El lehendakari, Iñigo Urkullu, y el presidente del PNV, Andoni Ortuzar

El lehendakari, Iñigo Urkullu, y el presidente del PNV, Andoni Ortuzar Miguel Toña Efe

España GOBIERNO DE COALICIÓN PNV-PSE-EE

El PNV no renuncia a promover una consulta sobre un nuevo Estatuto

El Pacto de Gobierno, blindado por los socialistas ante un eventual acuerdo parlamentario sobre el derecho a decidir. Ortúzar pretende que la reforma estatutaria “quede zanjada” esta legislatura.

22 noviembre, 2016 15:00

Tras la firma esta martes del documento en el Parlamento Vasco, el presidente del PNV, Andoni Ortuzar, ha reconocido a preguntas de los periodistas que la consulta habilitante estará “dentro de seis meses” encima de la mesa de la ponencia parlamentaria de autogobierno. El PNV la concibe como una forma de “legitimación” del acuerdo político al que lleguen los grupos antes de su negociación y aprobación por el Congreso de los Diputados, pero el marco legal actual no contempla su realización.

Los nuevos socios del Ejecutivo se han dado “libertad mutua” para defender sus propuestas discrepantes en la Cámara y el pacto de Gobierno, que ha orillado concretar una reforma estatutaria y se ha centrado en la gestión, está incluso blindado por los socialistas ante cualquier eventual acuerdo sobre la celebración de una consulta que pudieran alcanzar los parlamentarios, mayoritarios en su apoyo al derecho a decidir.

La secretaria general del PSE-EE, Idoia Mendía, ha justificado este blindaje porque “el Parlamento no tiene nada que ver con el Gobierno” y porque “no se puede cercenar el debate” en la Cámara, donde se “ha residenciado” la discusión y “dónde todas las ideas tienen derecho a ser debatidas y rebatidas”.

Aunque no hay plazos para la consecución de un acuerdo parlamentario sobre un nuevo Estatuto, Ortuzar ha afirmado que la intención de su partido es que la reforma estatutaria se lleve a cabo en esta undécima legislatura, o que al menos queden en ella “decididas las bases” sobre la actualización del autogobierno vasco. El único marco temporal establecido es la redacción del articulado en ocho meses. El presidente ha defendido esta inconcreción para no “fijar el paso” al resto de grupos.

“GUÍA PARA ESPAÑA”

Los dos dirigentes políticos han defendido el valor del pacto de Gobierno alcanzado entre fuerzas tan diferentes e inédito en el País Vasco desde 1998. Mendía ha alabado su pluralidad e importancia “no sólo para Euskadi sino para el conjunto de España”, con una mención a la posibilidad de que pueda convertirse en “guía” y contribuya a “solucionar otros asuntos”, en referencia al conflicto independentista planteado en Cataluña.

Ortúzar también ha reparado en la situación catalana. “El proceso empezó por unas vías bastante parecidas a las que hoy proponemos aquí”, ha manifestado para añadir que “las cosas se torcieron en Madrid” y desear que el paso dado en Euskadi influya en la política española y haga “cambiar el chip” sobre la vertebración territorial del Estado, produciendo una “mayor apertura”. Ha dicho que el acuerdo llega en “un buen momento” y que las instituciones estatales “se tienen que reinventar” y adoptar nuevas formas de hacer política.

Mendía ha repartido culpas entre los Gobiernos español y catalán, pero ha concluido ensalzando el valor del diálogo y el acuerdo y se ha mostrado esperanzada en que el Ejecutivo de Rajoy, ahora en minoría, se vea forzado a encontrar una solución para Cataluña que siga esas mismas vía.

La líder del PSE-EE no ha encontrado contradicción alguna en que ese diálogo que alaba en Euskadi no haya sido defendido por su partido en España, donde la federación socialista vasca fue una de las más activas en el apoyo a las tesis de Pedro Sánchez. Su secretaria general ha argumentado que son dos cosas distintas, porque en el País Vasco PSE-EE y PNV venían avanzando en un camino de alianzas desde 2013, mientras que en España el objetivo era convertirse en alternativa del PP.

PACTO “NO EXCLUYENTE”

El presidente del PNV y la secretaria general del PSE-EE han firmado junto al todavía lehendakari en funciones, Íñigo Urkullu, un documento programático de 80 páginas presentado bajo el enunciado de “Pilares para construir una Euskadi con más y mejor empleo, más equilibrio social, más convivencia y más y mejor Autogobierno”. Los tres han estampado su rúbrica con solemnidad en ejemplares duplicados, en euskera y castellano, en la mesa Simón Bolívar ubicada en el hall de la segunda planta de la Cámara vasca.

Los dos partidos se quedan a un voto de la mayoría absoluta en el Parlamento, una realidad muy tenida en cuenta por los firmantes. Su pacto “no es excluyente”, sino que está abierto a otras fuerzas políticas para sacar adelante los Presupuestos y conseguir grandes acuerdos de país en materia de autogobierno y memoria y convivencia.

SIN REVISIÓN DE LOS PERFILES LINGÜÍSTICOS

Han transcurrido 58 días de las elecciones autonómicas, tiempo en el que PNV y PSE-EE han preservado sus contactos con gran secretismo, alejados de las filtraciones, y había gran expectativa por conocer sus aclaraciones sobre la reforma estatutaria, sometida a interpretaciones dada la calculada ambigüedad de la redacción en esa área, y otros puntos del pacto.

