El boliviano Bryan R., de 29 años, este miércoles, a la salida de los calabozos de la Jefatura de Policía de Murcia para ser trasladado a la Ciudad de la Justicia.

El boliviano Bryan R., de 29 años, este miércoles, a la salida de los calabozos de la Jefatura de Policía de Murcia para ser trasladado a la Ciudad de la Justicia. Cedida

Reportajes

La hermana de Maravillas, muerta en el crimen de El Palmar: "Defenderemos a su hijo Alejandro"

El juez ordena el ingreso en prisión de Alejandro y su amigo, el boliviano Bryan, por robo con violencia, tenencia ilícita de armas y homicidio.

13 septiembre, 2023 17:44
El Palmar

La familia de la difunta Maravillas cree en la inocencia de Alejandro. Este joven de 25 años, encargado de un restaurante de Burger King, resultó detenido el domingo por su presunta vinculación con el robo que perpetró supuestamente su amigo Bryan, en la casa de la madre de Alejandro, y que se saldó con la muerte de esta pobre mujer a los 63 años.

Este crimen ha consternado a los vecinos de la pedanía murciana de El Palmar de la que es oriundo Carlos Alcaraz, debido a los lazos existentes entre sus tres protagonistas: Maravillas, la víctima mortal, era madre de Alejandro, quien a su vez es amigo del supuesto autor de esta muerte violenta, Bryan. A pesar de todo, Encarnación, hermana de la fallecida, ha asegurado a EL ESPAÑOL que defenderán al veinteañero en el proceso judicial abierto: "Claro que sí vamos a defender a Alejandro".

Prueba de ello es que la familia confirma que ha "contratado" a un abogado para el veinteañero por un motivo de peso: confían plenamente en que Alejandro no ayudó a Bryan, ni a idear el plan del robo, ni a entrar en la casa de su madre. Al margen de estas certezas para los familiares, los allegados de la difunta no se pronuncian sobre lo ocurrido el domingo en la casa de Maravillas -en la calle República Argentina de El Palmar-.

"No sabemos nada de lo sucedido", según asegura Encarnación, destrozada por el arresto de su sobrino Alejandro y por el turbio final que ha sufrido su querida hermana Maravillas: "No me encuentro bien". Y no es para menos, los vecinos cuentan que la pobre Encarnación "reside en Lugo" y esta tragedia le ha pillado cuando "estaba de vacaciones", pasando unos días con sus padres, Pepe y Ana, cuya vivienda está pegada a la casa de 'Mara'.

Alejandro S. M., de 25 años, hijo de la difunta Maravillas, tras ser detenido por la Policía Nacional.

Alejandro S. M., de 25 años, hijo de la difunta Maravillas, tras ser detenido por la Policía Nacional.

De momento, este miércoles, Alejandro y Bryan han sido trasladados en calidad de detenidos al Juzgado de Instrucción número 7 de Murcia, para responder ante el juez, por la investigación desarrollada por la Policía Nacional por un delito de homicidio. Alejandro ha pasado las últimas 72 horas en los fríos calabozos de la Comisaría del Barrio del Carmen, mientras que su amigo Bryan ha permanecido detenido en la Jefatura Superior de la céntrica Plaza Ceballos de la capital del Segura.

La Policía Nacional ha optado por la estrategia de separar a los dos supuestos implicados en el robo que se saldó con la muerte de Maravillas, con el objetivo de confrontar sus relatos para aclarar el presunto rol que pudo jugar cada uno, pero EL ESPAÑOL ha podido saber que Alejandro se ha acogido a su derecho a no declarar.

"Lo niega todo", subrayan fuentes de la investigación, sobre las únicas palabras que ha llegado a verbalizar Alejandro: un joven tímido, con poca vida social, un característico pelo teñido de rosa, cara de buen estudiante y que se labró una carrera en el Burger King, haciendo turnos de noche antes de ser ascendido a encargado. "Está destrozado porque han matado a su madre". De hecho, no pudo asistir a su entierro este martes.

Bryan primero pasó por la planta de reclusos que tiene el Hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia, debido a que se rompió los dos tobillos cuando trató de huir de la residencia de Maravillas, al ser sorprendido durante el robo perpetrado el domingo. En concreto, este boliviano, de 29 años, saltó desde la terraza hasta el balcón de la casa de los padres de la víctima y acabó destrozado porque hay un diferencia de tres plantas de altura.

En ese momento, Pepe y Ana, los padres de Maravillas, pidieron auxilio a los vecinos de la Calle República Argentina y a los clientes del Puro Café. Un grupo de personas interceptó a Bryan cuando salió cojeando por la puerta de la casa de los progenitores de la víctima del robo. "Lo puse contra la pared, lo registré y encima llevaba un fajo con unos nueve billetes de 50 euros", según afirma uno de los vecinos que ayudó a retener a este boliviano, que antaño trabajó como gerente de Burger King en Atalayas.

El boliviano Bryan, este domingo, custodiado por un Policía Local tras ser interceptado por varios vecinos después de perpetrar el robo en casa de Maravillas.

El boliviano Bryan, este domingo, custodiado por un Policía Local tras ser interceptado por varios vecinos después de perpetrar el robo en casa de Maravillas. Cedida

Tan graves fueron las lesiones que sufrió Bryan que este miércoles lucía unos aparatosos vendajes en sus dos piernas y ha salido en silla de ruedas, por la puerta trasera de la Jefatura de Policía, custodiado por una pareja de agentes, para poner rumbo a la Ciudad de la Justicia.

Desde un primer momento, el Grupo de Homicidios ha tenido como principal hipótesis que el móvil del robo fue "económico". Es lo único que ha trascendido de una investigación declarada secreta desde que el domingo fue hallado el cadáver de Maravillas en su casa. "Escuché a un policía nacional decir que la habían asfixiado con una bolsa de basura", según asegura Cristina, empleada de La Arrixaca y que este domingo llamó a la Sala del 091, para alertar de un robo en la calle República Argentina.

Los agentes arrestaron a Bryan y después a Alejandro. A partir de ese momento, no ha parado de hablarse de que el ladrón iba buscando dinero. Bien el de Maravillas: una antigua empleada de Artemur, una empresa de cortinas y edredones, agraciada en 2001 con El Gordo de la Lotería de Navidad. En concreto, el número 18795 regó a la plantilla con 21.990 millones de las antiguas pesetas. 

O bien buscaba el dinero de una herencia que dejó Juanjo: el padre de Alejandro, un conserje del Teatro Bernal de El Palmar, y que en 2019 falleció tras no superar su batalla contra el cáncer. Este miércoles, Alejandro y Bryan han ofrecido explicaciones sobre lo sucedido en el juzgado, pero no han evitado que el juez ordene el ingreso en prisión de ambos, por los delitos de robo con violencia, tenencia ilícita de armas y homicidio o asesinato.