Imagen de archivo de mujer estresada en la oficina. Foto: iStock.

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Salud y Bienestar

Cortisol: ¿cómo impacta la hormona del estrés en nuestra salud?

El bienestar mental y físico está condicionado al estilo de vida. Conciliar la vida social, el trabajo y otras responsabilidades suponen un gran reto.

18 agosto, 2023 01:13

Con el actual rimo de vida, especialmente en las grandes ciudades, el estrés se ha convertido en ese compañero que nos sigue a todas partes. Se trata de un estado mental y físico, que surge como respuesta natural del cuerpo ante situaciones que suponen un desafío para nosotros, y que puede causar efectos adversos en nuestra salud.

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Gran parte de este impacto está directamente relacionado con una hormona clave: el cortisol. Conocida como la hormona del estrés, el cortisol juega un papel fundamental en diversas funciones del cuerpo, pero su desequilibrio puede desencadenar una serie de problemas que desajusten el correcto funcionamiento de nuestro organismo.

El cortisol se produce por las glándulas suprarrenales en respuesta a situaciones estresantes o amenazantes. Si bien su liberación es esencial para la supervivencia, cuando el estrés se vuelve crónico o excesivo, los niveles de esta hormona pueden mantenerse elevados durante períodos prolongados y desencadenar una serie de efectos negativos en el cuerpo.

Sistema inmunológico

Uno de los efectos más notables del cortisol es su influencia en el sistema inmunológico. A corto plazo, el cortisol puede ayudar a suprimir respuestas inflamatorias en situaciones de emergencia. Sin embargo, la exposición prolongada al cortisol elevado puede debilitar el sistema inmunológico, haciéndonos más susceptibles a enfermedades e infecciones.

Desequilibrios metabólicos

El cortisol también desempeña un papel crucial en el metabolismo. En situaciones de estrés, el cuerpo puede movilizar energía rápidamente al aumentar los niveles de glucosa en sangre. Sin embargo, cuando este mecanismo se activa con frecuencia debido al estrés crónico, puede llevar a problemas como la resistencia a la insulina, el aumento de peso y la acumulación de grasa abdominal.

Salud mental

Numerosas investigaciones han asociado el vínculo entre el estrés crónico y los niveles elevados de cortisol con trastornos como la ansiedad, la depresión y la falta de concentración. Además, el cortisol puede afectar el equilibrio de neurotransmisores en el cerebro, contribuyendo a la alteración del estado de ánimo.

Envejecimiento prematuro

También se ha demostrado que el cortisol juega un papel determinante en el proceso de envejecimiento celular, lo que lleva a la degeneración de tejidos y órganos. Además, los altos niveles de esta hormona pueden afectar la producción de colágeno y elastina, proteínas esenciales para mantener la piel joven y firme.

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Gestión del estrés

Si bien el cortisol puede tener efectos perjudiciales en la salud, existen estrategias efectivas para gestionar el estrés y mantener los niveles de cortisol en equilibrio. La práctica regular de ejercicios, la meditación, el yoga y una dieta equilibrada son formas probadas de reducir el estrés y controlar la liberación excesiva de cortisol.

El cortisol, esa hormona que nos prepara para lidiar con situaciones exigentes, puede convertirse en un arma de doble filo si no se mantiene en equilibrio. Sus efectos en el sistema inmunológico, el metabolismo, la salud mental y el envejecimiento hacen que comprender y gestionar el estrés sea esencial para preservar nuestra salud. Al adoptar un enfoque consciente hacia el manejo del estrés, podemos minimizar los impactos negativos del cortisol y mantener nuestro bienestar en óptimas condiciones