta para hacerle la transferencia y luego se hace una descripción detallada de cada una de las piezas", aseguraba Josep.

Asimismo, el empresario tiene la obligación de darle un plazo de 15 días antes de quedarse de forma definitiva con el oro, para así asegurarse de que no tiene un origen ilegal, pese a que haya pagado antes. "Si no llega denuncia, el oro es nuestro, pero si lo hubiese, la Policía me lo confisca y pierdo el dinero", afirmaba.

Hoy, la tienda de Josep está más que consolidada en la industria y adquiere un promedio de 6 a 7 kilogramos de oro al mes. "Nuestro récord creo que está en 32 kg en un mes", indicaba. Pero, una vez la pieza de oro está comprada, surge la duda: ¿de dónde obtiene Josep su beneficio y qué hace con el oro?

"Se vende a una refinería directamente", explicaba el empresario. "Tenemos una refinería entre Suiza y Austria. Ellos tienen un precio de compra. El precio es el Fixing de Londres, que es lo que ponemos en nuestra página web".

De ese modo, revendiendo el oro a joyerías, fundiciones o distribuidores es como obtiene sus ganancias, pero la rentabilidad no es tan alta como pueda parecer. "La rentabilidad de un lingote puede estar entre el 2% por término medio", apuntaba Josep. "Tiene una rentabilidad muy baja. La media se mueve entre un 2 o 3%. Digamos que sería la comisión que se cobraría".

Otro aspecto fundamental que señala el empresario es el pago de impuestos. "Cada mes, de lo que compro, tengo que adelantar el 4%", reconocía. En el caso de su último mes y su desembolso de 400.000-500.000 euros comprando oro, Josep reconocía que había pagado unos 20.000 euros a la Agencia Tributaria.