Música

Lennon, 25 años y un día

8 diciembre, 2005 01:00

John Lennon. Foto: I. Macmillar

Tal día como hoy, el 8 de diciembre de 1980, moría John Lennon asesinado por Mark David Chapman a las puertas de los apartamentos Dakota de Nueva York. Fue el autógrafo más caro de la historia del rock. El ex beatle dejaba un hermoso cadáver y un legado musical con el que había cambiado la fisonomía de la cultura contemporánea. El Cultural recuerda la importancia de su obra.

Hendrix, Morrison y Joplin vivieron rápido, murieron jóvenes y tuvieron hermosos cadáveres. Cuando a John Lennon le pegaron cuatro tiros en la puerta del edificio Dakota era un cuarentón que estaba de vuelta de todo. Más cerca de la burguesía que de la rebelión, cargaba con la mujer que había dinamitado a la banda pop más importante de todos los tiempos y, musicalmente, regresaba a unos estudios de grabación después de cinco años de vacaciones. "Si yo hubiera muerto en 1975 sólo hablarían de lo fantástico que era", dijo en otoño de 1980 para justificar su retorno a la vida pública. "En estos años de silencio he aprendido a liberarme de mi intelecto, de la imagen que tenía de mi mismo. y es que quiero volver a ser yo mismo".

John Winston Lennon nació el 9 de octubre de 1940 durante un ataque de la Luftwaffe a Liverpool. 24 años después ya había grabado con su grupo, The Beatles, algunas de las canciones más influyentes de la historia del rock and roll: Love me do, I want to hold your hand, Ticket to ride. Con el tiempo la lista de temas creció hasta convertir al cuarteto de Liverpool en leyenda. "Somos más populares que Jesucristo", llegó a decir Lennon. Aferrado a su espíritu rebelde, hiperactivo, amigo de la experimentación y con ideas de dimensiones caleidoscópicas, Lennon era el talento. Con Paul McCartney, un tipo con una formación musical más tradicional y un concepto práctico de la industria discográfica, formó la pareja perfecta de compositores.

Hasta que acabó la magia: Lennon fue el primer miembro de los Beatles que expresó abiertamente sus deseos de abandonar el grupo. En abril de 1970 terminó el sueño pop. Los Beatles se separan y comienzas los insultos y las batallas en los tribunales. Lennon y McCartney se juran odio eterno, entierran la década prodigiosa y se lanzan a unas carreras en solitario que jamás alcanzaran el esplendor de los tiempos pasados. Pacifista incombustible, Lennon vuelca en sus discos mensajes en contra de la guerra y a favor de la paz.

En ocasiones resulta tremendamente provocador, llegando a aparecer desnudo junto a Yoko Ono en la portada del disco Unfinished music Nº1: two virgins. Los discos en solitario de Lennon resultan políticamente agresivos, llegando a exigir en alguno de sus temas "el poder para el pueblo". Los escándalos que vivió con los Beatles, generalmente arrebatos dignos de estrellas de rock malcriadas, se convirtieron en alegatos de fuerte contenido social. Canciones como Imagine adquirieron de inmediato la condición de himnos progresistas. "Fue una declaración de principio", dijo Lennon, "y un éxito en todos los sentidos y lugares que se escuchó tanto porque se endulzó para que de esa manera fuera aceptado. Lanzamos el mensaje político bañado en miel".

Sin los Beatles, Lennon lanzó discos irregulares y se enfrentó a grandes problemas. El gobierno de Estado Unidos le quiso deportar por considerarle un "extranjero indeseable". Se distanció de Yoko y se acercó al alcohol. Volvió con Yoko y siguió bebiendo y provocando escándalos. En noviembre de 1980 lanzó Double fantasy, un disco conmovedor que supuso su retorno, después de cinco años de silencio, y su definitiva despedida. ¿Qué queda de John Lennon 25 años después de su muerte? Cientos de grandes canciones y una idea utópica: podemos cambiar el mundo. El 8 de diciembre de 1980 el hombre que había pedido una oportunidad para la paz (Give peace a chance) se desangraba junto a Central Park, a miles de kilómetros de su hogar en Liverpool. El planeta había perdido, como dijo Norman Mailer nada más conocer la noticia de su asesinato, "un genio espiritual".