Arriba en el centro, los gemelos Carlos y Daniel Ramos. A los lados, dos escenas violentas de 'La Casa de los Gemelos 2', y, abajo, La Falate, una concursante.

Arriba en el centro, los gemelos Carlos y Daniel Ramos. A los lados, dos escenas violentas de 'La Casa de los Gemelos 2', y, abajo, La Falate, una concursante. E.E.

Reportajes

Palizas, sexo y vejaciones sin pausa y en directo durante días en 'La Casa de los Gemelos 2': el 'reality gore' que siguen millones

Tras 8 días, se han visto todo tipo de excesos en esta emisión de Carlos y Daniel Ramos. En Francia, un programa similar le costó la vida a un hombre.

Más información: Desmontando las audiencias de 'La casa de los gemelos 2', el loco reality de YouTube que sería impensable en televisión

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La Casa de los Gemelos 2 es ya un fenómeno viral. En poco más de una semana, este reality gore retransmitido en streaming cuenta con millones de visualizaciones. Creado por los polémicos gemelos Carlos y Daniel Ramos, este programa ha reunido a un elenco de 12 personajes televisivos para convivir dentro de una nave industrial y pelear por un premio de 100.000 euros si aguantan hasta fin de año.

Presentado por Kiko Hernández, se trata de una suerte de Gran Hermano, pero rompiendo todos los límites de lo que es éticamente aceptable. Los concursantes, bajo la supervisión de Coto Matamoros y Víctor Sandoval, no sólo conviven, sino que se pegan, se agreden, se insultan, se escupen o tienen sexo… 24 horas al día; 7 días a la semana. Nunca se para de emitir este contenido violento en directo. No cesa y cada minuto que pasa tiene más seguidores.

La Casa de los Gemelos es un reality que tenía todo en su mano para aprovechar las ventajas de Internet y ofrecer un producto realmente atractivo para los jóvenes. En su lugar, ha apostado por recurrir a las prácticas más degradantes de la televisión de los 90, algo que no se podría emitir hoy en día en ninguna plataforma ni empresa regulada, en un 'todo vale' por la notoriedad”, valora a EL ESPAÑOL Laura Pérez, analista de televisión y directora de verTele.

@zonagemelosclipses La Falete rompe el secador de nissy para pegar a marrash#elshowdelosgemelos #zonagemelos #lacasadelosgemelos #lacasadelosgemelos2 #falete ♬ sonido original - ZonaGemelosClips

Así, personajes como La Falete, una mujer con gran parecido con la cantante conocida por los usuarios de redes sociales por sus vídeos virales, o La Marrash, un personaje de redes que se popularizó en programas de televisión y muchos medios después de contar su historia en Dubái, aparecen en escena llamándose de todo. Golpeándose. Tirándose secadores de pelo… Todo con un público entregado, con 700.000 usuarios online concurrentes comentando, celebrando y riendo esta oda a la violencia.

Este tipo de contenidos, no obstante, no son aislados y están creciendo en número de consumidores. El pasado verano, Simón Pérez, el gurú de las hipotecas, tuvo profundos problemas de salud por drogarse en directo mendigando dinero de los usuarios. Estos le pagaban y él se metía, como poco, ketamina. En Francia, Raphaël Graven, un influencer conocido como Jean Pormanove, se dejó torturar en directo por “sus amigos” hasta la muerte.

Son formatos que muestran lo más turbio de la sociedad, pero que han encontrado una audiencia grande y falta de regulación para limitarlos. “La única manera de frenarlos es con una regulación de Internet por parte de los Gobiernos, que pongan unos límites en el streaming y nuevas plataformas como los hay en las cadenas de televisión”, sentencia Pérez.

Potenciales delitos de odio

Tras una semana, en La Casa de los Gemelos 2 ya se ha enaltecido el nazismo o se ha defendido la homofobia calificando a las personas LGTBI como “raros”, siendo los concursantes los “normales”. Muchos de ellos, por cierto, son famosillos salidos de programas como Gran Hermano –Bea, La Legionaria– o Gandía Shore o Mujeres y hombres y viceversaJosé Labrador, el que hizo el saludo romano en directo–.

Es decir, son personajes de televisión reciclados que ahora aceptan una convivencia tóxica plagada de violencia y de potenciales delitos de odio. Todo por 100.000 euros.

La primera edición de La Casa de los Gemelos, de hecho, fue cancelada el pasado mes de octubre tras haber pasado sólo nueve horas desde su inicio por las situaciones violentas que se produjeron. La Falete y La Marrash –que ahora repiten– iniciaron una pelea a los 25 minutos de emisión y eso fue escalando hasta afectar a todos los concursantes.

Los gemelos Carlos y Daniel Ramos.

Los gemelos Carlos y Daniel Ramos.

Los creadores del formato, los gemelos Daniel y Carlos Ramos, dos populares hermanos de Getafe que reúnen a millones de seguidores con su cuenta ZonaGemelos, cancelaron la emisión por no poder garantizar la seguridad de los concursantes tras una noche de alcohol y peleas.

