Exposiciones

Segovia y Bilbao: arte en común

24 enero, 1999 01:00

"De Picasso a Bacon..." Museo de Arte Contemporáneo Esteban Vicente. Plazuela de las Bellas Artes. Segovia. Hasta el 20 de abril.

El Museo de Bellas Artes de Bilbao es ejemplar en cuanto a la descentralización cultural bien entendida. Institución de larga trayectoria, cuenta como principal valor de consistencia con una colección propia de gran calidad, con sus lagunas y su subjetivismo, pero impresionante por la cantidad de obras reunidas y por el recorrido artístico que realiza. Actualmente en proceso de ampliación, ha tenido la oportunidad de prescindir temporalmente de algunas de las mejores piezas de su colección de arte contemporáneo para trasladarlas a Segovia.
El Museo de Arte Contemporáneo Esteban Vicente comparte con el de Bellas Artes de Bilbao algunos rasgos distintivos. En primer lugar, es un centro de arte que ha nacido ya con una colección -la importante donación del pintor segoviano-, circunstancia tan poco habitual en los últimos tiempos. Por otra parte, como el de Bilbao, pretende extender su tarea mucho más allá de la mera conservación de la colección, lo que reviste especial relevancia en Segovia, hasta ahora prácticamente al margen, como tantas otras capitales de provincia, de la actualidad artística. Y, muy importante, al frente de ambos museos se sitúan dos personas capaces de sacar adelante sus respectivos proyectos: Miguel Zugaza y Ana Martínez de Aguilar.
La colección de arte contemporáneo del Museo de Bellas Artes de Bilbao arranca de 1915 y se ha ido enriqueciendo en distintas etapas, en un primer momento a la par que se producían las innovaciones artísticas y después, con criterio más historicista, volviendo atrás para completar áreas y establecer una línea de lectura de la historia del arte del siglo XX. Lectura en tres niveles paralelos: arte vasco, arte español y arte internacional. La selección que se presenta en las salas del Museo Esteban Vicente, tan bien resueltas en la remodelación del edificio, abarca esas tres direcciones. Sorprenderá a quienes no conozcan la colección de Bilbao su riqueza en obras de arte vasco, entre las que destacan en la exposición las de Arteta, Chillida, Lekuona, Tellaeche u Oteiza; la buena representación española, con Sunyer, Togores, Domínguez, Alberto Sánchez, Gargallo, Luis Fernández, Solana, Tàpies, Millares o Palazuelo; y los ejemplos de arte internacional, que se pretende sirvan de contexto visual a las creaciones nacionales: Metzinger, Hayden, Delaunay, Van Velde, Bacon, etcétera.
Capítulo importante es además el de la obra sobre papel, a la que el Museo de Bellas Artes de Bilbao ha prestado siempre gran atención. Con mucho tino, frente a la imposibilidad económica de adquirir cuadros de cotizados artistas internacionales, ha querido que éstos estuvieran representados a través del dibujo o la estampa. Y así, se exponen estupendas obras de, entre otros, Cézanne, Léger, Duchamp, Motherwell, Michaux, Hockney, Twombly, Beuys, Merz y Löpertz.