El Gobierno prevé una larga negociación en la UE para la unanimidad sobre las lenguas cooficiales

El Gobierno prevé una larga negociación en la UE para la unanimidad sobre las lenguas cooficiales

Política XV LEGISLATURA

El Gobierno admite que habrá una negociación "de años" antes de que el catalán sea oficial en la UE

El cumplimiento del acuerdo del PSOE con Carles Puigdemont podría prolongarse incluso más allá de la legislatura que ahora se inicia.

30 agosto, 2023 03:07

El Gobierno da por hecho que necesitará tiempo para abordar el largo proceso que ha abierto para que las lenguas cooficiales en España (el catalán, el euskera y el gallego) sean oficiales en la Unión Europea.

Es decir, que Moncloa considera que aún tendrá que afrontarse una negociación "de años" para ver plenamente cumplido el compromiso asumido por el PSOE con Junts el pasado 17 de agosto, a cambio de que el partido de Carles Puigdemont votara a Francina Armengol como presidenta del Congreso y diera mayoría en la Mesa a los socialistas y a Sumar.

Ese proceso se inició en el momento en el que José Manuel Albares envió la carta a la Secretaría general del Consejo de la UE, en cumplimiento del "hecho comprobable" que exigía el líder oficioso de Junts. Su primer paso se dará este 19 de septiembre, cuando España lo plantee formalmente en el Consejo de Asuntos Generales.

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Se necesita unanimidad de todos los estados miembros de la UE, y la dificultad es que se exige que las lenguas que se incorporen como oficiales en las instituciones europeas lo sean a su vez en todo el Estado que lo propone.

Es decir, que sería preciso que el catalán, el euskera y el gallego fueran lenguas oficiales en toda España, y no sólo en las respectivas Comunidades Autónomas, como marca el Reglamento 1 de la UE, que data de 1958.

Así lo confirmó el pasado lunes a EL ESPAÑOL la representación permanente de Eslovaquia ante la UE, contradiciendo de esa forma la pretensión del Gobierno español.

La publicación de esa posición provocó ese día a un cruce de llamadas entre la representación de España y la de Eslovaquia. Según la versión del Gobierno, la aportada por esa representación a este periódico era, simplemente, la regulación jurídica genérica que exige esa oficialidad en todo el Estado miembro.

El Gobierno explica que para esto, precisamente, se abre ahora el largo proceso de negociación ante la UE y ante cada uno de los Estados miembros, en busca de esa unanimidad necesaria.

Hasta ahora, el Gobierno español no ha recibido ninguna respuesta negativa de cualquiera de los socios europeos a la solicitud de España.

En la reunión del próximo 19 de septiembre no habrá aún decisión, y sí el inicio del proceso que, previsiblemente, incluirá la petición de informes técnicos y peticiones de alegaciones.

Respecto a los plazos, el Gobierno explica que tiene una referencia remota en los dos años que duró el proceso de Irlanda para que el gaélico fuera considerado como lengua oficial de la UE. Así fue entre 2005 y 2007, a pesar de que el gaélico era lengua oficial en toda Irlanda y pese a que, además, su reconocimiento estaba incluido de inicio en el tratado de adhesión (1972).

Posteriormente, hay que implementar el desarrollo y toda la logística interna, un asunto que es también complicado: se precisará la contratación de un grupo notable de traductores e intérpretes (alrededor de 200 nuevos trabajadores por idioma, si se toma como referencia el caso irlandés). Todo ello hace que el proceso, muy probablemente, trascienda la legislatura que ahora se inicia, incluso aunque se cumplieran las formalidades en dos daños.

Un año pactado con ERC

El uso en la UE de las lenguas cooficiales fue pactado por el PSOE con el partido de Carles Puigdemont para la constitución de la Mesa del Congreso. Pero, en realidad, ya había sido acordado por el Gobierno con ERC en 2022, dentro de la Mesa de Diálogo con Cataluña.

En la tercera reunión de ese foro se acordó que "se proyectará la diversidad lingüística en el ámbito internacional, solicitando al Parlamento Europeo la consideración del catalán como lengua de uso en el pleno y facilitando la presencia de representantes de la Generalitat o su integración en la delegación española en todos aquellos foros internacionales que traten políticas con una dimensión lingüística".

Además, el documento añadía que "las previsiones de este acuerdo serán extensibles al resto de lenguas cooficiales en el caso de que así lo soliciten los gobiernos autonómicos de comunidades cuyos estatutos de autonomía contemplen una lengua oficial distinta al castellano".

Desde entonces no se avanzó nada, como confirmaron a este diario fuentes de la presidencia de la Eurocámara. Sí se abrió un proceso en el Senado para ampliar el uso de las lenguas cooficiales, pero en un año casi no se avanzó, y aquellos trabajos decaen ahora con el inicio de la nueva legislatura.