El caso de Marina aún no tiene resolución.
Una madre latina es separada de su familia durante una cita de migración: “Traigan a mi mamá de regreso”
Marina fue enviada a un centro de detención en Kentucky donde su caso permanece
Más información: Sentenciado un exguardia por esta acción que “benefició” a inmigrantes: “Logramos desenmascarar su plan”
La vida de Marina y su familia cambió abruptamente luego de una cita con autoridades migratorias en Chicago. La mujer, madre de tres hijos y residente en Estados Unidos desde hace varios años, fue detenida por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) y enviada a un centro de detención en Kentucky. Su caso ha despertado preocupación y empatía, pues deja atrás una familia unida, afectada emocional y económicamente por esta separación forzada.
Detenida tras acudir a una cita migratoria
El pasado 4 de junio, Marina asistió a una cita con autoridades migratorias en Chicago como parte de un proceso que esperaba regularizar su situación legal. Sin embargo, en lugar de obtener avances, fue arrestada y trasladada fuera del estado.
De acuerdo con lo declarado por su esposo, José, al medio Telemundo Chicago, Marina fue notificada por parte de las autoridades migratorias. Sin embargo, nunca se imaginó que sería arrestada ese día. Según José, Marina le escribió “Cuídese mucho, ya estoy en el grupo de deportaciones”.
Desde entonces, permanece recluida en un centro de detención en Kentucky sin fecha clara de liberación.
Esta acción ha dejado a su esposo José a cargo de sus tres hijos: Ruddy, de 13 años; Aaron; y la pequeña Sofía, de 5. La familia asegura que no recibió advertencias previas sobre la posible detención, y ahora enfrentan incertidumbre legal, emocional y económica mientras esperan una resolución para que Marina pueda volver a casa.
“Me siento muy vacío”: la familia narra el impacto
La separación ha sido devastadora para sus hijos. En entrevista con Telemundo Chicago, Ruddy relató con voz entrecortada cómo ha vivido los días sin su madre. “Me siento muy vacío… estoy acostumbrado a despertarme y ver a mi mamá. No he dormido estas noches por pensar en ella”, declaró.
Por su parte, su hermano Aaron expresó que la casa se siente triste y silenciosa, mientras que la pequeña Sofía simplemente ruega: “Traigan a mi mamá de regreso, la necesito mucho”.
José, esposo de Marina, ha intentado mantener la estabilidad del hogar mientras trabaja y cuida a sus hijos. Señala que las llamadas con Marina son limitadas y que la familia entera vive en constante ansiedad. “No sabemos qué hacer. Mis hijos preguntan por su mamá todos los días. Esto no debería pasarle a ninguna familia que lucha por salir adelante”, dijo también ante Telemundo.
En su misma declaración, José hizo un llamado al presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, para “permitir” que su esposa y su familia pueda mantenerse en el país: “Le pido por favor a él que deje a nuestra familia estar aquí”.
La incertidumbre de miles de familias inmigrantes
El caso de Marina representa a miles de familias latinas en Estados Unidos que viven bajo la amenaza de la separación familiar. Aunque cumplen con las normas y procesos establecidos, muchos se enfrentan a un sistema migratorio que puede volverse impredecible.