El salmón de cultivo frente al salmón salvaje: ¿hay tanta diferencia entre uno y otro?

Una dieta equilibrada debe contener pescado. Según la Fundación Española del Corazón, es un alimento con tantas proteínas como la carne, rico en vitaminas y minerales. Pero, por si fuera poco, algunas variedades son también una importante fuente de omega 3. Es decir, ácidos grasos beneficiosos para la salud cardiovascular. Entre ellas, destaca el salmón.

Así, el consumo de salmón (pescado azul), además de los beneficios para el corazón antes indicados, reduce los niveles de colesterol malo y retarda el proceso de acumulación de placa grasa en las arterias.

Pero es que, además de ser rico en ácidos grasos omega 3, también lo es en proteínas y minerales como hierro, selenio, potasio, fósforo, calcio y magnesio. A todo ello hay que añadir que también es fuente de vitaminas como la B6 y la B12.

¿Cuántos tipos de salmón hay?

Básicamente, dos: el salmón del Atlántico o europeo, que se encuentra en las aguas del Atlántico y del mar Báltico así como en los ríos de Francia, Escocia, Noruega y el norte de España. Y el salmón del Pacífico. Y podemos diferencias entre cinco tipos diferentes.

Uno de ellos es el salmón plateado o coho, que llega a pesar hasta 3,5 kilos y se localiza en la zona Norte del Océano Glacial y en las costas americanas y asiáticas del Pacífico. En Europa se cría en cautividad.

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Otro el salmón rosado o chinook, de unos dos kilos de peso, y se encuentra en zonas costeras del océano Glacial, sobre todo en las costas asiáticas del Pacífico norte y en las costas americanas, así como en el mar Blanco.

Un tercero es el salmón rojo o sockeye, muy consumido. Está en zonas costeras, desde Alaska hasta Oregón. El mayor de todos los salmones del Pacífico es el salmón real o king, ya que llega a pesar hasta 10 kilos, pero es muy escaso. Y, por último, el salmón keta o chum, que se distribuye en zonas costeras del océano Glacial y en la zona norte del Pacífico, tanto en la costa asiática como en la americana. También frente a las costas de Islandia y Noruega.

¿Qué salmón se come en España?

Lo primero que hay que decir que el salmón se cría en piscifactorías de todo el mundo. Después, hay que distinguir entre el salmón salvaje, poco abundante, y el de criadero. Este último sobre todo procede de Noruega, Escocia e Irlanda.

El salmón fresco que se consume en España es salmón atlántico. Sin embargo, los congelados, así como sus derivados (menos el ahumado) suelen ser salmones del Pacífico. El ahumado, si está procesado en España, también es Atlántico o europeo.

¿Qué diferencias hay entre el salvaje y el de cultivo?

Para empezar, el salmón salvaje se captura en océanos, ríos y lagos. Es poco abundante, y su alimentación se basa en otros organismos que se encuentran en su entorno natural como el krill y el camarón. Que coma estos organismos, ricos en astaxantina, hace que el salmón salvaje destaque por un brillante color rojo anaranjado.

Por lo que respecta a la alimentación del salmón de piscifactoría, éste recibe un alimento procesado con alto contenido de grasas y proteínas con el fin de que tengan mayor tamaño. También en su dieta hay suplementos como un pigmento que hace que tenga su color definitivo. Todo ello se traduce en diferencias nutricionales.

Pastel de salmón.

Según un artículo revisado por varios doctores en Medicina y Ciencia como Samuel Davis y Natalia Alvarado, el salmón de piscifactoría "contiene más grasa que el salmón capturado en la naturaleza, del cual una gran parte proviene de los ácidos grasos omega-6. La proporción de omega-3 a omega-6 es mayor en el salmón criado en granjas que en el capturado en la naturaleza. En general, ambos tipos de salmón tienen una proporción sana y equilibrada de omega-3 a omega-6, que es suficiente para aumentar los niveles de omega-3 en la mayoría de las personas".

¿Qué ocurre con los antibióticos?

A pesar de estas diferencias, los especialistas siguen recomendando su consumo, ya que la proporción de ácidos grados en el salmón de piscifactoría sigue siendo buena. Y también conviene reseñar que el precio del salmón salvaje es prohibitivo.

Respecto a los contaminantes, el de piscifactoría tiene concentraciones mucho más altas que el salvaje. Aun así, son tolerables, según este estudio, el cual también subraya que hay muy poca diferencia de los niveles de mercurio entre un salmón y otro.

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Para finalizar, y sobre el contenido en antibióticos, los países productores de salmón en piscifactorías cuentan con marcos regulatorios efectivos. Con todo, y si hubiera que poner en una balanza ambas especies, y responder a la pregunta de cuál es mejor nutricionalmente, sería el salvaje. Económicamente, y para el bolsillo de los ciudadanos, el criado en piscifactorías.