Estado en el que ha quedado el interior de una mezquita de la minoría alauita en Homs tras una explosión que ha matado a al menos 8 personas. Reuters
Se recrudece la violencia sectaria en Siria: 8 muertos y 18 heridos al estallar una bomba en una mezquita alauí en Homs
Este tipo de ataques contra esta minoría se han multiplicado desde la caída del régimen de Al Assad y su reemplazo por un Gobierno liderado por sunitas.
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Al menos ocho personas han muerto este viernes y otras 18 resultaron heridas por la explosión de una bomba en la mezquita alauí Imam Ali bin Abi Talib de la ciudad siria de Homs, según informó la agencia de noticias siria SANA, mientras que el ministerio del Interior calificó el hecho de "ataque terrorista".
La explosión tuvo lugar durante la oración del mediodía del viernes, la principal de la semana, y, según los primeros datos de la investigación, la bomba estaba colocada en el interior del templo, adscrito a la corriente alauí del islam, una rama minoritaria del chiismo que profesa el anterior presidente sirio, Bachar Al Asad, quien fue derrocado el 8 de diciembre de 2024.
Aunque el Ministerio de Exteriores sirio atribuyó el ataque al Estado Islámico, Saraya Ansar al-Sunnah, un grupo musulmán sunita sirio ultraconservador, se atribuyó en sus canales de Telegram el atentado. Anteriormente, el grupo terrorista se atribuyó la responsabilidad de un ataque suicida con bomba en una iglesia de Damasco en junio, en el que murieron 20 personas.
El director de Emergencias del Ministerio sirio de Sanidad, Najib al-Naasan, declaró a SANA que la cifra de víctimas todavía es preliminar.
El Consejo Islámico Supremo Alauta, organismo que afirma representar a los alauitas en Siria y en el extranjero, condenó lo que denominó una campaña sistemática de asesinatos, desplazamientos forzados, detenciones e incitación contra los alauitas durante más de un año.
Acusó a las autoridades de Damasco de responsabilidad y afirmó que la persistencia de los ataques podría llevar al país al colapso.
Países de la región, como Arabia Saudí, Líbano o Qatar también condenaron el ataque.
Siria se ha visto sacudida por varios episodios de violencia sectaria desde que el antiguo líder Bashar al Assad, un alauita , fuera derrocado por una ofensiva rebelde el año pasado y reemplazado por un Gobierno liderado por miembros de la mayoría musulmana sunita.
A principios de este mes, dos soldados estadounidenses y un intérprete civil fueron asesinados en el centro de Siria por un atacante descrito por las autoridades como presunto miembro del Estado Islámico, un violento grupo musulmán sunita.