Un miembro del servicio ucraniano se prepara para disparar un mortero en una línea del frente.

Un miembro del servicio ucraniano se prepara para disparar un mortero en una línea del frente. Reuters Bakhmut

Europa

Ucrania proyecta su "santa venganza" contra Rusia mientras el Kremlin se reagrupa en Bakhmut

Las fuerzas rusas han disminuido temporalmente sus ataques contra la ciudad de Bakhmut, para reagruparse y fortalecer sus capacidades.

28 mayo, 2023 02:59

La toma de Bakhmut puso fin a la etapa en la que Rusia dominaba la ofensiva. Ahora, la fase de la contraofensiva ucraniana ha comenzado. En el día de ayer, Valerii Zaluzhnyi, comandante jefe de las Fuerzas Armadas de Ucrania, insinuó a través de su cuenta de Twitter que el inicio de la contraofensiva contra las fuerzas rusas podría ser inminente. "Ha llegado el momento de recuperar lo que es nuestro", aseguró.

El golpe asestado a la defensa ucraniana por la toma de Bakhmut no debilitó la fe depositada por los aliados occidentales. Estados Unidos anunció, durante la cumbre del G7, la dotación de cazas F-16 a las tropas ucranianas, lo que se suma a los tanques Leopard 2 conseguidos en el primer trimestre. Ucrania ha utilizado esta etapa de rearme para desgastar a su oponente en una zona que, tal y como reconoció el jefe del Grupo Wagner, Yevgeny Prigozhin, sólo tiene importancia simbólica, no estratégica.

Desde su última victoria, las fuerzas rusas han disminuido temporalmente sus ataques contra la ciudad de Bakhmut para reagruparse y fortalecer sus capacidades, según ha indicado un alto funcionario de Kiev. Además, desde Ucrania han señalado que están listos para lanzar una contraofensiva larga para recuperar el territorio tomado por Rusia desde el comienzo de la guerra.

[Ucrania insinúa el inicio de la contraofensiva de forma inminente: "Es el momento de recuperar lo nuestro"]

A pesar de que se esperaba un ataque histórico por parte de Ucrania, uno de los principales asesores de Zelenski, Mykhailo Podolyak, dejó bien claro el jueves pasado que "no se trata de un 'acontecimiento único' que comenzará a una hora concreta de un día concreto, con un corte solemne de una cinta roja". Aún así, asegura que la contraofensiva ya "está ocurriendo" -al menos las operaciones preliminares-. Podolyak lo define como "un proceso continuo de desocupación" y asegura que "llevará un periodo de tiempo bastante largo".

Después de la publicación en el día de ayer de Valerii Zaluzhnyi queda evidenciado que la intensidad y la tensión está aumentando, algo que ya adelantó Podolyak.

[Ucrania ataca Berdyansk, Krasnodar, Donetsk y Rostov para desarmar a Rusia de cara a la ofensiva]

A pesar de las amenazas, la incertidumbre se cierne sobre la ofensiva, la cual podría llegar "mañana, pasado mañana o dentro de una semana", según declara el secretario del Consejo de Defensa y Seguridad Nacional, Oleksiy Danilov, ante la BBC. Esta demora, asegura, se debe al perfeccionamiento de la misma, ya que Kiev "no tiene derecho a cometer un error. Es una oportunidad histórica que no pueden perder".

En la lucha contra el Kremlin también se han unido grupos de combatientes rusos opositores al Gobierno de Vladimir Putin (Legión Libertad de Rusia y el Cuerpo de Voluntarios Rusos), quienes han atacado la ciudad ucraniana de Bélgorod -fronteriza con Rusia-. En su reivindicación señalaron que quieren que sus hijos "crezcan en paz y sean libres", algo que es necesario para "ponerle fin a la dictadura del Kremlin".

Ante los rumores de ser apoyados por Kiev, Podolyak se ha pronunciado al respecto y ha negado tal vinculación. El asesor de Zelenski ha asegurado que Kiev no ha detenido la incursión porque "simpatiza profundamente con cualquier movimiento de protesta que haya en Rusia"; ante un régimen autoritario "¿cómo podemos evitar que sus propios ciudadanos hagan algo al respecto?", se ha preguntado.

Avance lento, pero efectivo

El éxito encontrado por Ucrania en sus ofensivas en Sumy, Járkov o Jersón reside en la labor previa al ataque. En todas ellas destaca la ausencia de grandes batallas, pero prima la labor de desarme de los sistemas de inteligencia rusos y la destrucción de sus fuentes de suministro, forzando así su retirada.

Es decir, el avance ucraniano reside en la huída rusa. Durante estos últimos meses la estrategia debía centrarse en objetivos a corta distancia. Sin embargo, con las dotaciones occidentales, Kiev ya puede aspirar a una contraofensiva a larga distancia. Sin traspasar territorio ruso, ya que infringiría las condiciones establecidas por los socios. 

Ucrania atacó la semana pasada Berdyansk, Krasnodar, Donetsk y Rostov, aunque se ignora si son parte del 'inicio de la contraofensiva' o si sólo forman parte de la fase preparatoria.