Aunque cordiales, Ortuzar y Mendía han cortado sus intervenciones antes de que los periodistas pudieran acabar su trabajo. En el último minuto ha quedado claro, no obstante, que el acuerdo no incluye la revisión de los perfiles lingüísticos para el acceso a la Función Pública vasca. Un tema de gran controversia durante la campaña electoral defendido por el PSE-EE, que denunció la discriminación que implica no saber castellano a través de un vídeo que levantó ampollas entre los nacionalistas.

El acuerdo se salda en esta materia con una breve alusión, en apenas una línea, a la necesidad de continuar con el proceso de “adaptación y actualización de los perfiles lingüísticos” dentro de la modernización de la Administración vasca. Por si no quedaba claro que nada tiene que ver con la reivindicación socialista, Ortúzar ha matizado que la actualización de perfiles es una tarea que se lleva a cabo “cada cierto tiempo”.

La competencia sobre política lingüística corresponde además al Departamento de Cultura, según ha recordado Mendía, en alusión a que no será una de las tres carteras que gestione su partido.

Frente a la inconcreción del apartado sobre el nuevo Estatuto el documento que sustenta el pacto aborda múltiples actuaciones en políticas sectoriales con compromisos detallados.

REDUCIR EL PARO A MENOS DEL 10%

La más desarrollada es la parte económica. El objetivo principal de los firmantes es el empleo, y su horizonte, reducir la tasa de paro por debajo del 10%, prioridad del PNV durante la campaña del 25-S. El Gobierno contará con un programa marco con actuaciones destinadas a promover la empleabilidad de los colectivos con mayores dificultades (jóvenes, parados de larga duración, mayores de 45 años , mujeres…) . En el pacto se incluye, aunque sin precisión, la reforma de Lanbide, el servicio vasco de intermediación laboral, objeto de muchas críticas durante la última legislatura por su falta de eficacia.

CUlMINACIÓN DE LA “Y” FERROVIARIA

La culminación del nuevo trazado ferroviario, conocido como la “Y” vasca, que conectará España con el resto de Europa por el corredor Atlántico, es objeto de reivindicación conjunta y de elevadas demandas. Ambos partidos presionarán al Gobierno central para conseguir que la entrada a las capitales de Álava y Bizkaia y a la localidad fronteriza de Irún se produzca mediante el soterramiento de la línea férrea. Las obras en marcha son de una gran envergadura y presupuesto y los socialistas aspiraban a gestionar la cartera de Transportes, pero el PNV ha optado por no soltar el control.

NEGOCIACIÓN DE 1.600 MILLONES DEL CUPO

PNV y PSE-EE tratarán de desbloquear las liquidaciones pendientes del Cupo y acordar con el Gobierno central una nueva ley quinquenal. Están en disputa 1.600 millones de euros. La suma ha ido engordando a lo largo de los años y ni siquiera los Ejecutivos de Patxi López y Rodríguez Zapatero fueron capaces de superar las discrepancias. Urkullu considera esencial esta reclamación, tal y como expuso la semana pasada ante el Rey. Constituye una de las exigencias del PNV en la negociación sobre los Presupuestos Generales del Estado iniciada con el Gobierno de Mariano Rajoy.

PACTO EDUCATIVO

Los nuevos socios plantean un pacto educativo que concluya en una nueva ley general , volcada en la escuela pública. Apuestan por el relanzamiento del inglés en Primaria y una segunda lengua extranjera en la ESO. Prometen la convocatoria anual de una OPE para el profesorado y dotaciones para becas de 55 millones por curso que beneficiarán a 130.00 0 alumnos de enseñanza no universitaria.

GENERALIDADES SOBRE EITB

En este apartado se limitan a exponer la necesidad de hacer sostenible el ente público vasco de comunicación mediante un debate encaminado a su reforma integral, ya acordada por el Parlamento Vasco en la última legislatura. Incluye principios generales como el de “la objetividad y el respeto a la pluralidad” en sus servicios informativos

CONSOLIDACIÓN DE LA RENTA DE INGRESOS

Las ayudas sociales nunca han estado en discusión, aunque sí su control. El pacto contempla reforzarlo para evitar posibles abusos, a la vez que apuesta por “consolidar” la Renta de Garantía de Ingresos e introducir algunos cambios sobre los cálculos de renta y patrimonio para evitar la exclusión del sistema de personas necesitadas. Otras medidas son elevar el presupuesto de las ayudas de emergencia social y elaborar una normativa específica para afrontar la pobreza energética, en la que Mendía ha hecho hincapié esta mañana.

FUNCIONAMIENTO Y SEGUIMIENTO

Cuatro paginas describen, finalmente, las medidas para el funcionamiento y seguimiento del acuerdo entre PNV y PSE-EE. Ambos partidos se comprometen a actuar de forma conjunta en la adopción y presentación de iniciativas parlamentarias y pactan también una respuesta unitaria a las propuestas de la oposición.

En temas ajenos a su programa cada grupo parlamentario podrá fijar su posición de forma autónoma. En cuestiones de autogobierno las dos formaciones “tratarán de transaccionar” un acuerdo “y sólo si resulta imposible la aproximación se reconocerán libertad para acordar con otros grupos”.

La Comisión de Seguimiento del Pacto, encargada de resolver las discrepancias, se reunirá una vez al año o a petición de cualquiera de las dos partes.