Putin saca pecho de su influencia y su potencial militar frente al "nazismo" en el desfile del Día de la Victoria en Moscú

La Plaza Roja de Moscú ha acogido este viernes el gran desfile por el 80 aniversario del triunfo de la Unión Soviética sobre la Alemania nazi en la II Guerra Mundial, una cita marcada por el aislamiento de Moscú tras la invasión de Ucrania que Vladimir Putin ha revertido haciendo gala de su todavía influencia con una destacada lista de líderes internacionales presentes liderados por Xi Jinping.

También ha sacado pecho de su potencial militar y armamentístico haciendo desfilar parte de los drones que Rusia utiliza no sólo para atacar al Ejército ucraniano, también a la población civil dirigiéndolos contra colegios, hospitales y edificios residenciales.

De hecho, en su discurso ha apelado a la victoria soviética para continuar con su invasión en Ucrania y ha defendido que Rusia es "una barrera" para el "nazismo" poniendo especial énfasis en el que "todo el país" respalda la invasión en Ucrania.

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Putin ha estado acompañado de una veintena de líderes, entre ellos, los presidentes de China, Xi Jinping, de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, de Venezuela, Nicolás Maduro, el bielorruso Alexander Lukashenko, y el primer ministro eslovaco, Robert Fico.

También han asistido el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abás, el mandatario cubano Miguel Díaz-Canel, y el jefe de la junta militar de Burkina Faso, Ibrahim Traoré, lo que muestra esa cada vez mayor influencia de Rusia en África, sobre todo en la región del Sahel, después de la continua pérdida de prestigio de Francia entre sus antiguas colonias.

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Destacada ha sido la ausencia del presidente húngaro Viktor Orbán, que rechazó la invitación alegando que no iría "aunque hubiera buenas relaciones entre Rusia y Occidente" ya que el fin de la II Guerra Mundial supuso una de las peores derrotas de su historia.

Otra de las ausencias notables es la de Narendra Modi. El primer ministro indio canceló su invitación después del aumento de unas tensiones con Pakistán, que han acabado por estallar definitivamente esta semana con bombardeos entre ambos países.

Militares chinos y norcoreanos

Más de 11.500 militares rusos y de otros 13 países participaron en la parada militar de la Victoria en la Plaza Roja, entre ellos 1.500 combatientes de la guerra en Ucrania y la guardia de honor del Ejército Popular de Liberación de China. A ojos de todos Putin se ha reunido con tropas norcoreanas.

Putin junto al resto de líderes durante el desfile de este viernes en Moscú. Reuters

El desfile incluyó el paso de unas 130 máquinas de guerra, entre ellas los legendarios tanques soviéticos T-34 y piezas de artillería autopropulsada SU-100, utilizados durante la Segunda Guerra Mundial.

Como novedad, los drones de asalto que son utilizados en la campaña militar en Ucrania desfilaron a bordo de camiones todoterreno Kamaz.

Rusia, "barrera contra el nazismo"

En su alocución previa al comienzo del desfile, Putin, aseguró que todo el pueblo apoya a los soldados que participan en la campaña militar rusa en Ucrania desde el 24 de febrero de 2022.

"Todo el país, la sociedad, el pueblo apoya a los participantes en la operación militar especial. Nos sentimos orgullosos de su valentía y tesón, esa fuerza de espíritu que nos ha otorgado siempre y únicamente la victoria", dijo el jefe del Kremlin.

"Rusia siempre ha sido y seguirá siendo una barrera indestructible para el nazismo, la rusofobia y el antisemitismo", ha sostenido el mandatario ruso, antes de incidir en que el país "combatirá contra las atrocidades cometidas por los que proponen estas ideas agresivas y destructivas", también ha destacado.