Pedro Sánchez, durante la ruptura del ayuno con el rey Mohamed VI, en Rabat.

Pedro Sánchez, durante la ruptura del ayuno con el rey Mohamed VI, en Rabat.

Política MARRUECOS-ESPAÑA

Los documentos rebaten a Moncloa: el Gobierno del PP rechazó una autonomía del Sáhara en Marruecos

Las declaraciones conjuntas de Rajoy con Rabat en las Reuniones de Alto nivel (RAN) de 2012 y 2015 eliminan toda mención a esta "solución".

18 abril, 2022 03:47

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La crisis empezó con Marruecos, se cobró una ministra como precio, y continúa con el Frente Polisario y Argelia. En medio, hace apenas un mes, Pedro Sánchez escribió una carta a Mohamed VI, y José Manuel Albares se puso a acumular argumentos para defenderla. Ahora, la crisis es también con el Partido Popular... e incluso con los documentos que podrían sostener (o no) la argumentación del Ejecutivo.

Porque España nunca aceptó "la solución autonómica para el Sáhara Occidental" en ningún documento, lejos de lo que ha sugerido el argumentario de Moncloa hasta ahora. No lo hizo el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero en 2008 y mucho menos lo hizo el de Mariano Rajoy en 2012 y 2015. Y así queda reflejado, negro sobre blanco, en las declaraciones conjuntas de las Reuniones de Alto Nivel (RAN) de aquellos años.

La crisis diplomática, pues, ya llega a ser con los dos PP del último mes: con el que dirigía entonces Pablo Casado, por "no consultar ni siquiera informar", y con el que ahora lidera Alberto Núñez Feijóo, por algo quizá más grave: "Por mentir de manera descarada. El Gobierno de España miente para taparse sus vergüenzas".

¿Y en qué no dice la verdad ni Moncloa ni Exteriores, según el PP? En atribuirle a los Ejecutivos de Rajoy "la misma postura respecto a la resolución del conflicto del Sáhara Occidental" que Sánchez concedió en su misiva al rey de Marruecos.

Para Valentina Martínez Ferro, secretaria de Internacional del Partido Popular, "es indignante no sólo que se rompa un consenso de 47 años, ni tan siquiera que lo haya hecho Sánchez solo y por su cuenta, o con todo el Congreso en contra... es que encima miente para justificarse".

Pero miremos lo que dicen los papeles, lo que firmaron las delegaciones española y marroquí hace 14, 10 y siete años.

Lo dicho y lo no dicho

En diciembre de 2008, reunidos en Madrid, Zapatero aseguró al primer ministro marroquí, Abbas el Fassi, que, "sobre la cuestión del Sáhara, tiene que haber un acuerdo razonable entre las partes, auspiciado por Naciones Unidas, en el que España va a ser siempre colaborador activo".

Y añadió, en su comparecencia conjunta [lea aquí la transcripción], que "España va a tener al respecto una posición constructiva para que en el futuro pueda haber un acuerdo final sobre la raíz del problema". Para finalmente apostillar que "la experiencia autonómica de España es una buena experiencia en este sentido".

Eso fue todo. A pesar de firmarse el "mayor acuerdo de cooperación financiera jamás suscrito por España", no hubo declaración conjunta... entre otras cosas, porque cinco meses antes, Zapatero se negó ante Mohamed VI, en Oujda, a hacer una declaración pública en favor del "plan autonómico para el Sáhara".

Pero en octubre de 2012, ya con Rajoy en el Gobierno, desapareció toda mención por parte del Ejecutivo español a este asunto. La RAN se celebró en Rabat, y en esta ocasión, sí que hubo una declaración conjunta con Abdel-Ilah Benkiran, primer ministro de Maruecos [consúltela aquí en PDF].

En ella, el párrafo dedicado al Sáhara Occidental dice textualmente: "En lo relativo a la cuestión del Sahara, las dos partes han subrayado la importancia de la reanudación de las negociaciones sobre bases sólidas, de conformidad con las resoluciones y los parámetros claramente definidos por el Consejo de Seguridad, incluyendo el realismo y el espíritu de compromiso, para llegar a una solución política a este contencioso que ha durado demasiado tiempo. España ha saludado también los esfuerzos serios y creíbles de Marruecos".

Y en 2015, todavía con los mismos gobernantes en Madrid y Rabat, la cita tuvo la capital española como sede.

La declaración conjunta [consúltela aquí en PDFhace en este caso una mención más prolija, en dos párrafos, sobre este contencioso: "En lo relativo a la cuestión del Sáhara Occidental, las dos partes se felicitan por la adopción en abril 2015 de la resolución 2218 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. En este contexto, España saluda los esfuerzos serios y creíbles de Marruecos. Del mismo modo, las dos partes han recordado la importancia de la reanudación de las negociaciones sobre bases sólidas, de conformidad con las resoluciones y los parámetros claramente definidos por el Consejo de Seguridad y han subrayado el espíritu de compromiso y de realismo para llegar a una solución política de consenso y mutuamente aceptable".

Y concluye: "Las dos partes han reconocido que una solución de este contencioso de larga duración y el refuerzo de la cooperación entre los estados miembros de la Unión del Magreb Árabe contribuirá a la estabilidad y a la seguridad en la región". 

Como se ve en los destacados, sí hay continuidad en la terminología, pero ninguna mención al plan de autonomía marroquí para el antiguo Sáhara Español.

Lo argumentado

"En diplomacia, lo que cuenta es lo que está escrito... sobre todo porque la clave es lo que no se dice", apunta la dirigente popular Martínez Ferro. "Y el Gobierno de Rajoy nunca apoyó, aceptó ni saludó la autonomía saharaui para Marruecos". Es más, eliminó toda mención siquiera de palabra, es decir, "lo rechazó".

Sin embargo, en sus comparecencias públicas, tanto Sánchez como Albares han jugado con el lenguaje. La doble condición del ministro, como político y diplomático de carrera, le pudo ayudar a componer una terminología hábil para sostener el giro español en este "diferendo" y poder llamarlo "profundización".

Según las palabras del ministro en su comparecencia urgente ante el Congreso, "España no cambia de postura, se mantiene en el marco de Naciones Unidas, como los sucesivos Gobiernos han hecho". El titular de Exteriores afirmó que "los comunicados conjuntos de las RAN posteriores al plan de autonomía presentado por Marruecos en 2007 reconocen los esfuerzos serios y creíbles" de Rabat.

Así, continuó, "Zapatero recibió este plan en Moncloa, y le dio la bienvenida", dijo Albares. "Ésa fue la posición de él y de su gobierno durante todos esos años. Así lo está trasladando él públicamente y así me lo ha dicho a mí personalmente. Lo mismo que mi antecesor de entonces", el ministro Moratinos.

"Pero es que los Gobiernos del PP", y aquí viene la frase que tanto indigna en Génova -y al propio Rajoy-, "tampoco se desviaron nunca de esta posición". Según Albares, "el Gobierno de Mariano Rajoy en las RAN de 2012 y de 2015, siguió exactamente esa misma línea".

Y para darle credibilidad a su afirmación, el titular de Exteriores anunció una "cita textual" de las declaraciones conjuntas: "España saluda los esfuerzos serios y creíbles de Marruecos"... es decir, nada de autonomía, porque en los documentos no está.