Esto es lo que le puede pasar a tu cuerpo si añades una cucharada de canela a tus bebidas: "Reduce los antojos"

La canela es un 'superalimento' de toda la vida. Esta especia, originaria del sur de India y Sri Lanka, ha sido apreciada por su exquisito sabor y su capacidad para transformar incluso los platos más simples en verdaderos manjares. Sin embargo, más allá de su papel en la cocina, uno de los motivos por los que su popularidad ha continuado con el paso de los años son sus increíbles beneficios para la salud.

A la vez que la canela se añadía a un sinfín de platos, era utilizada como remedio medicinal por las diferentes culturas asiáticas. Se ha usado para tratar enfermedades respiratorias, digestivas y ginecológicas; sin embargo, actualmente su uso está más extendido como antiinflamatorio, regulador del metabolismo y estimulante de la función cognitiva. 

Todos estos beneficios han conseguido que diferentes expertos aconsejen su consumo, no solo habitualmente, sino de forma diaria. Según la nutricionista Ana Forcén, incorporar una cucharada de canela a tus bebidas y postres puede desencadenar una serie de efectos positivos en el organismo, especialmente, en la pérdida de peso.

Los beneficios del consumo diario de canela 

Si consideramos la tradición popular y la cantidad de beneficios atribuidos a esta especia, la canela puede ser considerada uno de los primeros superalimentos de la historia de la humanidad. Habitualmente, se consume en cantidades pequeñas, de ahí la importancia de incorporarla a algún alimento que tomemos a diario, como por ejemplo el café.  

Sin embargo, según Ana Forcén, la canela se puede añadir a un sinfín de preparaciones como batidos o postres. En cualquiera de los casos vamos a obtener beneficios como controlar los niveles de glucosa, evitar los picos de insulina, activar nuestro metabolismo y retrasar el envejecimiento de nuestras células.

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Una de las principales ventajas que ofrece la canela es su capacidad para controlar los niveles de glucosa. Según indican desde el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), "existen estudios preliminares que relacionan el consumo diario de 1 gramo de canela con una reducción en los niveles sanguíneos de colesterol, triglicéridos y azúcar".

Esta especia, al estabilizar el azúcar en el torrente sanguíneo, ayuda a evitar los picos de insulina, que suelen ser los responsables de los repentinos antojos de dulces y otros alimentos ricos en azúcar. Al mantener equilibrados estos niveles, la canela no solo contribuye a una mejor salud metabólica, sino que también ayuda a controlar el apetito, facilitando la adopción de una alimentación más balanceada y saludable.

La canela destaca por sus propiedades termogénicas. Esta característica significa que puede elevar ligeramente la temperatura corporal, lo que activa el metabolismo y favorece una mayor quema de calorías.

Gracias a este efecto, incluir canela en bebidas como tés, infusiones o batidos puede ser un recurso eficaz para potenciar el gasto calórico diario, lo que resulta especialmente útil para aquellas personas que están en un proceso de pérdida de peso o que desean mantener su figura.

Por otro lado, según la experta, la canela es reconocida por sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Estos compuestos ayudan a combatir el daño celular causado por los radicales libres, protegiendo al organismo del envejecimiento prematuro y reduciendo la inflamación sistémica.

Al incorporar canela en la dieta diaria, se favorece la regeneración celular y se fortalece el sistema inmunológico, ayudando así a mantener el cuerpo en óptimas condiciones. Además, los estudios han demostrado que la canela y sus compuestos bioactivos pueden influir en la función cerebral y afectar las características del comportamiento.

En cuanto a su valor nutricional, la canela contiene proteínas, destaca por su contenido en hierro, calcio, zinc, potasio, selenio, vitamina B6 y C, así como su aroma y sabor característicos, proporcionados por compuestos como el cinamaldehído. Un consumo controlado de esta especia puede contribuir a la mejora de estos nutrientes.

Sin embargo, a pesar de sus increíbles beneficios, los expertos se enfrentan a un desafío con la canela, y es la existencia de dos tipos. Tenemos, por un lado, la variedad de Ceilán, procedente de Sri Lanka y el sur de India, que es la más apreciada y segura. No obstante, la más vendida y barata es la Cassia, que procede de China, Indonesia o Vietnam.

El peligro de la canela

En España, lo más probable es que en tu especiero exista esta segunda variedad y se trata de la más peligrosa por contener un elevado porcentaje de cumarina, mientras la primera apenas tiene trazas. Este compuesto aromático de la canela, con un olor parecido a la vainilla, puede ser tóxico para el hígado a partir de ciertas cantidades.

La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria fija el máximo en 0,1 miligramos por kilogramo de peso corporal de la persona. Por ejemplo, alguien que pese 60 kilos podría tomar seis miligramos al día con tranquilidad.

La experta en seguridad alimentaria Beatriz Robles explica en su libro Come seguro comiendo de todo que "si la canela es Cassia y asumimos que contiene una media de 3.000 miligramos de cumarina por kilo (puede haber variaciones en esta concentración, pero es un dato realista), con tomar dos gramos diarios, el equivalente a una cucharadita de café, una persona de 60 kilos alcanzaría el límite".

De ahí que la Fundación Española de Nutrición (FEN) fijase en una media de un gramo diario la cantidad recomendada y saludable, desaconsejando por completo que se abuse de la especia. Si se consume en abundancia será mejor comprar la de Ceilán.

Una vez sabido esto, ¿cuánta canela podemos tomar al día? En el caso de tener en casa la variedad de canela de Ceilán, no hay que preocuparse por la cantidad que se consume, según señala Robles. "Pero si la canela es Cassia y asumimos que contiene una media de 3.000 miligramos de cumarina por kilo (puede haber variaciones en esta concentración, pero es un dato realista) con tomar dos gramos diarios, el equivalente a una cucharadita de café, una persona de sesenta kilos alcanzaría el límite", explica en el texto Beatriz Robles.