El Real Madrid arrolla al Bayern Múnich y salva el 'match-ball' con el que certifica el pase a los playoffs de la Euroliga

El Real Madrid va a disputar los playoffs de la Euroliga. El partido ante el Bayern Múnich era una final donde estaba en juego estar entre los ocho mejores equipos de Europa y como viene siendo habitual desde 2012, los de Chus Mateo no han fallado a su cita [Narración y estadísticas del partido].

La presión podía ser uno de los factores a tener en cuenta para el Real Madrid puesto que se trataba de un partido a vida o muerte, pero nada más lejos de la realidad. A los jugadores del conjunto madridista no les temblaron las muñecas y ante el Bayern Múnich cuajaron un encuentro soberbio.

A pesar de no haber realizado la mejor fase regular sobre todo después de un inicio de temporada muy irregular, los de Chus Mateo han lanzado un claro mensaje a raíz de la actuación realizada ante el equipo alemán: el Real Madrid sigue siendo un equipo temible y tampoco al Olympiacos le hará gracia enfrentarse al vigente finalista de la competición.

Shabazz Napier presionado por Andrés Feliz y Mario Hezonja. EFE

El conjunto blanco hizo una primera parte sobresaliente que le permitió irse 19 arriba al descanso. El Real Madrid entró al partido más enchufado que el Bayern y los jugadores tuvieron el acierto que por momentos faltó durante la temporada. Los de Gordon Herbert sólo aparecieron en momentos muy excepcionales, pero no llegaron a estar en el partido.

La tónica del partido no cambió tras el paso por los vestuarios. El Real Madrid siguió ofreciendo un recital tanto en ataque como en defensa ante un Bayern que no llegó a competir en ningún momento del partido y que cae estrepitosamente eliminado de la Euroliga.

Inicio soñado

Decía Sun Tzu en su obra El arte de la guerra que "la mejor defensa es un buen ataque" y el Real Madrid lo reflejó en el partido. Chus Mateo partió de inicio con el quinteto formado por Campazzo, Abalde, Hezonja, Deck y Tavares, quienes fueron los responsables de volver loca a la defensa alemana.

La actitud de los jugadores del Real Madrid era la de un equipo conjurado para no fallar en la última oportunidad de estar en los playoffs. Con jugadas rápidas y un gran acierto en el tiro exterior (siete en los diez primeros minutos) el conjunto blanco empezó a poner tierra de por medio ante un Bayern que sólo respondía (tímidamente) por medio de Shabazz Napier.

Por medio de Campazzo y Musa con siete puntos para cada uno, las sensaciones que transmitió el conjunto madridista eran difícilmente mejorables. En el primer cuarto Chus Mateo pudo utilizar a once jugadores y ocho terminaron anotando tras unos diez primeros minutos sublimes (33-17).

El Bayern Múnich trató de inquietar al Real Madrid por medio de la canasta de Niels Giffey, pero el triple de Garuba fue la antesala de lo que estaba por llegar. Los alemanes echaron en falta a Carsen Edwards, la referencia ofensiva y el segundo máximo anotador de la Euroliga con un promedio de 20,4 puntos; lo que provocó que estuvieran desconectados en ataque.

Precisamente el ataque del equipo madridista empezó a atascarse durante seis posesiones consecutivas lo que permitió al Bayern establecer un parcial de 0-7 y obligó a Chus Mateo a detener el partido. A pesar de que el Real Madrid estuviese espeso en ataque, en defensa la intensidad no bajó y los alemanes no gozaron de tiros fáciles.

El mal momento del Madrid apenas duró cuatro minutos porque en cuanto el equipo volvió a mover la pelota de lado a lado con una rápida circulación no tardaron en poner la máxima diferencia en el partido al término del segundo cuarto, 55-33.

Un dominio absoluto

Tras el paso por los vestuarios el tercer cuarto no pudo empezar peor para Gordon Herbert con la tercera falta de Weiler-Babb, recientemente nombrado mejor defensor del año de la Euroliga. El Real Madrid castigó la poca intensidad del Bayern por medio de un Mario Hezonja quien tuvo uno de esos días en los que anota todo y nadie le puede parar.

Los de Chus Mateo noquearon a los alemanes por medio de los triples, sin embargo, el gran partido de Napier -además de las canastas de Voigtmann- provocó que el Bayern ganara el cuarto (21-22), aunque el Real Madrid siguió con 18 puntos de ventaja de cara al último cuarto.

El conjunto blanco estaba a solo diez minutos de certificar la clasificación a los playoffs y a pesar de que los primeros puntos fueron desde el tiro libre por medio de Dzanan Musa y Serge Ibaka, el bosnio metió la primera canasta en juego para el Real Madrid mediante un triple.

Napier, el mejor del Bayern con diferencia, respondió con un triple pero su equipo hizo aguas en defensa. Los alemanes no compitieron en el partido y el conjunto blanco siguió ampliando la diferencia por medio de Ibaka y Musa.

Ficha técnica del partido:

Real Madrid: Campazzo (12), Deck (7), Abalde (13), Hezonja (19), Tavares (10) -cinco inicial-, Musa (16), Feliz (3), Ibaka (7), Llull (-), Garuba (3), Hugo González (3) y Rathan-Mayes (-).

Bayern Múnich: Weiler-Babb (3), Booker (10), Lucic (7), Obst (12), Voigtmann (5) -cinco inicial-, Giffey (5), Napier (19), Kharchenkov (4), Brankovic (4) y Harris (2).

Árbitros: Damir Javor (Eslovenia), Mehdi Difallah (Francia) y Gytis Vilius (Lituania). Sin eliminados.

Incidencias: partido de 'play in' de la Euroliga disputado en el Movistar Arena ante 9.273 espectadores. Antes del comienzo, el exjugador y embajador del Real Madrid de baloncesto, Felipe Reyes, entregó a Walter Tavares el trofeo como el mejor jugador de la Euroliga en los meses de marzo y abril.