Warner Bros. evitó las polémicas de J.K.Rowling al presentar 'Harry Potter': La prioridad es lo que hay en pantalla

Warner Bros. evitó las polémicas de J.K.Rowling al presentar 'Harry Potter': "La prioridad es lo que hay en pantalla"

Sociedad

J.K. Rowling, dispuesta a ir a la cárcel por su opinión sobre las personas trans: su nueva polémica

La autora de la saga 'Harry Potter' lleva años generando polémica por su postura contra la definición de género. Estos días ha vuelto a expresarla. 

20 octubre, 2023 14:49

J. K. Rowling ha vuelto a avivar la polémica por sus opiniones sobre las personas trans. Siempre ha mostrado una postura muy beligerante con respecto a los derechos de la gente transgénero y con respecto a las presiones que asegura haber sufrido debido a ella. La controversia se extiende a menudo en cada acto relativo a su saga de 'Harry Potter' o en cada aparición pública. En este caso, incluso ha transcendido a las celebraciones y se ha desarrollado por un mensaje en Twitter.

La batalla en torno a Rowling y sus declaraciones no es nueva. Desde hace casi cuatro años, la autora del mago de Hogwarts está en el ojo de un huracán por la denominación sobre el género que alguien decide en lugar del que les fue asignado al nacer. Y, en este sentido, se enfrenta a dos sectores del feminismo: aquel que incluye en su lucha a las mujeres transgénero y el conocido como "feminismo radical transexcluyente" ("TERF", por sus siglas en inglés) que considera al sexo biológico como una realidad inmutable.

El enfrentamiento entre estos dos bandos es enorme, dentro y fuera del Reino Unido, como se ha visto en España con la Ley Trans. Rowling se ha alineado con los que ven determinante e inalterable el género al nacer. El 6 de junio de 2020, la escritora inglesa atacó un artículo de la agencia Devex que emplea la expresión "personas menstruantes", incluyendo en la categoría tanto a mujeres como a hombres trans.

Si el sexo "no es real", las "vivencias de las mujeres en todo el mundo resultan borradas", afirmaba la autora, que, no obstante, defendía "conocer y apreciar a la gente trans". Los detractores pusieron el grito en el cielo y ella contestó con un artículo en su web personal. Indicaba en él haberse documentado acerca de la cuestión trans y se declaraba seguidora de las tesis de Magdalen Berns, feminista transexcluyente británica fallecida en 2019.

"Cuando abres las puertas de los lavabos y los vestuarios a cualquier hombre que cree o siente ser una mujer, le estás abriendo la puerta a cualquier hombre que quiera entrar", apuntaba Rowling. Diferentes asociaciones y celebridades (como Emma Watson, la actriz que interpretaba a Hermione Jean Granger) se pusieron en su contra, incluso pidiendo la cancelación de su obra o sus apariciones.

Aceptaría entrar en prisión

Su última polémica en las redes sociales ha ocurrido esta semana tras revelar que estaría dispuesta a enfrentarse a prisión por sus opiniones sobre las mujeres transgénero. La revelación surgió en respuesta a un artículo de Mail on Sunday donde se sugería que el gobierno laborista de Reino Unido podría tipificar como delito de odio los ataques a la identidad de género, con posibles penas de prisión para aquellos que se nieguen a utilizar los pronombres que las personas transgénero prefieran.

Tras la publicación del artículo del periódico hermano del Daily Mail, Rowling expresó su postura en Twitter, a través de una foto de la revista Dazed, que en 2018 proyectó un luminoso en las oficinas del Ministerio de Justicia británico donde ponía: "Repite después de nosotros: las mujeres trans son mujeres". Rowling, en un gesto desafiante, subtituló la foto con un simple "No".

Añadió también, más tarde, que "con mucho gusto cumpliré dos años si la alternativa es el discurso obligado y la negación forzada de la realidad y la importancia del sexo. Que venga el caso judicial, será más divertido que la alfombra roja". Rowling incluso bromeó con la diputada laborista, Rosie Duffield, que afirmó: "Te veo dentro. Me gustan bastante las cocinas", sobre sus hipotéticas tareas en prisión.

"Esperando la biblioteca, obviamente, pero creo que me iría bien en la cocina. La lavandería podría ser un problema. Tengo tendencia a encoger las cosas o ponerlas rosadas accidentalmente. Sin embargo, supongo que eso no será un problema importante si se trata principalmente de batas y sábanas", anotó con humor la famosa autora, provocando de nuevo la ira de quienes se oponen a sus postulados.