El secreto de la cerveza verde: apostar por circularidad y la responsabilidad ambiental

El secreto de la cerveza verde: apostar por circularidad y la responsabilidad ambiental

En colaboración con:

Sociedad

La cervecera que apuesta decididamente por la circularidad

HEINEKEN España trabaja para maximizar la circularidad en toda su cadena de valor, del campo al consumidor (producción, distribución y consumo).

11 enero, 2023 02:56

Reducir emisiones y minimizar los residuos se han convertido en tarea esencial en la agenda de muchas empresas. Con el objetivo de alinearse con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas, cada vez más organizaciones incorporan la economía circular en sus procesos de producción.

Una de ellas es la cervecera HEINEKEN España, que lleva más de dos décadas trabajando por la sostenibilidad en toda su cadena de valor, del campo al consumidor. De hecho, tal es su compromiso que ha elaborado una hoja de ruta denominada ‘Decididamente verdes’, en la que se plasman los compromisos de la empresa a 2025, que tienen como fin alcanzar un impacto cero en huella de carbono, agua y residuos, además de lograr un impacto positivo en la comunidad.

Además de reducir emisiones en toda su cadena de valor, HEINEKEN España tiene también la ambición de maximizar la circularidad en toda su cadena. Así, en el área de producción, sus fábricas de Jaén y Sevilla ya cuentan con la certificación “0 residuos a vertedero”, que próximamente obtendrán las de Madrid y Valencia. Y la compañía ya tiene el 95% de residuos convertidos en recursos y ha podido reintroducir 200.000 toneladas de subproductos derivados de la elaboración de cerveza en otras industrias (el 100%): levadura, bagazo y mezclas hidroalcohólicas se han convertido en abono para el campo, pienso para el ganado y vinagre de cerveza. 

Fábrica de Jaén

Fábrica de Jaén

Trabajar para eliminar 1.600 toneladas de plástico al año

En materia de envases, HEINEKEN España trabaja para eliminar 1.600 toneladas de plástico al año con la intención de reducir tanto las emisiones como la generación de residuos. Para ello, la cervecera quiere conseguir que todos sus envases estén hechos con materiales 100% reciclados y que, además, procedan de fuentes sostenibles, como todo el cartón que utiliza, que proviene de bosques gestionados de forma responsable para evitar la deforestación.

De esta forma, la cervecera busca eliminar un total de 1.300 toneladas de plástico de un solo uso al año y otras 300 toneladas de anillas de plástico, sustituyéndolas por unas de cartón reciclado. De hecho, HEINEKEN España ha invertido siete millones de euros en este proyecto ya implantado en sus fábricas de Valencia y Sevilla y con el que se eliminará de la producción un total de 50 millones de anillas.

En este contexto, cabe destacar también la importancia de maximizar el uso de productos retornables en el sector de la hostelería (y pasar del 74% actual al 81% en 2025), además de seguir apostando por el reciclado de botellas y latas en colaboración con asociaciones como Ecovidrio, entidad especializada en la recogida de envases de vidrio, y Ecoembes, organización dedicada al reciclaje y rediseño de envases domésticos ligeros.

El agua, esencial para la vida y la cerveza

Dentro de su hoja de ruta ‘Decididamente verdes’, HEINEKEN España no pierde de vista un recurso esencial en su producción y en la vida: el agua. Considerando que el agua es limitada y que representa el 95% de la cerveza y el 100% de la vida, la cervecera trabaja en maximizar su circularidad y reutilización. Un ejemplo de ello son sus proyectos en Doñana, la Albufera valenciana o la ribera del río Jarama, y continuar devolviendo a las cuencas de origen toda el agua que contiene sus cervezas, más de 1.900 millones de litros de agua al año. Todo ello sin olvidar los procesos de regeneración y maximización del agua que usan en sus procesos auxiliares de elaboración.

Con la ambición de usar cada vez menos agua y ser más eficientes, para 2025 HEINEKEN España aspira a utilizar solo 2,6 litros de agua por litro de cerveza elaborado, es decir, menos de la mitad (-51%) del agua utilizada en 2008. Un camino en el que ya ha avanzado mucho en los últimos años, logrando reducir un 33% su consumo desde 2008.