Image: Extraña geografía

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Poesía

Extraña geografía

Juan Lamillar

26 enero, 2018 01:00

Juan Lamillar

Pre-Textos. Valencia, 2017. 80 pp.. 15 €

Estudioso de la obra de Luis Cernuda y biógrafo de Joaquín Romero Murube, Juan Lamillar (Sevilla, 1957) ha publicado trece libros de versos y varios volúmenes de crítica literaria.

Los cuarenta poemas de Extraña geografía fueron escritos entre los años 2005 y 2008. Dividido en seis secciones, el conjunto se inicia con una composición que resume la filosofía del autor. Lamillar propone un compromiso firme con la existencia: "Sumérgete en el agua/ purísima del miedo, / en el claro barrizal de los días". Después nos recuerda que podemos sentirnos extranjeros en pleno impulso creativo. Alguno de nuestros habitantes se adentra en territorios desconocidos y busca palabras. Ya no se reconoce en el azogue del espejo que es cada página. En el segundo apartado del libro, con cita de Marco Aurelio, el poeta exhibe su habilidad técnica. Los siete sonetos encierran meditaciones sobre el paso del tiempo y el desgaste oscuro que nos espera, los fragmentos de alegría que lindan con el dolor, una certeza luminosa, los afanes. La parte tercera del poemario contiene tránsitos y despedidas. El escritor comunica su decaimiento al sentarse a una mesa donde antes dialogó con amigos que ya han muerto. Observa a sus alumnos que se miran en el desfiladero creado por unos vocablos. Rechaza convenciones. Retiene momentos que parecen anodinos. Ve las fronteras transformadas en adioses "cuando la edad cierra ventanas".

La sección cuarta del libro es breve, pero sustanciosa. El texto inicial incluye términos japoneses ("zazen", "satori"). En el quinto apartado de la obra, Lamillar alude a experiencias de sus viajes. Reflexiona ante las ruinas de Pérgamo y Hierápolis. Los frisos, el liquen, las tumbas, los esplendores, los capiteles rotos y la hojarasca le inspiran pensamientos profundos. La geografía que evoca es a veces más cercana. El autor combina en el poema "Domingo en el collado" unas estampas del otoño y los restos del verano. Del paisaje que contempla "sube una extraña calma, / la luz nos hace fuertes, / más dichosos la música humilde de los árboles". Frente a las pérdidas, confía en la memoria. La última parte del poemario se centra en la fotografía. El poeta nos ve sobrevivir en el "óxido terco" de unas imágenes. Varios artistas prestigiosos (los estadounidenses Nicholas Nixon y Diane Arbus, el español Alberto García-Alix) son mencionados.

Extraña geografía es una obra de madurez. Con sosiego y escritura cuidada, Lamillar conjuga añoranzas y celebraciones.

@FJIrazoki