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“Nos estamos jugando la seguridad”: hombres de trono, en contra del líquido anticera en la Semana Santa de Málaga
Descartada la opción de las pegatinas antideslizantes, la única opción del Ayuntamiento de momento es usar este producto, aunque de una manera más selectiva.
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A poco más de dos semanas para el inicio de la Semana Santa, la polémica sobre el uso del líquido anticera en las calles del centro de Málaga vuelve a estar sobre la mesa tras quedar descartado el uso de las pegatinas antideslizantes que se han estado probando en las últimas semanas. La Asociación Cultural Daffari Hombres de Trono ha alzado la voz contra este producto, utilizado por los servicios municipales de limpieza para eliminar la cera que dejan los penitentes por las calles que recorren en su salida procesional.
El principal problema, según denuncian desde la asociación, es que este compuesto químico no solo no resuelve la situación, sino que convierte el pavimento en una superficie altamente resbaladiza, poniendo en peligro a todos los participantes en las procesiones. “Expresamos nuestro total desacuerdo con el uso de cualquier producto que cree superficies más deslizantes en los itinerarios procesionales. Se han registrado numerosos accidentes entre los cuerpos de nazarenos, hombres de trono y personal de servicio”, afirman en un comunicado.
Patrimonio y seguridad
Este dilema no es nuevo. Cada año, la aplicación de este líquido genera quejas entre los cofrades, especialmente entre los hombres de trono, que deben soportar el peso de las imágenes y maniobrar con precisión en muchas calles peatonales, más resbaladizas de la cuenta. El hermano mayor de Humillación y Estrella, Rafael Retana, fue una de las víctimas de este líquido el pasado año, cuando durante la procesión pegó un fuerte resbalón tras el cual se fracturó la muñeca. “Los hombres de trono se resbalan al pisar este líquido e incluso los tronos, al bajar al suelo, se deslizan, llegando a comprometer la seguridad de quienes van debajo”, advierten desde Daffari.
A ello se suma el impacto sobre el patrimonio procesional. Como decíamos, el pavimento del casco histórico de Málaga ya es resbaladizo por naturaleza y, según la asociación, verter sobre él un compuesto químico que lo haga aún más inestable es un "error". Por eso, instan a las autoridades a cesar de inmediato su aplicación para evitar accidentes de mayor gravedad.
Una Semana Santa cada vez más condicionada
Desde la Asociación Cultural Daffari subrayan que la Semana Santa de Málaga está cada vez más regulada por cuestiones de seguridad, como ocurre con los aforamientos. Sin embargo, consideran que el uso de este líquido contradice ese mismo principio, ya que en lugar de facilitar el desarrollo de las procesiones, añade un nuevo riesgo.
Por ello, sumándose a las peticiones de hermandades y cofradías, la asociación aboga por recuperar métodos tradicionales de limpieza. “Comprendemos las características del pavimento del centro histórico, pero lo último que se debe hacer es regarlo con una solución química que multiplique su resbaladicidad”, señalan.
“La Semana Santa genera extraordinarios ingresos para nuestra ciudad. Es fundamental que esa prosperidad se traduzca en medidas que garanticen la seguridad y el bienestar de quienes, en parte, la hacemos posible”, concluyen desde la asociación.
El comunicado llega después de que se haya determinado que el Ayuntamiento no usará las pegatinas que se habían estado probando en las últimas semanas en la calle Especerías y que ya fueron rechazadas por la Agrupación de Cofradías públicamente.
Es por ello por lo que, ante la evidente falta de tiempo, no queda otra que usar el líquido anticera una vez más. Investigadores químicos de la Universidad de Málaga han estado trabajando en hacer menos resbaladizo el producto reformulándolo, pero parece que en este aspecto tampoco se ha avanzado lo suficiente como para llegar a Semana Santa. Mientras tanto, la polémica de su uso está servida.