Hoy, 22 de abril, celebramos el Día Internacional de las Niñas en las TIC, una fecha clave para reflexionar sobre la brecha de género en la tecnología. A pesar de su talento y capacidad, muchas niñas y jóvenes siguen enfrentando barreras que limitan su acceso a este campo.

La diversidad es crucial para la innovación en el sector aeroespacial y la industria tecnológica, por lo que es fundamental fomentar su participación desde edades tempranas.

Las cifras son claras, menos del 30% de las mujeres eligen carreras STEM y su presencia en ingenierías sigue siendo baja. Esta cifra no se debe a una falta de habilidades, sino a la existencia de barreras socioculturales que restringen su acceso. Es necesario implementar medidas concretas para cambiar esta realidad.

Desde Ellas Vuelan Alto trabajamos para que el sector aeroespacial sea un espacio de igualdad. Para ello, promovemos iniciativas que acercan a las niñas a estas disciplinas y fomentamos la visibilidad de referentes femeninos en los sectores aeroespacial y digital. Nuestro objetivo es que sueñen en grande y vean en las TIC una herramienta clave para construir su futuro profesional.

Sin embargo, no basta con motivarlas, sino que también necesitamos políticas activas que garanticen su acceso a la formación tecnológica. Es imprescindible integrar programas de educación digital en las escuelas, fomentar su participación en concursos de programación y robótica, apoyar a mujeres en tecnología para que se conviertan en modelos a seguir e implementar programas de mentoría que conecten a las jóvenes con profesionales del sector.

El sector aeroespacial y la tecnología avanzan rápidamente. Si no trabajamos lo suficiente para cerrar la brecha digital, las niñas de hoy podrían quedar fuera de las oportunidades del mañana. Y partimos de una situación bastante negativa pues, en la actualidad, solo 1 de cada 4 posiciones STEM está ocupada por una mujer, una proporción que no ha cambiado prácticamente desde 2011.

Las empresas tienen un rol fundamental. Deben promover entornos laborales inclusivos y facilitar el desarrollo de mujeres en tecnología.

Aún persisten desigualdades en la representación femenina en puestos de liderazgo, especialmente en sectores como la construcción y las comunicaciones, donde la presencia de mujeres en ocupaciones STEM es del 18% y 23%, respectivamente. Es crucial generar espacios donde las niñas puedan verse reflejadas y motivadas a seguir este camino.

Por su parte, las Administraciones públicas también deben involucrarse activamente. Es necesario diseñar políticas que fomenten la inclusión de niñas y mujeres en el ámbito de las TIC, mediante becas e incentivos a la educación STEM, eliminación de estereotipos de género en los planes de estudio y alianzas entre instituciones educativas y empresas tecnológicas para facilitar la integración de más mujeres en estas áreas desde sus primeros años de formación.

El acceso a la tecnología no debe depender del género ni de las circunstancias socioeconómicas. Garantizar que todas las niñas, sin importar su origen, tengan la oportunidad de acceder a formación tecnológica es una responsabilidad de toda la sociedad. La digitalización es imparable, y sin una participación equitativa, corremos el riesgo de perpetuar desigualdades que afectarán al desarrollo global.

No podemos darnos el lujo de desperdiciar talento. Debemos inspirar, formar y empoderar a las niñas para que lideren el cambio. La revolución digital y aeroespacial necesita su creatividad, inteligencia y pasión. Además, las empresas deben comprometerse con esta transformación, creando ambientes de trabajo inclusivos y promoviendo la contratación de talento femenino en tecnología.

El compromiso es claro, asegurar que ninguna niña se quede atrás en el mundo digital. Porque cuando ellas vuelan alto, toda la sociedad despega con ellas. La igualdad en el acceso a la tecnología no solo beneficia a quienes participan en ella, sino que fortalece a toda la sociedad, impulsando la innovación, la competitividad y el desarrollo sostenible.

Las niñas tienen el talento, la creatividad y la pasión para transformar el mundo digital y aeroespacial, pero necesitan oportunidades reales para hacerlo. Si abrimos camino hoy, construiremos un futuro más innovador, diverso y justo para todos.

En Ellas Vuelan Alto, confiamos en su capacidad y en la necesidad de eliminar barreras que limiten su acceso a la tecnología. Es clave fortalecer iniciativas que faciliten su participación y garanticen un entorno donde puedan desarrollar todo su potencial.

*** Isabel Maestre es presidenta de Ellas Vuelan Alto.