El Papa el pasado 12 de febrero.

El Papa el pasado 12 de febrero. Europa Press

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El Papa sufre una neumonía bilateral con un "cuadro respiratorio complejo" y cancela su agenda hasta el domingo

Francisco no tiene fiebre mientras continúa recibiendo el nuevo tratamiento por "una infección polimicrobiana del tracto respiratorio". 

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S. D. I. Muñoz
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El Vaticano ha informado de que el Papa Francisco sufre una numonía bilateral. Este martes desde la Santa Sede confirmaban que debido a la hospitalización del papa Francisco se cancela su agenda hasta el domingo, incluyendo la audiencia jubilar prevista para este sábado y la misa con ocasión del Jubileo de los Diáconos de este domingo.

La Santa Sede ha difundido un comunicado esta tarde en el que se puede leer que "los análisis de laboratorio, la radiografía de tórax y las condiciones clínicas del Santo Padre siguen presentando un cuadro complejo".

"La infección polimicrobiana, surgida en el contexto de bronquiectasias y bronquitis asmática, y que requirió el uso de terapia antibiótica con cortisona, hace más complejo el tratamiento terapéutico. La tomografía computarizada de tórax de control a la que se sometió esta tarde al Santo Padre, prescrita por el equipo sanitario vaticano y el equipo médico de la Fundación Policlínica 'Agostino Gemelli', demostró la aparición de una neumonía bilateral que requirió una ulterior terapia farmacológica ", afirmaba el comunicado.

Pese a este último informe médico, desde el Vaticano insisten que el Papa "se encuentra bien de ánimo" y que el día transcurrió como otro cualquiera: "Esta mañana recibió la Eucaristía y, durante la jornada, alternó el descanso con la oración y la lectura de textos". Francisco "agradece la cercanía que siente en este momento y pide, con corazón agradecido, que sigamos rezando por él".

En el último parte, difundido este lunes, se informaba que el cuadro clínico del Papa es "complejo", por lo que se alargaría su hospitalización y se le iba a cambiar la terapia que recibe a pesar de que sigue estable y sin fiebre.

Con el papa Francisco se encuentran sus dos secretarios, que le llevan algunos documentos y los diarios, mientras el pontífice realiza algunas actividades laborales, aunque se le ha aconsejado absoluto reposo.

Estable y sin fiebre

El pontífice, de 88 años, sufre una infección respiratoria desde hace 10 días y fue ingresado el viernes en el hospital Gemelli de Roma.

Por el momento no hay fecha para que se le dé el alta, aclaró, pero el pontífice "está de buen humor".

A pesar de su hospitalización, Francisco volvió anoche a hablar con la parroquia de la Sagrada Familia, la única iglesia católica de Gaza, explicó a los medios italianos su párroco, el sacerdote argentino Gabriel Romanelli. 

Ya el pasado fin de semana los médicos le habían ordenado reposo absoluto, por lo que el papa Francisco no pudo pronunciar su oración semanal habitual del domingo ante los peregrinos en la Plaza de San Pedro ni dirigir una misa especial para artistas para conmemorar el Año Jubilar de la Iglesia Católica.