Pere Aragonès, presidente de la Generalitat, durante un desayuno informativo en Madrid, este miércoles.

Pere Aragonès, presidente de la Generalitat, durante un desayuno informativo en Madrid, este miércoles. EP

Política ELECCIONES CATALANAS

Pere Aragonès dinamita la financiación autonómica de Sánchez: no se sentará más con el resto de CCAA

Moncloa ya tiene la propuesta del presidente de la Generalitat para la 'financiación singular': "Nadie me dirá lo que puede tener Cataluña".

21 marzo, 2024 02:59

Aprovechando que es president y candidato, Pere Aragonès ha advertido a Moncloa que no volverá a sentarse con el resto de comunidades autónomas para negociar la reforma de la financiación autonómica. Cataluña es "singular" en lo financiero respecto al resto de regiones del régimen común, le ha comunicado, y ERC dinamita así, no sólo la precampaña, sino la propia arquitectura económica del Estado.

"Éste es el punto de singularidad: la relación bilateral, de tú a tú, con el Estado", apuntaba este miércoles a los periodistas, después de un desayuno informativo. "Yo no voy a decirle a otros territorios lo que deben hacer, pero no voy a aceptar que otros me digan lo que va a tener Cataluña".

Ésa es, en su opinión, "la única forma de defender los intereses" de la región que preside... y que aspira a seguir gobernando, tras el 12-M.

"La operación de Aragonès es puro marketing político electoral", lamentan fuentes autorizadas del PSC de Salvador Illa. "La hace el primer día de precampaña, con un Gobierno débil, que se rompió en septiembre de 2022, y con menos votos que nosotros".

Falta saber qué harán los socialistas ante este desafío.

Porque el documento que firmó Félix Bolaños con Oriol Junqueras el 2 de noviembre para lograr los siete votos de ERC en el Congreso dice prácticamente lo mismo, en este punto, que el que negoció después Santos Cerdán con Carles Puigdemont en Bruselas, hasta el 9 del mismo mes.

Sánchez "no puede incumplir"

Los desacuerdos a discutir durante la legislatura eran los mismos: "Financiación singular" y "reconocimiento nacional", es decir, referéndum.

Y por un lado, uno de los dos, ERC o Junts, tendrá que ser el que le dé a Illa los votos para su investidura si el líder del PSC quiere ser president y gana las elecciones, como indican las encuestas. Pero por otro, Sánchez "no puede incumplir lo pactado" o se queda sin Gobierno en Madrid, advierte un portavoz oficial de los republicanos.  

"Cumplirá, tendrá que hacerlo, como hizo con la amnistía", sentenció Aragonès en público, este miércoles.

Aunque en una cosa sí que tiene razón el PSC, en lo del uso de este asunto como baza electoral.

En noviembre de 2023, a los pocos días de firmar con el PSOE el acuerdo para la investidura de Sánchez, el president encargó a su consellera de Hacienda, Natàlia Mas, que preparara un informe sobre la "financiación singular" de Cataluña. El concepto había sido incluido en el pacto con los socialistas, como la solución de ERC al supuesto "déficit fiscal" de Cataluña que admitía el PSOE.

Ahora, fuentes del Govern confirman que el Gobierno ya tiene el documento de 90 páginas titulado Finançament singular. Proposta de finançament just per a Catalunya, que le entregó Mas a Aragonès el pasado martes en Barcelona. Un texto que viene con el logotipo de la Generalitat, no con el de Esquerra Republicana. 

El texto pivota sobre los conceptos de "injusticia", "opacidad", "deslealtad", "arbitrariedad" y "autonomía fiscal" como la única vía para ejercer "una verdadera autonomía política".

La propuesta exige recaudar "el 100% de los tributos que pagan los ciudadanos y las empresas de Cataluña". Es cierto que propone "dos aportaciones" de esa Hacienda independiente catalana al resto de España posteriormente: una por "los servicios que el Estado aporta a Cataluña" y otra bautizada como "fondo de solidaridad" para ayudar a financiar las regiones más desfavorecidas.

Pero ese fondo, desveló Aragonès, será "temporal" y limitado sólo "a las CCAA que hagan esfuerzos de reequilibrio".

¿Por qué esto último? Porque, según fuentes de su entorno, "estos 45 años en los que hemos aportado claramente de más no han servido para ningún reequilibrio territorial". Es decir, que "hay que tocar cosas, pero ERC no está aquí para refundar España".

Entonces, ¿para qué? Y ahí viene la respuesta al asunto de la temporalidad. "Porque después nos independizaremos", sonríe esta fuente. "O al menos, ejerceremos la autodeterminación, vía referéndum pactado con el Estado".

Eso exigiría, evidentemente, que toda la negociación del llamado "reconocimiento nacional" se desarrolle en la actual legislatura española. Y que este Gobierno de Sánchez dure hasta el final, porque la negociación del referéndum, admite ERC, "será larga, difícil y con dolor". Pero eso significaría que el independentismo sostendrá al presidente socialista en Moncloa hasta el verano de 2027.

Illa, ¿president?

Precisamente, de eso dicen estar seguras las fuentes de Moncloa. Por una parte, de que Illa será president, porque el 12-M "ganará con holgura" y tendrá "diferentes opciones" para ser investido... incluso manejando la opción de que pueda hacer un 'Govern' en solitario.

Y por otra parte, de que en ese escenario "los independentistas no retirarán su apoyo" al Ejecutivo de Sánchez.

Pero en este punto la ecuación no encaja. Si hay dos elementos clave para ERC y para Junts, que son los mismos, y que el PSOE de Sánchez se ha comprometido a negociar, ¿los defendería también Salvador Illa desde el Palau de la Generalitat? Y si no, ¿con quién negociará Sánchez la "financiación singular" y el referéndum de autodeterminación?

Barones del PSOE ya se han mostrado abiertamente en contra. Desde Adrián Barbón, presidente del Principado de Asturias, hasta el eterno Emiliano García-Page, el disidente castellano-manchego y único socialista con mayoría absoluta en España.

Y las fuentes oficiales del PSC insisten en que no será por el socialismo catalán por el que se rompa España.

"Nosotros también reclamamos una financiación suficiente para satisfacer las aspiraciones de Cataluña", zanja otro alto dirigente del PSC. "Pero siempre será multilateral", es decir, con el resto de las comunidades autónomas del régimen común. "Lo que es seguro es que la solución no va a venir por dónde diga el independentismo".

Pero desde ERC cierran la puerta definitivamente a ese escenario, "gobierne quien gobierne" en Cataluña y en Madrid.

"Nos dirán que esto es imposible, pero ya lo dijeron en tantas cosas que hoy son una realidad, que tenemos más credibilidad que ellos. Si aprovechamos nuestra fuerza política y capacidad de influencia, esto sale porque lo quieren la mayoría de los votantes catalanes, desde la CUP hasta Vox... y si Illa quiere ser 'president' para el bien de Cataluña, la asumirá".