Alexander Zverev, desencajado ante el grito de una aficionada sobre las denuncias de violencia machista que recaen sobre él

El Open de Australia no ha tenido, ni mucho menos, el final esperado para Alexander Zverev. El alemán ha vuelto a perder la oportunidad de ganar un Grand Slam -ya ha perdido tres finales-, pero el momento más embarazoso resultó durante su discurso tras haber claudicado ante el número uno del mundo, Jannik Sinner.

'Sascha' terminó el partido desolado. De nuevo se le resistía ganar un grande, lo que provocó que el alemán no pudiera aguantar las lágrimas. El sueño de su vida se volvía a escapar. Con toda la endereza posible se subió al escenario de la Rod Laver y durante su discurso, tuvo que detenerse ante el griterío de una aficionada australiana recordándole los supuestos casos de violencia machista que recaen sobre él.

Las gradas, repletas de aficionados, se quedaron en silencio para escuchar al alemán, pero lo que escucharon fueron los comentarios de una mujer que, hasta en tres ocasiones, repitió: "Australia cree a Olya y Brenda", haciendo referencia a las dos personas que han denunciado públicamente los malos tratos recibidos sobre el tenista alemán.

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El rostro del jugador germano se quedó desencajado. Zverev, con cara de circunstancia sin entender nada, miró a la grada buscando a la persona que había realizado esos comentarios, colocó los micrófonos y se detuvo en silencio, provocando los aplausos del resto de la tribuna.

La tensión se palpó en el ambiente, pero el alemán no quiso entrar en ninguna discusión y decidió no responder a la aficionada australiana. Sin embargo, él sabía de sobra a qué personas se refería cuando nombraba a Olya y Brenda.

Los testimonios de Olya y Brenda

La primera acusación que se vertió sobre él fue en octubre de 2020 cuando Olya Sharypova, por aquel entonces pareja de 'Sascha' le acusó de haberle pegado y haberle puesto un cojín en la cara durante unos segundos. La extenista no llegó a denunciarlo, pero sí lo hizo oficial a través de sus redes sociales.

La siguiente presunta víctima de Zverev es Brenda Patea. Esta mujer confesó que el alemán le había empujado contra la pared y que intentó asfixiarla durante una discusión. Sin embargo, el 'caso' se cerró en junio del año pasado con un acuerdo extrajudicial donde el alemán se comprometía a pagar una multa de 200.000 euros a su pareja.

Cabe destacar que la ATP lanzó una investigación interna con el caso de Olya Sharypova que terminó en enero de 2023 sin que se pudieran corroborar las acusaciones, por lo que no se tomó ninguna medida disciplinaria contra él.

En la rueda de prensa posterior al partido, Zverev fue preguntado por este desenlace en la final del Open de Australia y quiso ser contundente en torno a las acusaciones que hay sobre él: "Creo que ya no hay acusaciones. ¿No ha habido ninguna desde hace cuánto tiempo? ¿Nueve meses ya? Bien por ella. Creo que ella era la única en el estadio que creía algo en ese momento. Así que ese es el caso. Bien por ella. Creo que he hecho todo lo que he podido y no voy a abrir ese tema otra vez".

El alemán, número 2 del mundo en el ránking ATP, aún estaba cabizbajo en la rueda de prensa tras haber perdido la final ante Jannik Sinner. Roland Garros, en cuatro meses, será su siguiente oportunidad de poder ganar un Grand Slam.