Multitud de despedidas en el último pleno de esta legislatura en la Diputación de León antes de la llegada del PSOE al poder en la sesión que tendrá lugar este viernes tras 24 años del PP al frente de la institución provincial.

El adiós más destacado ha sido el del hasta ahora presidente de la Diputación de León, Juan Martínez Majo, que ha agradecido estos cuatro años y ha adelantado que será "un diputado más" a partir del 19 de julio.

En este sentido, Martínez Majo se ha mostrado "muy satisfecho" por la multitud de acuerdos alcanzados en esta legislatura y ha recordado que el 99 por ciento de ellos se han llevado a cabo "por consenso" en la Junta de Portavoces.

Sin embargo, también ha recordado que "quedan asuntos inacabados", pero ha incidido que en su objetivo siempre ha estado "dejar todo solucionado y cerrado" con el propósito de que "no haya ningún problema en el futuro".

El hasta ahora presidente de la institución también ha deseado "el mayor de los éxitos" a su sucesor y ha reconocido que, en lo personal, tomará la decisión de seguir o no "de forma pausada, tranquila y muy relajada".

El que no seguirá es Pedro Muñoz, diputado de Coalición por el Bierzo, y que no ha conseguido mantener la representación en la institución provincial después de ser el primer edil bercianista en la Diputación de León.

Muñoz ha reclamado en su intervención que hay que entender a la comarca de El Bierzo como "una parte de la provincia" y ha reconocido que tras estos cuatro años puede afirmar que las diputaciones "son necesarias".

Tampoco estarán en el Palacio de los Guzmanes la Coalición en Común que, en palabras de su diputado, Miguel Flecha, ha querido mostrarse "orgulloso" tras una etapa en la que espera haber aportado "algo a la institución y a la provincia".

Por último, el exdiputado de Ciudadanos, Juan Carlos Fernández, no repetirá por la formación naranja que ya ha anunciado a Gemma Villarroel como sucesora después de estos cuatro años de legislatura.

Fernández ha incidido que entró con la idea de que las diputaciones "deberían desaparecer" y ahora se marcha con la convicción de que "valen mucho" y en provincias como la de León "son muy necesarias".