Pedro, el presunto parricida de los apartamentos turísticos del Barrio de Santa María de Gracia de Murcia, este miércoles, custodiado por agentes de la Policía Local y de la Policía Nacional.
La inexplicable noche de Pedro en Murcia, el joven que degolló a su madre al volver de fiesta: "Mamá ha querido suicidarse"
Macarena, de 58 años, permanece ingresada en la UCI de La Arrixaca con pronóstico reservado tras recibir "3 o 4 puñaladas" en un apartamento turístico.
Más información: Un hijo le corta el cuello a su madre, de 58 años, en un apartahotel de Murcia y luego llama a su padre para contárselo
"Papá, he venido de fiesta y mamá ha querido suicidarse. Está aquí la mamá, con el cuello cortado que se ha intentado suicidar". Así ha verbalizado su mentira Pedro, un veinteañero que es el supuesto autor del apuñalamiento de su propia madre, Macarena, en un exclusivo piso de Los 6: un conjunto de sofisticados apartamentos turísticos, ubicados en el Barrio de Santa María de Gracia en Murcia.
El chico, de unos 29 años, llama a su padre que reside en Sevilla y le suelta semejante bomba sobre las graves lesiones que se ha autoinfligido su expareja. Este hombre, sobrepasado por la situación, no duda del relato de su hijo, Pedro, y telefonea al 112 de Andalucía a las 7.56 horas de este miércoles, para que traslade la alerta al Teléfono Único de Emergencias de Murcia, con el objetivo de movilizar una ambulancia de inmediato para salvar a Macarena.
"El aviso entró como un intento de suicidio", tal y como confirman fuentes de los servicios de emergencias a EL ESPAÑOL. "En la primera llamada, decían que ella misma se había clavado un cuchillo". "Llamó la expareja de ella desde Andalucía y nos lo pasaron al 112 de Murcia".
El veinteañero aguarda la llegada de la ambulancia en la plaza de Toledo, fumándose un pitillo, como si tal cosa, mientras que su pobre madre, de 58 años, se está desangrando. Una patrulla de la Policía Local de Murcia, un zeta de la Policía Nacional y una ambulancia son los primeros en llegar a esa plaza. El personal médico sube como una exhalación al entresuelo del bloque donde se ubican los citados apartamentos turísticos.
Un hijo le corta el cuello a su madre, de 58 años, en un apartahotel de Murcia y luego llama a su padre para contárselo
Por las escaleras hay gotas de sangre que siguen el mismo camino que el del chico hasta la puerta del edificio, en la plaza de Toledo. Tal dato es llamativo porque la madre se autolesiona en el apartamento. Pero la prioridad es estabilizar a la mujer, de forma que en ese momento nadie repara en el chico. Entonces, se detecta otro dato significativo: la víctima de esta autólisis presenta "3 o 4 heridas" por arma blanca en el cuello, cuando lo más lógico sería degollarse -de lado a lado- para no errar en el suicidio y ahorrar sufrimiento.
"El chico no estaba alterado". "Yo lo veía muy tranquilo", según relata Tomás, empleado del Espacio Joven 585 M2 que se levanta al lado de los apartamentos turísticos y que este miércoles, como cada día, llegó a las siete y media de la mañana en punto, sin saber que minutos después presenciaría el arresto de un supuesto parricida.
"He pensado que algo gordo pasaba por la cantidad de patrullas que llegaron junto a una ambulancia". A las nueve y seis minutos, Tomás confirma sus sospechas. "Los médicos bajaron en camilla a una mujer que iba tapada hasta arriba con una sábana".
El personal sanitario evitó con esa medida que desde el bloque que hay enfrente de Los 6, algún vecino fotografiara las terribles lesiones que sufría la víctima en el cuello, pero no lograron impedir que se inmortalizara la evacuación porque los balcones se habían convertido en un palco VIP para presenciar el despliegue policial.
Personal sanitario metiendo en una camilla a Macarena dentro de una ambulancia. Murcia Conecta - La 7
"Después de llevarse a la mujer, unos agentes de Policía se han puesto alrededor del chico y han estado hablando con él mientras estaba sentado en un banco, junto a los columpios". Tomás no ha perdido detalle de una secuencia inmortalizada por el móvil de un residente de la plaza de Toledo. A esa hora, la pobre Macarena entraba directa a un quirófano del Hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia para ser operada a vida o muerte.
La breve charla de los columpios entre los policías y Pedro daba un giro radical al caso: se pasaba de un aviso de suicidio a un presunto homicidio en grado de tentativa.
