Todo es verdad ha arrancado este martes en el prime time de Cuatro. El programa de investigación presentado por Risto Mejide y Marta Flich, que iba a dedicar su estreno a desmontar las pseudociencias, cambió por completo sus contenidos al conocerse la detención del productor televisivo José Luis Moreno, una improviscaión que les ha llevado a contar con un testimonio que vierte duras acusaciones contra Moreno sin pruebas.

En concreto, el programa pudo hablar con un "chico de confianza" del testaferro del productor, según explicaba Flich. El hombre, que ha querido mantenerse en el anonimato, atendió al equipo de Todo es verdad en un edificio abandonado de Madrid la misma tarde del estreno.

La falta de tiempo impidió al equipo investigar para contrastar las declaraciones del confidente, pero aún así han decidido emitirlas y convertirlas en uno de los contenidos más destacados de la primera entrega. "No podemos dar el 100% de veracidad, pero lo hemos considerado relevante al coincidir con detalles que las autoridades nos están trasladando sobre esta operación", se ha limitado a advertir Risto.

El hombre asegura haber estado "en varias reuniones en las que José Luis Moreno llegaba a acuerdos monetarios y transacciones importantes con su testaferro, Miguel". Según su relato, el famoso ventrílocuo se puso en contacto con Miguel porque "necesitaba una inyección de dinero para sacar adelante producciones de televisión".

El confidente no ha dudado en asegurar que el dinero que movía Moreno provenía "del mercadeo de droga", y afirma que la relación entre el productor y su testaferro "se termina cuando Miguel entra en prisión, porque responsabiliza a Moreno de haberlo hundido".

Según este testimonio anónimo, el productor debe dinero a los narcotraficantes. "Eso le ocasionó que estuviera en la lista para desaparecer, para matarlo. (…) Sé que lo querían hacer desaparecer por las deudas que tiene y porque es una persona que se ríe en tu cara y te dice que no te va a pagar".

"La última vez lo iban a detener para que pagara lo que debía o para matarlo literalmente", ha añadido refiriéndose al último atraco que sufrió José Luis Moreno en su casa. Además, el productor podría haber sido traicionado por su testaferro: "Miguel decía tener buenas relaciones y estar bien informado por miembros de la Guardia Civil, era su manera de defenderse (…) Según cuenta él, llegó a un acuerdo con la Guardia Civil para que le dieran beneficios a cambio de que él proporcionara información para tumbar el entramado".