Vista de la exposición de Ángel Duarte en el Museo Helga de Alvear

Vista de la exposición de Ángel Duarte en el Museo Helga de Alvear Joaquin Cortes

Arte

Ángel Duarte, el discípulo de Oteiza que hizo de la geometría un arte social

El Museo Helga de Alvear muestra la obra del artista, miembro del Equipo 57, que transformó la escultura española en la segunda mitad del siglo XX.

15 enero, 2023 02:28

En 1954, Ángel Duarte (Aldeanueva del Camino, Cáceres, 1930 - Sion, Suiza, 2007) logró cruzar la frontera con Francia y establecerse por fin en París. Algo que había anhelado desde hacía tiempo. París en ese momento seguía siendo la capital del arte europeo, pese a Nueva York.

Ángel Duarte. Matemáticas y transformación social

Museo Helga de Alvear. Cáceres. Comisaria: María Jesús Ávila. Hasta el 12 de febrero

Allí estaban Pablo Palazuelo y Eugenio Sempere, pero también sus amigos Agustín Ibarrola, José Duarte y Juan Serrano, con los que participaría en uno de los episodios fundamentales en el relato del arte en España del siglo XX: el Equipo 57.

A este esfuerzo colectivo estuvieron vinculados Jorge Oteiza, que actuó como maestro aunque nunca formó parte del grupo, Néstor Basterretxea, que abandonó muy pronto el equipo, y Juan Serrano.

[El arte que frenó el brutalismo y el caos de la Segunda Guerra Mundial]

La producción de Equipo 57 partía de los principios de la abstracción geométrica para poner en cuestión los presupuestos del arte que se estaba imponiendo, el del expresionismo abstracto y el informalismo, como se evidencia en la primera parte de la exposición que, comisariada por María Jesús Ávila, le dedica el Museo Helga de Alvear.

Este tipo de obra basado en la teoría de la interactividad del espacio, que suponía “la interpretación plástica de la continuidad dinámica del espacio”, iba en contra de la idea de autoría que el informalismo y el expresionismo defendían, la de un genio que vierte su individualidad sobre la superficie del lienzo, y buscaron un sistema objetivo para realizar sus obras renunciando así a la firma individual, lo que iba además en contra del mercado.

Vista de la exposición de Ángel Duarte en el Museo Helga de Alvear

Vista de la exposición de Ángel Duarte en el Museo Helga de Alvear Joaquin Cortes

Su intención fue que el arte volviera a vincularse a la vida, recuperando uno de los lemas de las vanguardias históricas, y tuviera mayor implicación social, lo que hizo que pronto se interesaran por el diseño.

Fue quizás el modo de entender esta implicación lo que hizo que Equipo 57 se disolviera oficialmente en 1966, a los nueve años de su nacimiento. Ibarrola y José Duarte se centrarían en Estampa popular, que recuperaba el realismo como instrumento revolucionario.

[Mirar (escultura) contemporáneamente

Ángel Duarte, sin embargo, continuó aplicando en su obra los presupuestos de los que había partido Equipo 57: una abstracción geométrica basada en un sistema que huyera de la subjetividad con un proyecto que tuviera una implicación social directa, que en su caso se evidenció sobre todo en sus proyectos para el espacio público, de los que se muestran algunas maquetas.

Detalle de 'F.5.', de Ángel Duarte

Detalle de 'F.5.', de Ángel Duarte Joaquín Cortés

Las obras de Ángel Duarte, que ha adquirido recientemente Helga de Alvear con la intención de depositarlas en el Museo Pérez Comendador-Leroux en Hervás, cerca de su localidad de nacimiento, para que se queden en Extremadura y que ahora se muestran en Cáceres, esculturas en su mayoría, toman como unidad mínima el paraboloide hiperbólico para construir desarrollos espaciales y cuyas combinaciones llevó hasta la extenuación.

Una producción rigurosa en la que se unían arte y ciencia y que participaba activamente de las corrientes de arte óptico y cinético internacionales.