"El hijo ha confesado que ha sido él quien había llamado a su padre para decírselo y que su padre telefoneó al 112 informando de un suicidio, pero posteriormente el hijo ha reconocido que apuñaló a su madre", tal y como explican fuentes de los servicios de emergencias a este diario.
De hecho, el Grupo de Homicidios de la Policía Nacional ha solicitado la grabación de la llamaba que el padre ha realizado al 112, para corroborar que este hombre alertó de un suicidio desde Sevilla, tras recibir una llamada de su hijo contándole que él estuvo de fiesta por Murcia y cuando regresó a los apartamentos turísticos se encontró a su madre autolesionada con un arma blanca.
A Pedro lo subieron al apartamento turístico para llevar a cabo una minuciosa inspección ocular después de que varios agentes de criminalística y homicidios -pertrechados con maletines- llegasen a la barriada, dispuestos a reconstruir lo sucedido en Los 6 y a buscar pruebas de calado como el arma homicida.
Unos policías locales y policías nacionales, este miércoles, conversando con Pedro hasta lograr su confesión.
"Cuando empezaron a alquilar estos apartamentos turísticos, me daba miedo de que llegasen jóvenes para salir de fiesta", según comenta Marisol desde su balcón, situado justo encima del inmueble de Los 6 donde la supuesta salida de juerga de un veinteañero, procedente de Sevilla, se ha saldado con una resaca terrible: un intento de parricidio sobre su madre.
"Yo no me he enterado de nada ni he escuchado ninguna discusión, a pesar de que vivo encima y que me he pasado media noche en vela", según admite Marisol. Otro vecino, Antonio, a pie de calle, apunta un dato interesante: "Trabajo en una fábrica de cerveza y cuando he regresado de mi turno de noche, ya he visto encendida la luz del apartamento y me ha parecido extraño porque eran las seis de la madrugada. Luego he visto a un chico por la plaza".
Pero Antonio no sabe si era Pedro y si dentro de la vivienda, a esa hora, ya se había materializado el brutal ataque. Pasadas las doce del mediodía de este miércoles, por las calles aledañas de la Plaza de Toledo hay varios coches patrulla y zetas aparcados, la zona es un hervidero de periodistas y curiosos, como un grupo de menores de edad que se ha saltado las clases del instituto para seguir en directo las pesquisas policiales.
En el apartamento turístico del parricidio, situado encima de una academia de estética, las cortinas de sus grandes ventanales son desplegadas para que no se vean los movimientos de la Policía Nacional desde la calle. Pero en el grupo de plumillas y fotógrafos que aguarda la salida del bloque de Pedro, engrilletado y custodiado por agentes, trasciende que su arresto se ha producido porque "se detectaron incoherencias" en la famosa conversación que los policías mantuvieron con él en los columpios y que luego prosiguió en el piso.
De forma que la aparente mentira del veinteañero del intento de suicidio de su madre viró a una confesión. "La cara del joven era de ir perjudicado". Puede que de todo lo que le contó a su padre, solo sea verdad que salió de juerga, y al regresar, supuestamente apuñaló a su madre. Aunque deberá ser un forense el que determine si Pedro se encontraba bajo los efectos del alcohol o las drogas.
Pedro, este miércoles, detenido por apuñalar a su madre.
De momento, el Grupo de Homicidios intenta determinar la causa que desencadenó el ataque de Pedro sobre Macarena con un arma blanca y el motivo por el que se habían desplazado desde Sevilla a Murcia, para alojarse en unos estilosos apartamentos que cuestan 60 euros la noche y donde suelen hospedarse profesionales por motivos de trabajo o familias para hacer turismo, según cuentan los vecinos.
Los investigadores también están indagando en el historial clínico de Pedro, para aclarar si padece algún trastorno mental. Además, se investiga el círculo familiar para ver si antes había protagonizado algún episodio de violencia doméstica o alguna discusión con su madre. Al cierre de esta edición, un portavoz policial confirmaba que Macarena "seguía con pronóstico reservado", ingresada en la Unidad de Cuidados Intentivos de La Arrixaca.
El Grupo de Homicidios permanece con Pedro desde las 7.56 hasta las 13.09 horas. Presumiblemente, le interrogan dentro del piso turístico. Por la zona llegan a pasar una docena de efectivos del Grupo Especial de Seguridad Ciudadana de la Policía Local y de los zetas de la Policía Nacional, hasta que sacan a Pedro por la puerta principal del edificio, custodiado por cuatro agentes, escondiendo su rostro debajo de una camiseta de algodón de color gris, a juego con su pantalón, y luciendo chanclas.
Pedro entra al coche patrulla sin responder a la pregunta que le formula EL ESPAÑOL: ¿Por qué le has hecho eso a tu madre?