Dicen que uno de los riesgos de la llegada de multinacionales a Málaga es que igual que vienen pueden irse, dejando a la Málaga tecnológica tocada. Es cierto. No obstante, también es verdad que es ponerse la tirita antes de tener la herida y que, por ahora, las grandes empresas no solo se están asentando en Málaga sino que tienen importantes planes de crecimiento que son concretos y tangibles.

Uno de ellos es el Vodafone, que prevé abrir en primavera un nuevo centro de Innovación y Desarrollo en la zona de Martiricos, en la anterior facultad de Enfermería. Lo anunciaron el pasado 20 de enero tras la firma de acuerdo con la Universidad de Málaga y este lunes han dado más detalles. 

Se llamará Campus Vodafone-UMA y va a ser la joya de la corona de la multinacional en Málaga. Jesús Amores, responsable del Vodafone Innovation Hub, explica a EL ESPAÑOL de Málaga que el departamento de inmuebles de la multinacional y los técnicos de la UMA están ultimando el diseño del centro con vistas a abrirlo en la primavera. Hoy se ha dado a conocer una primera infografía, dándole una vida totalmente distinta a un espacio que fue facultad de Ciencias de la Información hace 20 años y posteriormente de Enfermería. 

Vodafone ya tiene contratadas a 300 personas en Málaga especializadas en tecnologías punteras como Internet de las cosas (IOT), big data, blockchain, metaverso, inteligencia artificial, cloud, drones, robótica o vehículos conectados, entre otras. Aquí hay personas procedentes de todas las partes del mundo que hacen proyectos innovadores de Vodafone para todo el planeta. 

Abrieron su centro de innovación el 31 de enero de 2022, pero se les ha quedado pequeño rápido. De hecho, la intención de la compañía es tener 600 trabajadores en los próximos cinco años tras realizar una inversión de 225 millones de euros. 

Vodafone mantendrá su actual centro junto a Vialia, una oficina en el parque tecnológico y el nuevo campus de Martiricos. "La idea es que Martiricos sea el gran centro de innovación para los tres o cuatro próximos años", indica Amores. 

¿Qué se va a hacer en ese campus? Amores lo tiene claro. "Queremos acercar lo que hacemos en Vodafone a los alumnos y a los profesores universitarios, que conozcan de primera mano que no solo nos dedicamos a redes y móviles sino que hacemos muchas más cosas, algo fundamental para atraer talento, y mi aspiración es ayudar a la UMA a adecuar sus contenidos tecnológicos a la demanda real de las empresas". 

Frente a la lentitud en la adaptación de las universidades a las necesidades del mercado -defendida incluso desde las propias universidades como hace el director de Estudios Universitarios de Eade, Gabriel Arrabal, en esta entrevista-, el reto de Vodafone es, según Amores, "que los jóvenes entiendan los conceptos y que seamos capaces de que el conocimiento se aplique a innovación que se venda y genere industria". 

Vodafone y la UMA van a trabajar codo con codo en proyectos relacionados con el Internet de las cosas, 5G, MPN y OpenRAN. Según detallan, para los 300 puestos de trabajos restantes, buscan arquitectos de producto y de soluciones, scrum masters, ingenieros de software, desarrolladores (front-end y back-end), ingenieros de datos, expertos en UX, expertos en procesos de venta digitales, analistas de datos, desarrolladores de Cloud, expertos en proyectos de innovación y financiación, expertos en blockchain y ciberseguridad, así como personal de recursos humanos e IT.

Quieren tirar de cantera en Málaga, pero para eso tienen que estar bien formados y Vodafone les va a dar la oportunidad. "Es una iniciativa muy importante para la formación de nuestros estudiantes, egresados y grupos de investigación, que van a tener la oportunidad desde Málaga de participar en la construcción de las tecnologías del futuro", asegura José Ángel Narváez, rector de la UMA. El tiempo dirá, pero si empresas y universidades -tanto públicas como privadas- van de la mano sí se está realmente más cerca de que Málaga sea un nuevo Silicon Valley.