Ábalos y su mano derecha, Koldo, paseando por París, en verano de 2021.

Ábalos y su mano derecha, Koldo, paseando por París, en verano de 2021. E.E.

Política 'OPERACIÓN DELORME'

Era su sombra día y noche en el ministerio y Ferraz, en México y París, pero Ábalos "no sabía nada"

El exministro conoció la detención de su amigo en la sesión de control al Gobierno, en el escaño. Tardó en salir y se reconoció aturdido ante la prensa.

22 febrero, 2024 02:16

José Luis Ábalos y Koldo García Izaguirre forjaron una relación muy estrecha. Más allá del plano laboral. Ábalos empezó a contar con la asistencia de Koldo en 2017, cuando Pedro Sánchez ganó por segunda vez las primarias del PSOE. A partir de ahí, Ábalos convirtió a Koldo en su sombra, noche y día. En Ferraz, en el ministerio y hasta en México o París. Con él viajó por varios países. 

Por ejemplo. En febrero de 2019, Koldo acompañó al entonces ministro de Transportes en un viaje a México, en el que también participó el abogado y empresario Víctor de Aldama, detenido también ahora por la trama de supuesta corrupción. Curiosamente, las autoridades mexicanas, al hacerse eco de la visita en sus medios oficiales, le identificaron como cónsul honorario de España en el Estado de Oaxaca, cargo que no ha ostentado jamás. 

Una fotografía tomada dos años después, a la que ha tenido acceso EL ESPAÑOL, muestra a Ábalos y a Koldo en un parque de la capital de Francia. La instantánea está tomada en el verano de 2021, justo después de los profundos cambios que acometió Sánchez en Moncloa y en Ferraz, que se llevaron por delante a Ábalos... Y también a Koldo, que había llegado a ocupar un puesto en el Consejo de Administración de Renfe.

Ese fue el verano en que José Luis Ábalos pasó de serlo todo a militar en la nada. Ni el PSOE ni Moncloa dieron ninguna explicación de su cese fulminante. Él siempre dijo que tampoco la pidió. "De la misma forma que el presidente te nombra y no pides explicaciones, te puede cesar", repitió una y otra vez.

Aquel episodio ya alimentó rumores, e incluso la publicación de presuntos escándalos relacionados con Ábalos, que nunca se llegaron a demostrar.

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Este miércoles, poco después de conocerse la detención del que fue su hombre de confianza, el diputado socialista por Valencia dijo en el Congreso: "No tengo ni idea, me he enterado ahora, me he quedado estupefacto con esto".

La mañana venía torcida. Tres días después de la debacle del PSOE en Galicia, con la oposición crecida, la reprobación en el Senado de Fernando Grande Marlaska por los asesinatos de los dos guardias civiles en Barbate, el empantanamiento de la ley de amnistía, la tractorada en Madrid... y hasta un amago de desmayo de Luis Planas en la bancada azul.  

Entonces, estalló la polémica. Ábalos conoció el asunto de la implicación de Koldo en una trama relacionada con la venta de mascarillas durante la pandemia sentado en su escaño. No le dio un vahído, como al ministro de Agricultura, aunque se mostró prácticamente aturdido en su primera reacción.

A la salida del Hemiciclo, dijo estar sorprendido por las informaciones y "decepcionado". Prácticamente suspirando, expresó: "Ojalá haya explicaciones". En todo momento negó tener conocimiento alguno de los presuntos negocios oscuros de Koldo, cuando ambos eran uña y carne.

Preguntado por su posible implicación en la trama corrupta, el exministro respondió: "¿Cómo voy a conocer eso? Por favor. En absoluto. Todo se hizo bien, a través de los mecanismos legales, es algo de lo que siempre me preocupé".

Ábalos, sorprendido por el 'Caso Koldo'

Ábalos había llegado a la Carrera de San Jerónimo temprano, camuflado entre sus compañeros. Como cada miércoles cuando hay sesión de control al Gobierno. Hasta bien entrada la mañana, charló amigablemente con unos y con otros. Pero todo cambió cuando se conoció la detención de Koldo. 

El foco, que había estado desde las 9:00 en el primer rifirrafe entre Feijóo y Sánchez tras la victoria del PP tres días antes, automáticamente recayó sobre él, que se refugió un rato dentro de la Cámara. "Ni siquiera ha salido a fumar", comentaban en los pasillos. Allí le aguardaban los periodistas en busca de una primera reacción a los datos que iban conociéndose. 

Cuando salió al pasillo, vista la expectación que se había generado, atendió a los medios de comunicación. En su intervención, se desvinculó de la investigación que pesa sobre el que fue su asistente y desveló que la relación entre ambos había ido menguando con "el paso del tiempo". 

Ábalos no ocultó que para él era "un golpe" la detención de Koldo. "No sé, pero bueno, ojalá haya explicaciones", apostilló antes de rematar con un: "En fin, espero que no les pase a ustedes"

Más tarde, en el programa de Cuatro Todo es mentira, donde colabora regularmente, volvió a referirse a la Operación Delorme. Ante Risto Mejide, admitió que hubo gente que le previno sobre Koldo, tal y como había publicado EL ESPAÑOL. "Sí, como de otras muchas personas que te advierten, 'ten cuidado, mira esto, ¿estás al tanto?'...", apuntó. 

No obstante, descartó calificar a Koldo como su "mano derecha". Así matizó: "Mano derecha sería el secretario de Estado... Él era mi asistente personal. Propiamente dicho, era un asesor". Y zanjó: "Era la persona que me acompañaba en los desplazamientos y daba un servicio más personal, como un asistente personal, por eso se le ve en todos los sitios".