#LaFunciónVaAComenzar con María Adánez

Escenarios

#LaFunciónVaAComenzar con María Adánez

Con la colaboración de la Academia de las Artes Escénicas de España, la actriz nos habla de la vuelta a los escenarios tras la pandemia y de lo que ha significado el teatro en su vida

16 junio, 2020 11:13

María Adánez estaba en Noruega cuando se declaró el estado de alarma en España. La actriz celebraba con unas vacaciones en el país nórdico el éxito de su último trabajo, el montaje de Divinas palabras dirigido por José Carlos Plaza y que pudo verse en el Teatro María Guerrero de Madrid. Adánez confía en que el sector de las artes escénicas sabrá buscar "las fórmulas necesarias para que el público vuelva a entrar al teatro sin miedo y con confianza".

En esta nueva entrega de #LaFunciónVaAComenzar, la actriz comparte también con nosotros algunas reglas fundamentales para subirse encima de un escenario, aprendidas de maestros como Miguel Narros. "El teatro lo es todo, es el sitio donde he crecido como mujer y como actriz", señala Adánez.

#LaFunciónVaAComenzar es una campaña de El Cultural y la Academia de las Artes Escénicas de España para subrayar la incidencia positiva de las artes escénicas en la sociedad precisamente en momentos difíciles como los que vivimos, pero también quiere recordar la fragilidad de su producción y las dificultades que entraña volver a subir el telón.

María Adánez comenzó su carrera interpretativa de manera muy precoz, a los 6 años de edad. Debutó en el cine en 1982 con la película Mar brava, de Angelino Fons, y ese mismo año hizo su entrada en el mundo del teatro en Casa de muñecas, un montaje de la obra de Ibsen dirigida por De la Morera y protagonizada por José María Pou y Amparo Baró. Ha trabajado en el cine a las órdenes de directores como Carles Mira, Mariano Ozores, José Luis Garci, y en los últimos años ha trabajado también como actriz de doblaje en películas de animación. Sobre las tablas ha trabajado con directores como Miguel Narros, José María Flotats y Luis Luque.

En paralelo, se convirtió en una de las actrices cómicas más populares de su generación por su trabajo en la serie de televisión Aquí no hay quien viva, por el que recibió un premio de la Unión de Actores como mejor actriz de televisión. También ha participado en Farmacia de guardia, Pepa y pepe, La que se avecina, Amar es para siempre o El Ministerio del Tiempo.

Como actriz de teatro recibió en 2003 el Premio Ercilla a la mejor actriz revelación por El príncipe y la corista y ha sido nominada varias veces al Premio Valle-Inclán de Teatro, la última de ellas por Divinas palabras en la edición del premio que tuvo que suspenderse a causa del estado de alarma.