El Real Madrid de baloncesto sigue moviendo ficha: Procida aterriza en el club blanco tras la salida de Rathan-Mayes

El Real Madrid de baloncesto sigue apuntalando su plantilla de cara a la presente temporada. Después de anunciar el jueves la renovación de Sergio Llull la mañana del viernes ha dejado dos movimientos más en el roster del equipo.

Primero se anunció la salida de Xavier Rathan-Mayes después de tan solo una campaña en el club y luego se hizo oficial la incorporación del italiano Gabriele Procida. Mayes liberó una plaza extracomunitaria y el del ALBA Berlín la ocupó al instante.

Procida, de 23 años y 2,01 m, es uno de los mayores talentos del baloncesto italiano. Formado en Cantù y Fortitudo, despuntó en el ALBA Berlín durante tres campañas de Euroliga, logrando el premio Rising Star en 2023-24.

Sus 9,7 puntos, 3,6 rebotes y un 41,9% en tiros de campo en la última temporada alemana reflejan evolución sostenida. Destaca por una explosividad poco habitual para su talla: ataca el aro con agresividad, corre el contraataque y posee piernas para defender varias posiciones del perímetro.

Su talón de Aquiles sigue siendo la regularidad en el triple, 24-25% de acierto en alta competición, pero los técnicos valoran su mecánica fluida y margen de mejora a medio plazo. La NBA ya le reconoció potencial: fue elegido en la posición 33 del draft 2022, con derechos hoy en Detroit.

Un fichaje para el olvido

La llegada de Procida llega apenas una hora después de anunciar la salida de Xavier Rathan-Mayes, uno de los peores fichajes de los últimos años del club blanco.

Rathan-Mayes aterrizó en Madrid avalado por su capacidad para generarse tiros y jugar tanto de base como de escolta. Sin embargo, la exigencia táctica europea penalizó su necesidad de balón y su irregularidad defensiva.

Tras ser descartado en repetidas convocatorias de Euroliga y ACB, el club buscó una salida que finalmente llegó esta semana. Pese a su discreta aportación, deja un título de Liga Endesa en su palmarés y el reconocimiento público del cuerpo técnico a su profesionalidad.

No cuajó el canadiense que fue perdiendo peso en el equipo con el transcurso de la temporada. De hecho, tan solo tuvo participación en uno de los nueve partidos de playoff de la Liga Endesa. 

Se va promediando 4.7 puntos, 1 rebote y 1.3 asistencias por partido con una media de 12.8 minutos por encuentro. Unas cifras que no están a la altura de lo esperado por él hace apenas un año.