Imagen generada por IA de una fábrica de hielo.

Imagen generada por IA de una fábrica de hielo. Gemini

Sociedad

El dueño de un negocio de hielo, sobre su empresa: "Puedo vender hasta 4 millones de bolsas, cada una 50% rentable"

El empresario reveló el nivel y cantidad de venta de su negocio de hielo en cantidades industriales así como su rentabilidad.

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Si hay un elemento clave en la hostelería en el día a día es el hielo, especialmente en verano. Este producto no puede faltar a la hora de consumir tu bebida favorita y por ello es totalmente imprescindible en cualquier período del año.

Sin embargo, aunque parezca un producto fácil de producir y distribuir, al fin y al cabo no es más que agua congelada, lo cierto es que es todo un negocio con gran rentabilidad y un extenso proceso para que pase de las fábricas al vaso del bar.

Así, ¿quién mejor para contarlo que un empresario del negocio del hielo? El elegido ha sido El dueño de una empresa productora de hielo que ha contado en el canal de YouTube de Adrian G. Martín, cómo funciona su negocio.

Una industria que congela

Durante años, el hielo fue considerado un producto secundario, reservado para los meses de calor y las terrazas veraniegas.

Sin embargo, en la última década, este cubito se ha convertido en un negocio con identidad propia, capaz de mover millones de euros cada temporada y de generar auténticas guerras logísticas cuando la demanda se dispara.

En España, donde el turismo, la hostelería y las altas temperaturas se combinan en un cóctel perfecto, la industria del hielo ha pasado de ser artesanal a altamente tecnificada y competitiva, con empresas que producen y distribuyen toneladas diarias para abastecer supermercados, bares, gasolineras y chiringuitos.

La reciente escasez de hielo vivida durante los veranos más calurosos evidenció la dependencia del país de este producto aparentemente simple y puso de relieve la necesidad de una planificación más eficiente.

Hoy, el negocio del hielo no solo refleja la evolución del consumo en España, sino también el desafío de equilibrar producción, sostenibilidad y precio en un mercado cada vez más exigente.

De ese modo, un empresario hace años decidió emprender con una fábrica de hielo, viendo el futuro prometedor que tenía este negocio y confiando en él.

"Hicimos una inversión inicial de unos 50.000 €, como pudimos. Mi padre tenía una casa, me firmaron un préstamo y ahí empezamos. Fue bien, la verdad, no fue mal y fuimos creciendo poco a poco y poner más maquinitas de estas", rememoraba el emprendedor.

Actualmente el empresario tiene una plantilla de 20 trabajadores contando con oficina, distribución y producción. Esto se debe a que el proceso está en gran medida automatizado, cortando costes de personal y de forma eficiente.

"El agua viene de la red, pasa estas sombosis y esto depura el agua y la deja totalmente neutra", señalaba el empresario. "A partir de aquí pasa a los tanques donde se depura el agua y pasa a las máquinas y a partir de ahí por las bombas pasa a las máquinas".

Todo esto hace que el agua se convierta en cubos de hielo duros, resistentes y efectivos para refrescar tu bebida. Esta producción crece por mucho en verano: "En el mes de julio hemos vendido alrededor de unas tres o cuatro millones de bolsitas".

Al final, la empresa puede alcanzar un coste directo de unos 30 céntimos por bolsa. "Si le metes costes indirectos, ronda los 40 céntimos más o menos. 40 céntimos es el coste de producción", señalaba el dueño del negocio.

Pero, ahora la pregunta del millón: ¿es rentable o no? "La rentabilidad está más o menos en un 50% sobre coste del precio de ventas, un 50%. Son grandes los márgenes, lo que pasa que luego está el coste de la distribución y demás", afirmaba el empresario.

De hecho, el emprendedor contaba cómo saca mayor ganancia de la venta al por menor, es decir, a bares, hoteles o gente que organiza fiestas. "Una bolsita tiene un costo de unos 80 céntimos para el consumidor. Entre 80 céntimos y 1 euro en el supermercado", indicaba.

Además, el empresario mencionaba su objetivo a futuro con la empresa: "Automatizar aún un poco más si puede ser el tema de cargas y descargas, que ahí sí que veo que se pierde muchos recursos. Y a ver si la IA nos ayuda un poco a hacer algunas cosas de estas".