Destrucción por un ataque israelí sobre Rafah tras el fin de la tegua con Hamás.

Destrucción por un ataque israelí sobre Rafah tras el fin de la tegua con Hamás. Reuters

Oriente Próximo

"No habrá refugio": Israel divide Gaza en cientos de sectores para limitar bajas con ataques quirúrgicos

El ejército israelí pretende que los miles de civiles gazatíes se descarguen un mapa interactivo con zonas seguras que irán cambiando según se vayan sucediendo los ataques. 

2 diciembre, 2023 03:05

Como era de esperar tras la tensión acumulada a lo largo del jueves, el viernes amaneció en la Franja de Gaza con lanzamientos de cohetes de Hamás a territorio israelí, seguidos de los correspondientes bombardeos del ejército hebreo. Tras una semana casi exacta de alto el fuego, ambos bandos han decidido continuar con las hostilidades, aunque sus intermediarios egipcios, cataríes y estadounidenses sigan negociando la posibilidad de más intercambios de rehenes por prisioneros.

A la espera de que se retome la operación terrestre en Gaza City, la actividad de las IDF apunta a una guerra total en esta segunda fase del conflicto. Los bombardeos, que habrían causado un centenar de muertos, según las autoridades de Hamás, no se han limitado al norte, sino que se han ampliado también a los principales centros urbanos del sur, sobre todo la ciudad de Yan Junís, que promete ser clave en el control de la zona.

"No habrá refugio", declaró este viernes Benny Gantz, exgeneral del ejército israelí y actual ministro de Defensa en el gabinete de Benjamin Netanyahu, para después añadir: “Llevaremos la guerra al lugar de la Franja que sea necesario”. Expresaba así la intención de su gobierno de destruir a Hamás en una línea similar a la expresada ayer por el propio primer ministro.

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Si ese objetivo es compatible o no con la liberación de los secuestrados el 7 de octubre, se verá con el tiempo. En la primera fase de la ocupación de Gaza, no lo fue. En las últimas 24 horas se ha confirmado la muerte de otros tres cautivos israelíes.

De hecho, en términos que recuerdan a la "Operación Cólera de Dios", comenzada tras los atentados de Septiembre Negro en la villa olímpica de Munich 72, el Wall Street Journal publicaba en su edición de ayer la intención de los servicios secretos israelíes de acabar con todos los líderes de Hamás que residen en el extranjero, la mayoría alojados por Qatar, Dubai, Irán y Turquía.

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Si extender la guerra por Gaza ya preocupaba a Washington, llevarla más allá de las fronteras de Israel no ha debido de entusiasmar a nadie.

"Sectores seguros"

Tal vez por eso, Israel ha hecho un guiño a las peticiones del jueves del secretario de Estado, Antony Blinken, cuando defendió ante Netanyahu la prolongación del alto el fuego hasta que hubiera un plan claro para una probable emergencia humanitaria en el sur de Gaza.

A lo largo del día, el Estado judío ha ido lanzando notas informativas sobre Yan Junís para intentar organizar la evacuación de la población civil y reducir así el número de víctimas. Blinken ya dijo el jueves que el número de palestinos muertos en la primera fase de la operación no era admisible, algo que no podía repetirse en el sur bajo ningún concepto.

En ese sentido, Israel ha dividido la Franja en cientos de sectores a los que los civiles podrían dirigirse según los ataques vayan a producirse en un lugar o en otro. Para ello, en las octavillas lanzadas desde el aire se adjunta un código QR que permite el acceso a un mapa interactivo para que las familias sepan en cada momento dónde se va a atacar y dónde se pueden refugiar. Un plan que parece insuficiente y que deja demasiadas dudas a las que Israel no da respuesta dadas las circunstancias actuales.

De entrada, sabemos que el sur está masificado porque allí han huido buena parte de los habitantes del norte. Y lo han hecho precisamente porque se lo ha pedido Israel. Hablamos de decenas de miles de refugiados sin hogar que se habrán buscado la vida como hayan podido y a los que ahora se les pide que se muevan por la Franja de casilla en casilla como si estuvieran en un tablero de ajedrez.

Entre estos refugiados, hay niños, ancianos y enfermos. Israel no puede pretender que se descarguen un mapa interactivo y vayan esquivando las bombas alegremente. Avisar a la población civil de que debe evacuar una zona porque va a ser objeto de ataque implica darle un tiempo para preparar dicha evacuación y, sobre todo, un lugar donde refugiarse.

Soldados israelíes en un APC después de la tregua temporal entre Israel y Palestina.

Soldados israelíes en un APC después de la tregua temporal entre Israel y Palestina. Reuters

En el mensaje que han publicado las IDF no acaba quedar claro que vayan a existir esas zonas seguras, sino, más bien, que irán cambiando según cambien los objetivos militares.

Quejas de las ONG

Ahora bien, lo cierto es que esta solución parece valerle a Blinken, o al menos así lo manifestó este viernes en una aparición pública. No mostraron el mismo entusiasmo las organizaciones no gubernamentales que trabajan en la zona. Médicos Sin Fronteras pidió a Israel que deje de exigir a los gazatíes que se vayan cada vez más al sur y negó que hubiera "zonas seguras" en ningún lado. Además, señaló que dos de sus hospitales estaban en el área que Israel pide evacuar.

Por su parte, la UNRWA, dependiente de las Naciones Unidas, mostró en boca de su director Philippe Lazzarini su "extrema preocupación" por la negativa de Israel a dejar entrar ayuda humanitaria en la Franja, incluido combustible. Lazzarini teme que los refugios de la UNRWA, que considera ya de por sí superpoblados, se vean directamente desbordados con las nuevas evacuaciones… sin posibilidad de dar la ayuda que dichos refugiados precisan.

Por quirúrgicos que pretendan ser los ataques, la destrucción seguirá siendo masiva y hará más complicado el regreso de los refugiados a sus hogares. Decenas de miles de personas quedarán vagando por las calles sin más ayuda que la que puedan obtener de los organismos internacionales. Si Israel no quiere que vuelvan a caer en las manos de Hamás, bien hará en ofrecerles algún tipo de alternativa realista.