El presidente de Colombia, Gustavo Petro, la noche del miércoles en el municipio de El Carmen de Bolívar.

El presidente de Colombia, Gustavo Petro, la noche del miércoles en el municipio de El Carmen de Bolívar. Twitter

América Colombia

Petro culpa a España, su nuevo enemigo: "Grandes empresarios pagan para tumbar mi Gobierno"

El presidente de Colombia alega que existen "brutos" en su país que aceptan financiación de Madrid para "ver cómo cae" su mandato.

1 septiembre, 2023 03:20

Gustavo Petro apunta a un nuevo enemigo en España. En una nueva ronda de sus ya conocidos señalamientos, el presidente de Colombia ha mencionado a algunos "grandes empresarios" de nuestro país como los responsables de un complot contra su 'Gobierno del cambio'. Después de haber acusado a la Justicia, la prensa y hasta el "yugo español" en su año de mandato, el líder del país sudamericano sitúa la mano negra en las "platicas" [de plata, dinero] con las que algunos magnates de España intentan "tumbar el Gobierno".

El presidente pronunció estas palabras en El Carmen, un municipio del departamento de Bolívar al que se trasladó para entregar a víctimas del conflicto armado un lote de tierras expropiadas de la cementera Agros. Allí, advirtió a una audiencia humilde: "No se les ocurra hacer eso, porque estarían iniciando una nueva era de violencia". Pero parecía que Petro se dirigía a sus detractores en Bogotá, y no a su "pueblo trabajador", cuando trataba de aleccionar: "No sean brutos, que ya en la historia de Colombia eso se ha hecho".

Pero las advertencias del presidente no responden a ningún antecedente claro en el que se hayan visto implicadas entidades españolas. No se conocen injerencias recientes ni tampoco sospechas ―al menos públicamente― que justifiquen unas acusaciones que, sin embargo, aseguraban con vehemencia: "Hay quienes [...] recogen platicas de unos grandes empresarios españoles y se van a España, a ver cómo se tumba el Gobierno", como asestaba el mandatario contra un enemigo no identificado.

En su intervención, Petro describió con detalle la conjura de la que se cree víctima: "Una vez tumben las reformas, piensan destruir al presidente en la Comisión de Acusaciones para hacer lo mismo que se hizo en el Perú [con Pedro Castillo], es decir, llevar al presidente a la cárcel y cambiar el Gobierno por un nuevo presidente no elegido por el pueblo". El presidente lo denomina "golpe blando": "Es un golpe contra la voluntad popular", y garantiza que, de perpetrarse, tendrá "la respuesta del pueblo".

Otra de las maquinadoras de este 'golpe blando' es, según el propio presidente, la industria mediática. En su prédica, Petro culpó a la prensa de "irradiar" mentiras como el alza de la gasolina, que avivaron una marcha contra el Gobierno el pasado 16 de agosto. "Se mantiene su precio constante desde que asumí la presidencia", apuntilló el martes en una exhaustiva publicación de X en la que trataba de desmentir a los manifestantes, congregados en línea bajo el hashtag #NoAlGasolinazo.

El mandatario guardó espacio para ensalzar su Plan Nacional de Desarrollo, con el que devolvió a víctimas del conflicto armado solares arrebatados a "poseedores de tierra improductiva". En este caso, la 'expropiación exprés' se efectuó sobre solares de Argos, la principal cementera colombiana, culpable según Petro de "despojar de sus tierras al campesinado asesinando y regarlas de sangre".

Alusiones de Petro a España

Las declaraciones del Petro contra España contrastan con la época de prosperidad que él mismo auguró para las relaciones comerciales entre Bogotá y Madrid el pasado mes de mayo. En un encuento empresarial bilateral en la capital ibérica, encomió la inversión española como "una de las más altas de países de capitales extranjeros que llegan" a su país. También ofreció seguridad jurídica para las empresas de nuestro país que quisieran operar en la nación sudamericana.

[Petro apela a Juego de Tronos para justificar sus críticas al "yugo español": "Nos liberamos aquí y allá"]

Aunque es cierto que la simpatía que Petro mostró hacia las empresas de España no se extendió a otros aspectos de nuestro país. En concreto, hacia el comportamiento que mantenemos hacia Colombia. Durante su visita, el mandatario manifestó su preocupación por la vigencia de lógicas coloniales que deberían estar obsoletas. "Hay una oportunidad de ustedes y una oportunidad de nosotros, no podemos tratarnos como antes, porque no es una subordinación, aquí es una sociedad, somos socios", advirtió ante el foro.

En Madrid también coincidió con su homólogo español, Pedro Sánchez, a quien celebró como un gobernante progresista al que encontraba "para abrir caminos progresistas a la humanidad". Sánchez recibió a la delegación colombiana con honores militares.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez (d) y el presidente de Colombia, Gustavo Petro (i) .

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez (d) y el presidente de Colombia, Gustavo Petro (i) . Efe

Antes de la visita, en un discurso por el Día del Trabajo, Petro había celebrado la liberación de Colombia del "yugo español". El dirigente sudamericano aclaró sus declaraciones con una alusión a la serie Juego de Tronos: "En el Bachillerato nos enseñaron que el feudalismo era un sistema de dominación, en el que la gente estaba separada en dos clases: los siervos y los señores de la tierra. En la película (sic) Game of Thrones se muestra un poquito cómo era", dijo.