Con fecha del pasado viernes 8 de julio, 23 días después, la gerente del Hospital Universitario de Torrevieja, Pilar Santos, ha respondido al comité de empresa del departamento de salud negando las acusaciones vertidas por una dirigente local del PSOE en televisión acusando a los médicos de boicotear la asistencia sanitaria.

Como ha venido informando este diario, Ghersi afirmó en un debate-tertulia que "hay cierto boicot desde dentro por médicos que les están prometiendo cargos y puestos". "Es muy grave y por suerte ahora pueden hablar, porque hasta ahora no podían hablar", añadió.

La representante local de Comunicación del partido socialista llegó a decir que: "Lo sabe la dirección del hospital, lo sabe la dirección anterior del hospital, del grupo Ribera". También aseguró que "se han abierto expedientes. Los que son, se sabe". 

Ahora la gerente niega todo conocimiento sobre el asunto: "Esta Gerencia no asume ninguna de las afirmaciones que se están vertiendo en medios de comunicación en contra de los facultativos del Servicio de Urgencias o de cualquier otro trabajador incluida esta dirección".

Santos añade en su escueta respuesta al Comité de Empresa que le exigió hace más de 20 días salir al paso de las acusaciones que que lo hace en nombre de "la Plantilla del Departamento, a la que represento, y por los que el Comité de Empresa y la Junta de Personal tienen la responsabilidad de velar, defender los derechos como trabajadores y rechazar de la misma forma cualquier declaración que menosprecie su trabajo".

La propia dirigente local se disculpó públicamente de sus palabras tras el escándalo cuando trascendieron sus declaraciones acusando al exdiputado nacional del PP de haberle presionado en el debate televisivo.

[La dirigente del PSOE de Torrevieja que acusó a los médicos de boicotear la atención se disculpa]

Ghersi dijo en sus disculpas sentirse "abrumada" y aseguró que "en todo momento me estoy refiriendo a comentarios que a mí me trasladan vecinos o que puedo recabar de redes sociales". Nada que ver con sus declaraciones iniciales en las que aseguró que se sabía "quienes eran" y que se les había "abierto expedientes".

Pero lo hacía después del anuncio de una querella del Sindicato Médico de la Comunidad Valenciana (CESM) ante los tribunales. Y es que consideraban que estas acusaciones son "difamatorias e injustas", e "inciden en menospreciar el trabajo de los facultativos y pueden ser objeto de animadversión o agresiones por parte de usuarios que no reciban atención en tiempo adecuado por la incompetencia y falta de diligencia de los cargos directivos del departamento".

También el PP, a través de su diputado en las Cortes Valencianas, José Juan Zaplana ha presentado una batería de preguntas a Sanidad sobre las acusaciones:"¿Es cierto que la dirección del hospital de Torrevieja conocía la existencia de este boicot? ¿Desde cuándo? ¿Qué medidas se han tomado? ¿Se han puesto estos hechos en conocimiento de la Conselleria de Sanidad? ¿En qué fecha? ¿Ha tomado alguna medida al respecto la Conselleria?", preguntó.