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    Falsos alimentos 'de dieta'

    En la gran mayoría de las ocasiones en las que empezamos una dieta, el objetivo es claro: perder peso corporal. Este objetivo muchas veces se convierte en una obsesión y, en esas ocasiones, terminamos perdiendo la atención sobre si lo que tomamos es saludable o no. Los supermercados están llenos de productos light o 0% que, al final, no son mejores que los alimentos que tomamos día a día en España.

    Temiendo a los hidratos de carbono y a las grasas, las personas que se ponen a régimen vetan muchas veces algunos alimentos tan saludables como las legumbres y los frutos secos. Los últimos estudios científicos han demostrado que estos alimentos no sólo no engordan sino que se han relacionado con un riesgo menor de desarrollar síndrome metabólico, una condición que aumenta las posibilidades de sufrir diabetes o enfermedades cardiovasculares.

    Sin duda, las comidas entre horas son las que suponen un mayor problema a la hora tener éxito en la pérdida de peso. Precisamente, muchos de los productos light están enfocados a este momento, pero no siempre son saludables. Un ejemplo muy popular son las tortitas de arroz que, tal y como se explica en este artículo de EL ESPAÑOL, no son tan saludables como quieren hacernos creer. Pero entonces, ¿qué tomamos?

    A continuación, cuatro alimentos saludables de toda la vida y que pueden tomarse como snack.
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    Los garbanzos

    Al pensar en legumbres, es posible que te venga a la cabeza un guiso caliente servido en plato hondo y en cuya superficie se mantiene a flote un grueso trozo de morcilla o de chorizo. Esta no es una opción muy atractiva para una comida entre horas, pero por suerte en los últimos años se han incluido a las legumbres en otros tipos de elaboraciones: ensaladas frías o, incluso, aperitivos.

    En los últimos años se ha popularizado el hummus, una pasta que se hace con garbanzos y que se suele mojar con palitos de verduras crudas como zanahorias y pepinos. Se puede preparar un cuenco y guardar en la nevera para cuando tengamos hambre, pero queramos mantener una dieta saludable. Los garbanzos son fuente de proteínas vegetales y fibra, además de aportar minerales y algunas vitaminas.
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    La crema de cacahuete

    Hasta hace relativamente poco tiempo, la crema de cacahuete era conocida por ser una delicia extremadamente dulce que conocíamos por las películas de Estados Unidos. Esa peanut butter a la que nos referimos no es un producto nada saludable: contiene otras grasas vegetales menos beneficiosas que las del propio cacahuete y una buena cantidad de azúcar para endulzarla.

    Sin embargo, esta pasta ha adquirido una nueva fama y se ha popularizado también en España. Ahora la crema de cacahuete la toman, incluso, las personas que realizan una alta actividad física. Eso sí, sólo escogen la crema de cacahuetes que no tienen más ingredientes que este fruto seco. El chef Juan Llorca, de hecho, contó a EL ESPAÑOL en esta entrevista que el bocadillo de crema de cacahuete es más saludable que el de jamón.
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    Los huevos duros

    España es un país todavía muy conservador en lo que al comer se refiere. A pesar de que muchos nutricionistas han predicado los beneficios de desayunar sardinas o de cenar legumbres, nosotros no queremos saber nada de estas innovaciones. En este sentido, los huevos son un alimento muy saludable, pero que asociamos rápidamente con las comidas principales del día.

    Sin embargo, también son una buena opción para comer entre horas aunque no lo creamos, siempre que estén cocidos y no fritos. Si te parece extraño o, incluso, comerte un huevo duro a la hora de la merienda, debes saber que es uno de los tentempiés favoritos de las celebrities: Cristina Pedroche y Jennifer Aniston han confesado llevar en su bolso un par de huevos cocidos para cuando les entra el hambre.
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    Los pepinillos

    La hora de la caña de cerveza con su cuenco de quicos, de patatas fritas o de aceitunas es uno de los momentos que más se echan de menos cuando nos ponemos a dieta. Ahora bien, no todos estos alimentos son malos: las aceitunas, por ejemplo, no engordan si no tomamos más de un puñado al día y aportan grasas cardiosaludables y sustancias con efectos antioxidantes. El problema aparece cuando nos pasamos de cantidad.

    En este sentido, los encurtidos son una opción saludable para cuando queremos picar entre horas. Tienen mucho sabor y muy pocas calorías: concretamente, los pepinillos sólamente acumulan 12 kilocalorías en cada 100 gramos que consumimos. Por tanto, si estamos a dieta no es necesario renunciar al aperitivo con amigos: podemos tomar encurtidos y evitar los refrescos y las bebidas alcohólicas pidiendo, por ejemplo, agua con gas.
J. R. R.