La finca en venta más cara de Valencia es un castillo del siglo XVII inmerso en la naturaleza. Aunque es una residencia dedicada al disfrute y el recreo, se encuentra muy bien equipada: tiene piscina, frontón y hasta un gimnasio.

Se trata de una casa de labranza de la Orden de los Cartujos de Porta Coeli, en cuya capilla estuvo de prior San Bonifacio Ferrer y que, tras la donación de 44.000 sarmientos -ramas de cepa de vid- dieron origen al "vino de la Cartuja". 

La parcela contabiliza los 120.000 metros cuadrados. Llegó a ser el mejor viñedo del Reino en el siglo XVIII con unas bodegas de naves góticas con contrafuertes y una torre con reloj de sol estilo mudéjar, rodeada por doce hectáreas de naranjos y olivos. 

[El obrador familiar de Valencia que vende croquetas caseras, de hasta 25 sabores diferentes y sin aditivos]

Inmersa en la Sierra Calderona, se oculta la finca con el precio más elevado de la provincia. Forma parte del término municipal de Serra, localidad que se ubica a 39 minutos de Valencia, en la comarca del Camp de Túria.

La zona noble suma 500 metros cuadrados distribuidos en tres plantas. Cuenta con una suite principal con baño, diez habitaciones, cinco baños, terrazas, patios, barbacoa, piscina, frontón, gimnasio, zona de juegos, caballerizas y plataforma de tiro al plato.

Vista del terreno más caro de Valencia en venta. Idealista

Además, el terreno posee una almazara -molino de aceite-, un embalse de riego, un pozo propio, once cámaras de vigilancia y seguridad en los muros fortificados al estilo de las cartujas. La vivienda también se adapta a la tecnología y tiene instalada una antena wifi.

Pero de lo que seguro se puede disfrutar es del silencio, la paz y la sensación de espacio y libertad que regala la vida en plena naturaleza. Estos son los rasgos más señalados y lujosos de la propiedad.

Aun así, no se encuentra apartada de la civilización. La zona dispone de supermercados, colegios y centros comerciales en sus alrededores y, a través de Bétera, hay acceso rápido al aeropuerto y a la autopista de Barcelona. 

La Cartuja de Portaceli

La Cartuja de Portaceli fue el primer monasterio de la orden fundado en tierras valencianas en 1272. Portaceli se levantó sobre los restos de un antiguo poblado andalusí ubicado en el valle de Lullén que había adquirido Adreu de Albalat, confesor del rei Jaime I y fundador del monasterio.

La orden religiosa fue fundada a finales del s. XI por San Bruno y otros seis religiosos que escogieron un valle apartado de los Alpes franceses para vivir su vocación religiosa bajo la regla de la oración, el silencio y la soledad.

Las bodegas de naves góticas con contrafuertes de finca en venta. Idealista

Serra

Serra es una localidad del Camp de Túria enclavada en el corazón del Parque Natural de la Sierra Calderona, el espacio natural montañoso más próximo a la ciudad de Valencia. Y tiene una población de 3.124 habitantes, según el censo de 2019 aportado por el Ayuntamiento.

El entorno que la rodea ofrece múltiples posibilidades para la práctica del senderismo y otros deportes de montaña, como el cicloturismo, el trail running o la espeleología.

Junto a una naturaleza mediterránea que invita a descubrir sendas, caminos y rincones de "incomparable belleza", Serra ofrece un rico patrimonio andalusí de los siglos IX-X compuesto por el Castillo y sus torres vigía.

Vista de Serra. Ajuntament de Serra

La Cartuja de Portaceli, por su parte, completa la rica herencia cultural del pueblo, cuyo casco urbano se configura con islas de casas compactas ordenadas en paralelo a las curvas del nivel del terreno.

Además, el pueblo se caracteriza por ser accidentado y montañoso, pues se asienta en la vertiente de las colinas de la Calderona y la altitud media es de 330 metros sobre el nivel del mar.