Expertos en inmigración alertan que la medida impide iniciar procesos legales de protección.

Expertos en inmigración alertan que la medida impide iniciar procesos legales de protección. Grok

Estados Unidos

EE.UU. avanza con las “deportaciones exprés”: migrantes serían avisados con 6 horas de antelación

El ICE podrá expulsar a migrantes hacia terceros países con pocas horas de aviso y sin garantías de seguridad.

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Carlos Dileo
Publicada

El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) quiere implementar una nueva modalidad de deportación que despertó gran preocupación entre organizaciones defensoras de los derechos humanos. A partir de ahora, los migrantes podrán ser expulsados de Estados Unidos hacia terceros países sin la necesidad de que esos destinos garanticen su seguridad y con pocas horas de aviso previo.

Una política avalada por el Tribunal Supremo

Según lo detalló Todd M. Lyons, director interino del ICE, en un memorando, dirigido a funcionarios de la agencia y publicado por The Washington Post, los migrantes que sean deportados bajo esta modalidad podrán recibir notificaciones de expulsión con tan solo seis horas de antelación, especialmente en casos que la agencia califique como “exigentes”. La nueva política considera incluso escenarios en los que no se les informaría en absoluto, si el país receptor es considerado “seguro” por el Departamento de Estado.

El impulso a esta medida proviene de un reciente fallo de la Corte Suprema de Estados Unidos, que suspendió una orden emitida en marzo por el juez federal Brian Murphy, del Distrito de Massachusetts. Esa orden impedía las deportaciones a países distintos al de origen sin previo aviso ni evaluación del miedo creíble. Con la revocación de la medida, se habilitó al ICE a actuar sin la obligación de informar con antelación ni garantizar una vía legal mínima para los afectados.

Este cambio legal tuvo un impacto inmediato en el caso de ocho migrantes retenidos en una base militar en Yibuti. Gracias a la decisión judicial, el gobierno estadounidense pudo continuar con su plan de enviarlos a Sudán del Sur, un país sumido en una crisis humanitaria extrema, sin considerar el riesgo real de violencia y persecución que podrían enfrentar al llegar.

Deportaciones sin lazos familiares ni culturales

Las deportaciones a terceros países no solo eliminan el vínculo con el país de origen, sino también cualquier nexo cultural, familiar o lingüístico que pudiera facilitar la adaptación del migrante. Desde ICE se indicó que las personas que manifiesten temor podrían ser evaluadas para determinar si califican para protección. Sin embargo, expertos en inmigración alertan que con un margen tan estrecho de notificación, es casi imposible activar cualquier defensa legal eficaz.

En palabras de Kristi Noem, secretaria de Seguridad Nacional, esta estrategia “no es nueva”, sino una reactivación de mecanismos anteriores que permitían transferencias a países que aceptaran acoger a migrantes temporalmente. Noem defendió el memorando de Lyons como una herramienta “crucial para expulsar a delincuentes del país”, pese a que las cifras muestran que estas medidas han afectado también a personas sin antecedentes penales.

Aunque esta modalidad de expulsión fue aplicada en pocas ocasiones, los antecedentes generaron fuertes críticas. En marzo pasado, más de 250 venezolanos fueron trasladados a una prisión de máxima seguridad en El Salvador, donde permanecen hasta la actualidad. También se registraron vuelos con migrantes de Asia, África y Europa del Este que fueron enviados a países como Costa Rica y Panamá.

Mientras tanto, México recibió a miles de extranjeros deportados desde Estados Unidos, como parte de acuerdos bilaterales que evitan el regreso inmediato a sus países de origen. Con las nuevas directrices del ICE, todo indica que estas "deportaciones exprés" se volverán mucho más frecuentes y sistemáticas.