Ferrol avanza hacia el saneamiento y depuración del agua en su entorno rural

El Consello da Xunta ha autorizado este lunes la licitación de las obras correspondientes a la primera parte de la fase 1 del plan de mejora del saneamiento y la depuración de aguas en la zona rural de Ferrol.

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La actuación supondrá una inversión de más de 5,7 millones de euros, de los cuales el Gobierno autonómico aportará el 70 % y el ayuntamiento el 30 % restante.

Las actuaciones previstas en el proyecto, diseñado en el marco del convenio —y cofinanciado por la Unión Europea a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder), dentro del programa Galicia Feder 2021-2027—, tienen como objetivo mejorar la red de tratamiento de aguas residuales en diferentes núcleos rurales de las parroquias de Brión, Covas, Doniños, Esmelle, A Cabana y A Graña.

Esto se produce después de que prácticamente el 100 % de la población urbana de Ferrol ya esté conectada a los sistemas de saneamiento y depuración existentes en la ciudad. El resto de las zonas rurales del municipio quedará para la segunda parte de la fase 1 y para la fase 2 del plan, cuyos trabajos concretos aún están por definir.

Este contrato se enmarca en el protocolo de colaboración firmado el año pasado entre la Xunta y el Gobierno local de Ferrol, con el objetivo de conectar a toda la población rural a la red municipal en el menor plazo posible, lo que permitirá ofrecer servicios eficaces y sostenibles que contribuirán a mejorar la situación medioambiental del entorno.

Las actuaciones previstas en ambas fases beneficiarán a más de 4.400 habitantes hasta el horizonte de 2049, de los cuales alrededor de 1.350 se corresponden con esta primera parte de la fase 1.

Los trabajos incluidos en este contrato contemplan completar la red de colectores existente entre la localidad de Valón, en la parroquia de Doniños, y la parroquia de A Cabana, con la instalación de cerca de 13,5 kilómetros de tuberías de distintos diámetros, así como los correspondientes pozos de registro.

Además, se proyectan siete estaciones de bombeo y conducciones —con más de cuatro kilómetros de tuberías de diversos diámetros— para superar los desniveles topográficos de la zona donde se ejecutarán las actuaciones. El proyecto también contempla la reposición de todos los firmes y pavimentos que se vean afectados durante la ejecución de las obras.