“Esto es un puto caos, es la casa de los horrores. Está la casa destrozada. Hay comentarios muy fuertes que no se pueden permitir. Se ha ido todo de madre y vamos a cortar la emisión aquí. Más adelante, anunciaremos una segunda edición con unas normas de convivencia básicas y unas horas para dormir. Esto se ha descontrolado y van a ser todo el rato peleas hasta que pase algo grave”, dijo entonces Daniel Ramos.

Esa segunda edición ha llegado, pero poco ha cambiado. Hay más seguridad y orden, sí, pero la violencia online no cesa. Y es un tipo de contenido que está creciendo, compitiendo y desbancando –en algunos casos– a la televisión tradicional.

Un escena violenta de 'La Casa de los Gemelos 2'.

Un escena violenta de 'La Casa de los Gemelos 2'.

“En los últimos tiempos existe un desencanto generalizado con los realities de Telecinco, ya que no han evolucionado conforme a los intereses del público y siguen estancados en la fórmula que les llevó al éxito hace 20 años. Con este clima, y una bajada de audiencias propia fruto del desgaste de los programas televisivos, parece que los realities de Internet han encontrado un nicho que les permite hacer mucho ruido en redes sociales, pero que realmente no es el grueso de espectadores que se asoman actualmente a la televisión sino un grupo joven que no encuentra reclamos para ver la televisión actual”, añade la analista televisiva consultada.

Ahogado en drogas

Lo grave del asunto es que se observa un cambio en los hábitos de consumo televisivo. Los jóvenes, como sostiene la analista, acuden a nuevos tipos de programas en busca de entretenimiento. Triunfan los formatos de streaming en los que aparecen personas que se autodestruyen, se drogan, o permiten vejaciones por dinero.

Ese fue el caso de Simón Pérez y su pareja, Silvia Charro, dos ex gurús de las hipotecas. El pasado verano entraron en una peligrosa espiral de autodestrucción inundada por drogas, como explicó EL ESPAÑOL. Hacían directos en Rumble y Kick, donde se veía a Pérez balbuceando cosas sin sentido.

Simón Pérez consumiendo drogas durante uno de sus directos.

Simón Pérez consumiendo drogas durante uno de sus directos.

Durante sus directos se drogaba. Se humillaba a cambio de dinero. Algunas veces ofrecía consejos sobre inversiones, su gran especialidad del pasado, o criptomonedas; otras, simplemente, se quedaba dormido frente a la cámara, exhausto, completamente ido por el efecto de la ketamina, la cocaína y la marihuana, babeando sobre su propio pecho.

Ha estado a punto de morir por tales excesos y ahora es un mendigo digital que, de momento, no ha vuelto a dar señales de vida. Pero la podredumbre de los contenidos alcanzó fama debido a que hay usuarios que ven esos programas con gracia. Y pagan.

Hasta la muerte

El caso más bizarro de todos los ocurridos, no obstante, es el del francés Raphaël Graven, conocido en internet como Jean Pormanove o JP. Era un exmilitar y streamer de 46 años que murió en directo el 18 de agosto de 2025 durante una transmisión en la plataforma Kick que llevaba casi 300 horas activa –12 días ininterrumpidos–.

Su muerte, ocurrida en una residencia alquilada en Contes, cerca de Niza, conmocionó a Francia y reabrió el debate internacional sobre los límites del contenido en Internet y la responsabilidad de las plataformas de streaming.

Graven había comenzado su trayectoria hace cinco años retransmitiendo partidas de videojuegos como Fortnite y Call of Duty, pero su propuesta derivó hacia retos extremos y violentos donde a menudo acababa golpeado por “sus amigos” como parte del espectáculo.

En sus últimos meses de vida, se había convertido en una figura conocida por sufrir humillaciones, palizas, ahogamientos, descargas eléctricas y maltrato psicológico en directo por parte de otros streamers mientras miles de espectadores observaban el directo.​

Momento en el que JP yacía muerto en la cama.

Momento en el que JP yacía muerto en la cama.

El último desafío que Pormanove usó antes de su muerte se llamaba 10 Días y Noches de Tortura, basado en pruebas de resistencia física, privación del sueño y consumo de sustancias supuestamente tóxicas. Durante esta transmisión otros streamers le infligían golpes, lo insultaban, lo ahogaban, le disparaban con paintball, lo cubrían con pintura y aceite, y lo sometían a humillaciones constantes.

Recaudaron aproximadamente 36.000 euros durante la emisión completa, con un contador visible que mostraba las donaciones que recibían mientras maltrataban a Pormanove. Un vídeo difundido de la transmisión mostró al streamer inmóvil sobre un colchón mientras otras personas intentaban despertarlo, con uno de ellos lanzándole una botella de agua antes de que la emisión se cortase bruscamente. En el momento de su muerte, había 10.000 espectadores conectados en la plataforma Kick presenciando la escena.​

El debate sobre la proliferación de los formatos con violencia en directo sigue más vivo que nunca. A un hombre ya le costó la vida y, mientras tanto, siguen naciendo nuevos contenidos violentos por doquier. El último de ellos, La Casa de los Gemelos 2, que en los momentos más bajos de emisión cuenta con cerca de 200.000 usuarios conectados. De ahí hasta superar el millón de espectadores viendo como un grupo de personas se pega, se insulta y se escupe. Todo por 100.000 euros.